El hilo rojo del destino

Capítulo 12: Amigos ~Madre~

Ante la entrada de aquel edificio de quince pisos se encontraron Mob y Hoyuelo con Teruki. Ambos espers habían coincidido en comprar algo de frituras y cerveza para la reunión. Entraron juntos y abordaron el elevador marcando el piso ocho.

—Es la primera vez que visito el apartamento de mi hermano, ellos se mudaron juntos después de que me fui a Ciudad Vegetal.

Pero Teruki no le prestaba mucha atención. Estaba mirando fijamente su celular, esperando a que Kanae le contestara.

—No hay suficiente señal en el elevador—observó Mob algo molesto.

—¿Ah? Lo siento, Shigeo. Estoy esperando un mensaje de Kanae-chan. Necesito confirmar si ya llegó a casa de su amiga.

El azabache levantó una ceja.

—¿Desde cuándo eres tan controlador con Kanae-chan?

—Desde que está embarazada—. Suspiró—. Lo siento. Sé que es molesto que me comporte así, pero esta situación me genera demasiada ansiedad. A veces siento que si no estoy junto a ella, algo malo le va a suceder.

—Considero que Kanae-chan tiene más capacidades para sobrevivir sola que tú—opinó Hoyuelo.

La broma del espectro sólo puso más nervioso a Teruki. En el momento en que llegaron al octavo piso y la puerta se abrió, el tan esperado mensaje llegó su teléfono.

Salut, mon amour.
Ya estoy en casa de Hitomi-chan. Dormiré aquí.
Bonne nuit.

—¿Ya estás tranquilo?—preguntó Mob.

—Sí, un poco... Creo.

Mob rodeó los hombros de su amigo, dándole un reconfortante abrazo, juntando sus cabezas. El rubio le sonrió en agradecimiento.

Buscaron el apartamento 804 y dieron con éste fácilmente por la placa en la puerta: "Suzuki/Kageyama". El pelirrojo les abrió y los invitados descargaron sus compras en la mesa de café donde ya había más frituras y cerveza.

—Esta será una noche divertida—dijo Shou y luego se volvió a Hoyuelo—. ¿Tú por qué viniste?

—No iba a dejarlo con Misuzu-chan de nuevo—contestó Mob con el seño fruncido.

Ritsu apareció con Mofletes III en sus manos, saludó efusivamente mientras buscaba la jaula del hámster para dejarlo en ella y guardarla en la habitación donde pudiera dormir tranquilo. Regresó a la sala para tomar asiento en el suelo, a la derecha de su pareja, quedando frente a su hermano mayor que se sentó del otro lado de la mesa junto a Teruki. Mob recorrió con la vista el apartamento, un poco más pequeño que el que compartía con Reigen. Había creído que entraría en un lugar muy lujoso, dada la posición económica de Shou, pero se encontró con un lugar muy sencillo aunque era muy obvio que su cuñado lo había amoblado porque su hermano era más minimalista.

—¿Cómo va el futuro papá?—preguntó Ritsu alcanzándole una cerveza con sus poderes.

—Bien...—respondió sin mucho convencimiento.

—Está asustado—añadió Hoyuelo dando una vuelta alrededor de Teruki.

—¿Asustado?—el rubio soltó un sonido burlón—. Estoy aterrado. No se qué hacer.

Shou alcanzó una cerveza a Mob y otra hacia Ritsu.

—Todo va a estar bien—le dijo Shou—. De seguro Kanae-chan sabrá qué hacer.

—Ja, ja, ja—pronunció cada sílaba con burla—. Hoyuelo me dijo algo parecido.

Las frituras volaron del empaque a un plato hondo que flotó entre los espers. Mob lo tomó con una mano para sacar su porción con la otra.