Capítulo 100: Ars amandi

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Éste es un capítulo muy especial.  El capítulo 100.  Mi vida y yo misma éramos distintas cuando esta aventura comenzó.  Entonces tenía una compañera de viaje, luego seguí sola.  Si estuve mucho tiempo sin escribir de amor fue porque el desamor me carcomía y no podía escribir cosas hermosas. El tiempo, amigos, mi hermano... y los thai dramas me hicieron volver a creer que el amor existe y aunque ahora sigo caminando sola, nunca se sabe cuando encontraré alguien en el camino.
Y a los que seguís ahí... gracias, os adoro.





Faith se despertó.  Era extraño.  Su padre solía ser quien la despertaba.

Bajó de la cama y fue descalza hasta la habitación de Niall.  Estaba abierta.

Su padre estaba dormido. Faith subió a la cama.

-Papi, han pasado ya las siete.  Es domingo.

Los domingos iban al cementerio primero y al servicio religioso después.

-Me siento mal.  Tengo sueño y me siento enfermo.  Iremos al cementerio por la tarde.

-¿Y no iremos a la iglesia?

-Dios me ha enviado suficiente sufrimiento como para poder saltarme un servicio religioso.

Faith no lo entendió, pero se acurrucó en la cama junto a su padre.  Le tocó la frente.

-¿Estás bien? ¿Es lo de respirar?

-Estoy bien, cariño.  Es el estómago.

-Papá...

-Mi niña, estoy bien.  Se me pasará.  En unas horas me sentiré mejor.

-Pero...

-Faith -Niall se sentó.  Su estómago protestó y envió bilis a su garganta.

-No estás bien... no quiero que te mueras como papá y Hope...

Niall no pudo contestar. Había dejado una palangana junto a la cama, ya que el día anterior también había vomitado por la mañana, pero no quería hacerlo frente a su hija.  Corrió al baño y arrojó el contenido de su estómago.  Esto le provocó un alivio momentáneo.  Sabía que no tardaría en volver.

Se metió en la cama y abrazó a la niña.

-Faith, no me voy a morir.  En realidad... estoy enfermo pero también feliz.  Me siento mal porque vas a tener un hermano o hermana.  Eso provoca en nosotros, los omega, molestias.  También las tuve cuando te esperaba a ti pero esta vez son más fuertes.

Niall sonrió mirando a su hija.  Sus síntomas eran más fuertes y molestos porque estaba llevando una alimentación mejor.  El doctor se lo había dicho.

-¿Un hermano? ¿Cómo lo has hecho? No tengo otro papá, esta muerto.

-Bueno... tengo que explicarte más cosas sobre cómo funcionan los alfas y los omegas, pero a veces los bebés llegan antes de que los papás se unan.

-¿Quién es su papá?

-¿Te cae bien Harry?

-Sí.  Desde que viene por casa sonríes más.  ¿Él es el papá?

-Sí, es el papá y también será tu papá pronto.  Voy a casarme con Harry.  Será mi marido y formaremos una nueva familia,, tú, tu hermano y nosotros.  Y quizás más hermanos.

Faith sonrió.

-Faith, cariño, esto no quiere decir que debes olvidar a tu padre y a tu hermana.  Ellos siempre estarán en nuestro corazón. Esta tarde iremos a ponerles flores, como siempre.

-Papá.

-Dime.

-Estoy muy contenta.  Pero tú sigues teniendo muy mala cara.  ¿ Vas a vomitar?

-Creo que si, cariño.  Ve a tu cuarto.  Cuando me sienta mejor iré y te llevaré a desayunar fuera. 

-Vale, papi.



Faith bajo las escaleras.  Tenía hambre y esperaba que al menos la señora que les ayudaba en casa estuviese despierta.

No había nadie.

Se acercó al teléfono.  Éste estaba en el salón sobre una mesa.  Al lado había una lista de nombres y números.

Buscó el del responsable de que su papá esperase un bebé.  No le costó encontrarlo.  General Harry Styles.

Marcó los números.  Le costó un poco, sus dedos eran pequeños para los agujeros y para hacer rodar el disco con los números.

Se escuchó un ruido.  Era la operadora conectando las llamadas pero no lo sabía.

-General Styles.

-Hola, señor Styles. Soy Faith. Quería decirle que me cae usted muy bien y me alegro de que se vaya a casar con papá pero por su culpa ahora mismo papá se encuentra muy enfermo.  No para de vomitar y dice que hoy no iremos a la Iglesia. Nunca hemos faltado.

-Estare alli en unos minutos.



Harry colgó el teléfono.

-Josh, tengo que salir y Zayn y Liam no han vuelto anoche.  ¿Quieres venir?

-De acuerdo, Harry.

-Vamos a casa de mi futuro esposo.  Está indispuesto.  Espera un bebé mío.

Josh sonrió.  Él sabía mucho más que Faith de la vida.

-Vaya, el recto general Styles ha puesto su herramienta en el agujero antes de tiempo, ¿eh?

-Vuelve a hacer un comentario así y te daré una colleja.  Tienes que ser más respetuoso.

-Lo siento.

-Venga, ve a lavarte y vestirte.

El chico obedeció.  En menos de media hora Harry estaba llamando a la puerta de la casa de Niall.

La empleada de Niall ya estaba despierta.  Le invito a pasar.  Harry le entregó un paquete.

-Bizcochos de chocolate.  Para los niños.

-Se los pondré con un poco de leche.

-Iré al cuarto de Niall.

Harry subió las escaleras y abrió la puerta sin llamar.  Niall le miró.  Estaba saliendo del baño cubierto de sudor.

-Acuestate -Harry le cogio del brazo y le llevó a la cama -Dios, estás muy pálido.

-Me siento muy mal.  No paro de vomitar.

Harry cogio la palangana.  Volvió con una toalla y agua fría.

-Telefoneé al doctor Wellington antes de venir. -sacó un frasco de su bolsillo – Éste jarabe es manzanilla, jengibre y azúcar.  -vertió una cantidad en un vaso pequeño – vamos, te sentirás mejor después

Niall obedeció.  Harry comenzó a aliviar su sudor pasando un paño frío por toda su cara.

-Faith ya sabe...

-Ella me llamó.  Me dijo que estabas enfermo.

Niall apoyó la cabeza en el estómago de Harry.

-Harry.

-Dime.

-No me dejes nunca, por favor.

Harry le acarició el cabello.

-Nunca.

El jarabe también contenía valeriana.  Poco a poco Niall se fue quedando dormido.

Acendrado ||Narry||Ziam||Omegaverse|| Historical-Fiction||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora