Acendrado ||Narry||Ziam||Omegaverse|| Historical-Fiction||

Capítulo 108: Cuchillos

Últimamente he tenido aquí muchos votos y comentarios. Y me he dicho a mi misma que ya estoy limpia, lista, que aunque comenzó esto de un modo ahora todo es diferente y yo alguien mejor.
Diez votos y actualizo.
Os amo.

Connor entró en la pequeña y acogedora casa que ahora en su corazón resonaba a hogar.

Ethan acababa de irse.  Tenía turno de noche.  Aún quedaban rescoldos del calor de la chimenea y la reavivó mientras se calentaba un poco de caldo de pollo para comerlo junto con unas natillas caseras. 

Estaba sentado a la mesa cuando unos golpes fuertes en la puerta.   Ethan nunca llamaría así, abriría con sus llaves.

Su corazón se desbocó cuando escuchó la voz de su padre, a gritos exigiendo que abriera esa puerta y que diera la cara ante el, que le había avergonzado aún más intentando cazar a un médico, que todo el pueblo lo sabía.

No podía reaccionar.  El terror le paralizaba.  Los golpes le hacían sentirse mal.

Entonces recordó que las casas habían sido reformadas y equipadas con todas las comodidades.

Sobre la mesa del salón estaba el teléfono de color verde oscuro.  Marcó los números de la casa de Niall.  Esperaba que Harry estuviese allí.

-¿Sí?

-Niall, soy Connor.

-¿Esos golpes...?

-Es mi padre y Ethan no está.

-Enciérrate bien.  Harry está ya de camino. 

Ethan se sintió súbitamente incómodo.  Algo iba mal con su omega.  Podía sentirlo en cada poro de su piel, en sus cabellos erizados.

Pero estaba en medio de una operación seria. Una histerectomía total a una mujer a la que había encontrado un tumor en el útero.  Había programado una intervención de urgencia y lo había hecho para cuando tuviese turno de noche, para que ninguna urgencia o agenda interrumpiese su concentración.

El tumor era de tamaño mediano, y solo la extirpación completa del aparato reproductor evitaría una muerte segura.

Se esforzó por concentrarse.  Nunca había pensado que tener un omega interferiría en su trabajo.  Mientras el sudor le recorría la frente se recordaba preguntarle a otros alfas como lo hacían.

Pero ahora tenía que concentrarse en la vida de esa mujer y tratar de mandar de alguna forma su amor a Connor.

Connor estaba acurrucado en el cuarto de Ethan.  No entendía como la noticia había corrido tan rápido y como había sido tan corta su felicidad.

La puerta cedió y entonces supo que estaba perdido.

Harry llegó y vio la puerta abierta.  Forzada.  Salto del coche y entró corriendo en la casa.  Se oían gritos de un cuarto.

El padre de Connor le estaba pegando, otra vez.  Connor intentaba defenderse, pero sangraba por la cara.

-Nunca debí aceptar como mi hijo sabiendo que no lo eras a una zorra como tú.  Pero no te vas a llevar la felicidad que yo no he tenido.  Voy a acabar con ese bebé y también con toda posibilidad de que tengas más...

Harry le agarró por detrás.  El cuchillo dejó una raja que empezó a sangrar en la ropa y el vientre de Connor.

Harry forcejeó con el hombre.  Niall había avisado a la policía, y afortunadamente llegaron  justo a tiempo para ver como el padre de Connor intentaba atacar a Harry en una zona vital, aunque esté ya sangraba por la mejilla.

Harry le arrancó el cuchillo y se lo clavó en el cuello, como si estuviese en el campo de batalla.

Connor apretaba una sábana contra la herida de su vientre.

Perdió el conocimiento camino del hospital.