Capítulo 30: Doctor Coleman y ayudante

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Niall nunca se había fijado demasiado en los pasillos, techos o ventanas del hospital.

Hasta ese día.

No le habían dejado pasar con Faith a raíz de no había entendido muy bien qué política de riesgos de salud.

-Niall, ya he llegado.

Harry dio dos pasos atrás cuando Louis, alfa actual de Niall a todos los efectos, llegó.

-Los techos tienen humedades -dijo Niall entonces – las ventanas están en mal estado y los azulejos podrían estar más limpios.

-¿Le han sedado? -preguntó Louis.

-No, yo le he estimulado un poco con mis feromonas.

-Niall, ya me lo han contado todo. Dominick ha venido conmigo. Vamos a averiguar qué ocurre...

-¿Señor Tomlinson?

Niall se giró bruscamente hacia el doctor.

-Faith está fuera de peligro pero lamentó que tanto yo como el resto del equipo hemos convenido en nuestra reunión que... lo mejor es practicar un corte definitivo por la ingle para evitar posibles infecciones que conduzcan a patologías peores como puedan ser sepsis o gangrena...

-¿Mi hija va a perder la pierna?

-Yo he visto la herida. He visto peores heridas en el frente. -dijo Harry.

-Por desgracia hemos estado sufriendo recortes que no garantizan la plena asepsia de nuestros quirófanos y...

Louis se adelantó. Y Dominick le vio por primera vez como el alfa que sabía qué era.

-Por supuesto que han sufrido recortes. Desvíos, más bien. Mientras han reducido en personal, material y mantenimiento usted se ha comprado una casa preciosa en la costa francesa. Esta semana el doctor Coleman y yo hemos tenido mucho tiempo para investigar. Esta información ya está en un sobre en mano de mis abogados y usted tiene diez minutos para irse del hospital público de mi pueblo antes de que considere si merece seguir vivo. De todos modos, este hospital necesita más reformas de las que el gobierno puede afrontar pero mientras esas reformas llegan, habrá otra clínica. Ahora mueva su huesudo culo de mierda y deje que el doctor Coleman salve la pierna de mi sobrina.

Dominick le apretó el hombro.

-Tú me ayudarás.





Faith se despertó con una sensación muy extraña.

Seguía teniendo sueño pero no recordaba cuando se había quedado dormida.

Las niñas grandes no se quedaban dormidas así como así, en cualquier sitio.

Luego se dio cuenta de que no sentía casi nada del cuerpo. Como si estuviera muy pesado.

-¿Papi?

-¡Mi vida!

Niall se arrojó sobre la cama de su hija. Faith observó confusa. No estaba en casa.

-Papi...

-Cariño, todo está bien. Han tenido que operarte. Has estado muchas horas dormida y esta especie de cables en tu brazo te ponen medicamentos y por eso te sientes rara.

-Es de noche.

-El doctor Coleman y el tío Louis te han estado operando durante seis horas.

Niall levantó la colcha.

-Pero te vas a poner bien.

Bajo el camisón el cuerpo de Faith estaba absolutamente completo aunque vendado y cubierto con gasas desde la ingle hasta la rodilla.

-¡Voy a tener una cicatriz como el tío Louis!

Niall se rió.

-Sí, vas a tener una cicatriz como él. Ha estado ahí fuera. Y Harry. Y el doctor Coleman...

-¿Pueden pasar?

-Ahora mismo no. Llevo este gorro y estos guantes y este traje para que no se te infecte la herida. Pero en unos días, si podrás.



Louis y Dominick habían tardado horas en ir sacando los restos de cuerpos extraños, arena, hierro, de entre los músculos de la pierna de Faith. Pero ambos sabía que en la situación de ese y la mayoría de los hospitales lo más problemático empezaba tras la intervención.

Las infecciones bacterianas o los virus oportunistas eran los principales enemigos del postoperatorio.

Por eso habían enviado a Faith a una sala aislada hasta que estuviese más recuperada.

-Saldré a decirles que estás bien.





Louis iba a morirse de dolor.

Todas esas horas de pie, todo ese movimiento... todo eso había sido demasiado.

Dominick podía notarlo. Las vibraciones de su alfa, dolorido y enfermo le llegaban y le hacían sentirse mal.

"Su alfa", esas palabras resultaban complicadas.

Pero encajaban con demasiada perfección en su mente.

-Se ha despertado.

Las palabras de Niall desencadenaron suspiros de alivio generalizado.

-Id a descansar un poco. Me quedaré toda la noche.

Acendrado ||Narry||Ziam||Omegaverse|| Historical-Fiction||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora