Acendrado ||Narry||Ziam||Omegaverse|| Historical-Fiction||

Capítulo 8: Mañana oscura

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La naturaleza de Niall no le permitía mostrar debilidad.

Por ese y otros motivos estaba con los ojos abiertos mirando como amanecía y preparándose mentalmente para ser capaz de salir de la cama y tratar de simular que el día anterior no había ocurrido y que no se sentía enfermo como si tuviese el estómago del revés, la garganta llena de arena y la cabeza a punto de estallar.

No estaba acostumbrado a beber tanto.   Normalmente un ligero mareo le servía de señal para detenerse, a veces  un poco más de eso , y de la última vez hacia años.   Antes de ser padre. 

Desde entonces, solo había tomado ocasionalmente una copa mientras charlaba con Louis o miraba fotografías viejas. 

Quería levantarse, vestirse, bajar a desayunar y hacer como que nada había pasado.

Como que no había llorado hasta deshacerse con Louis.  Como que no había besado al general.

La escasa luz de ese día gris estaba entrando por la ventana e iluminando el cuarto.  Niall seguía mareado, apenas había dormido y no se sentía capaz de levantarse.

A la luz tenue de ese amanecer invernal la habitación donde durante años había vivido, amado, llorado en silencio, vivido la pasión y el dolor y en definitiva, visto cada noche con la inercia de la rutina adquirió un toque fantasmal. 

Maldita sea, debía seguir medio ebrio porque para sus ojos las fotografías viejas con marcos desgastados parecían danzar de un modo burlón.  El baúl parecía acusarle de ser incapaz de seguir adelante. 

"La guerra ha terminado pero tú sigues llevándola dentro".

Se levantó y corrió con pasos torpes al cuarto de baño que estaba en él pasillo.  Cuando se instaló en la casa tenía todos los lujos y su cuarto matrimonial un aseo propio, pero éste  estaba estropeado.  Había que reparar las tuberías y la cisterna no funcionaba y no se atrevía a pedirle más cosas a Louis.

Entró en el cuarto de baño y tuvo una primera arcada.  Luego siguió vaciándose con violentos espasmos de su estómago. 

-¿Papá?

Harry abrió la puerta del cuarto de invitados.  Faith estaba mirando con timidez hacia el baño.

-Estoy bien, cariño.  -dijo Niall – Algo me sentó mal.

-Seguro que fue ese bacalao.

Harry intervino entonces.

-Faith, tu papá no se siente bien.  Vamos a dejarle a solas.

Tomó a la niña en brazos y bajo al salón.

-Buenos días -dijo Louis.

-Niall no se siente nada bien -dijo Harry.  Puso a la niña en el suelo – Faith, ¿serías tan amable de traerme una pieza de fruta?

La niña asintió dejando solos a los dos alfas.

-No está bien, me gustaría atenderle.  Cuidar de él.

Louis inclinó la cabeza.

-¿Me está pidiendo alguna clase de permiso, general?

-Se que esto es sumamente impropio e inesperado pero usted es el alfa de mayor categoría cercano a Niall y por lo tanto estoy pidiéndole permiso para poder conocerle mejor.  Y cuidarle hoy.

-Acaba de conocerle y me pide permiso para cuidarle en una resaca.  ¿Cómo negarme ante un alfa así?  De todos modos, anoche decidí que le aprobaba como pretendiente.  Y creáme, no es el primero que trata de utilizarme para acceder a mi cuñado.  A todos les aparte sin que él llegase a enterarse.

-¿Por qué a mí no?

-Porque me gustas para él -dijo Louis, cambiando al tuteo – y porque he notado que hay algo entre vosotros. 

-No esperaba esto.  Pensaba que llegaría, le entregaría los objetos y...

-Así es como funciona.  Eso dicen. 

-¿Puedes encargarte de Faith? Niall no podrá...

-Puedo llevármela.  Iba a ir al hospital pero iré solo un rato y luego me la llevaré a pasear.

-Vuelvo con Niall entonces.

Niall jadeó tratando de respirar.  Era incapaz de parar de vomitar.  Nunca se había sentido así antes. 

Alguien se agachó tras él y a su cuerpo mareado y su estómago revuelto le envolvió un olor dulce que hacía mucho tiempo había olido, pero distinto...

Estuvo a punto de susurrar "George", quizás lo hizo.  Pero sabía que no era él.

Era el general. 

El general Styles le abrazó, y le levantó la cabeza del inodoro.

-Tranquilo. -dijo limpiándole la boca con una toalla húmeda.

-Me siento muy enfermo.  Nunca había sentido esto, aunque a veces había bebido de más.

-Seguro que no de ese alcohol barato de baja calidad.  Teníamos ese en el frente, para entrar en calor, para el dolor o para olvidar.  Importa más la graduación que el sabor, y está hecho en destilerías que estoy seguro no son a las que usted compraba licores antes de la guerra.

-Solo vendían ese y me costó caro.

-No lo dudo.

-Y un anfitrión debe tener licor para ofrecer una copa a los invitados.

-Lo sé... ademas hacía mucho que no bebías.

-Deje de ponerme excusas -gimió Niall, pero apoyo la cabeza contra su pecho buscando su olor calmante.  Harry le pasó un paño con hielos por la nuca – Me comporte de un modo inaceptable, sobre todo con usted...

-No es cierto. 

Niall se convulsionó y Harry le apartó el cabello y le colocó la cabeza en el inodoro.  Luego le masajeó la espalda para ayudarle.

-Vamos, tienes que expulsarlo todo.  Cuando lo hagas te sentirás mejor. 

Harry le acarició los omóplatos.  Había visto soldados con resacas así por el licor de baja calidad en el frente y hasta se había reído, les había obligado a hacer sus deberes y les había sermoneado por irresponsables. 

Pero no a ese omega.  Iba a cuidarle durante todas las horas que se avecinaban.