Dejar ir

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Siempre duele mucho alejarse de las personas, pero duele aún más que te la arrebaten de un momento a otro. Sin poder despedirte. Sin poder decirle lo mucho que la querías, lo mucho que te gustaba, lo feliz que eras al tenerla a tu lado. Había llegado un día de esos a nosotros.
El treinta y uno de octubre fue el día en el qué perdimos a Emma.
Después de que ella corriera a socorrer a su hermano e Izana le disparase, ella siguió con vida los minutos siguientes. Algunos de la banda seguían peleando sin saber que había pasado. Hanma golpeaba a Draken y no le dejaba ir en su ayuda.
Yo corrí hacia ella y la sujete entre mis brazos.
-Emma aguanta, todo va a salir bien- digo muy asustada mientras aprieto su herida con fuerza tratando de parar la hemorragia. Mis intentos no eran efectivos ya que la herida no dejaba de sangrar cada vez más. Yo intentaba de diferentes maneras mantenerla a salvo pero ella parecía darse por vencida.
-T/N...- dice ella con dificultad mientras sujeta mi mano con fuerza- Sé que no voy a salir de esta..
- Emma por favor no digas eso, voy a sacarte de aquí. Te prometo que voy a salvarte- digo entre lágrimas. Ella me sonríe levemente y niega con la cabeza.
- Este es mi final T/N...y no me arrepiento de nada. Por favor, cuida de Mikey y Draken por mí- mis lágrimas estallan acompañadas de un fuerte dolor en el pecho.
La ambulancia ya se escuchaba más cerca y esta vez la sirena iba acompañada de algunas otras que pertenecían a coches de policía.
Muchos de la banda de Izana huyeron, incluido el. El resto de miembros estaban muy malheridos en el suelo. Incluso algunos habían llegado a sufrir algunos balazos.
Mikey y Draken se acercan como pueden a nosotras. Ambos tienen todo el cuerpo lleno de magulladuras y apenas pueden moverse.
Los dos se acercan a Emma entre lagrimas.
- Tranquila Emma, estamos aquí contigo y vamos a salvarte- dice Draken.
- Aguanta hermanita- ninguno de los dos tiene la suficiente fuerza.
Mis lágrimas no dejan de caer al ver a Emma desvanecerse poco a poco.
Agarro a Emma con fuerza y la levanto en peso sacándola de la carpa en dirección al sonido de las sirenas.
- Emma por favor aguanta- vuelvo a gritar entre sollozos mientras la aprieto contra mi pecho. Ella no deja de mirarme con una sonrisa.
Ya se ve la ambulancia a lo lejos. Mikey y Draken me siguen.
Acelero el paso todo lo que puedo para llegar cuanto antes pero unos metros antes de llegar Emma me agarra la mano.
- Para T/N...por favor- mi cuerpo se bloquea y se para en seco. Mis ojos no dejan de mirarla.
- ¿Qué haces T/N?! Sigue adelante- grita Mikey.
- No!- grita Emma. Mi cuerpo vuelve a quedarse sin fuerzas y caigo de rodillas sin dejar de sujetarla.
Mikey y Draken caen a nuestra altura mientras las lágrimas brotan de sus ojos.
- Mikey...gracias por haberme cuidado y protegido durante todo este tiempo. Has sido el mejor hermano que se puede llegar a tener- Mikey comienza a llorar mientras sujeta su mano.
- Draken, no puedo irme más feliz de este mundo que siendo tu esposa. Gracias por todo el tiempo que hemos pasado juntos. De verdad chicos, he sido muy feliz-
Bajo la vista y mi cuerpo rompe en llanto. Ella sigue mirándome con una sonrisa y acaricia mi mejilla.
- T/N, eres la chica más increíble y valiente que he conocido nunca. Sé que los dejo en buenas manos. Por favor, cuida de Mikey y Draken...-
Emma nos dedica una ultima sonrisa mientras los tres sujetamos su mano.
Antes de que los enfermeros lleguen a nosotros, Emma, da su último aliento.

Las siguientes horas son un interrogatorio. La policía está en la carpa hablando con todos los de la banda. Para que nadie fuese a la cárcel todos se pusieron de acuerdo en decir que había sido un atraco. De lo contrario, haber dicho que fue un ajusto de bandas habría puesto en graves problemas a la Tokyo Manji.
Ya casi han terminado con todos, solo falto yo. Me encuentro sentada en una de las sillas de la carpa. Mi vestido, al igual que mis manos están llenas de sangre. La sangre de Emma.
Los enfermeros trataron de reanimarla pero no se pudo hacer nada. No puedo moverme, solo consigo apretar mis puños con fuerza contra mis muslos mientras no dejo de llorar.
Mikey y Draken, a pesar de ser los más afectados son los que más tranquilos se ven. Son de esas personas que aunque por fuera no expresen nada, ahora mismo en su interior están ludiendo una batalla que claramente no pueden ganar. El dolor de perder a una hermana o a la chica con la que hace unas horas te acabas de casar...ese dolor no tiene reparo.

Sin embargo yo no puedo reprimirme. Mi cuerpo necesita expulsar todo el dolor. Hinata me abraza con fuerza pero ella, al igual que yo, no puede dejar de llorar.
Uno de los policías se acerca a mi y le pide a Hina que nos deje solos.
- Señorita, siento mucho tener que hacerle estas preguntas en un momento tan difícil, pero es mi trabajo- añade el policía.
Yo asiento con la cabeza y trato de tranquilizarme. El llanto cesa un poco, pero las lágrimas no dejan de caer por mis mejillas.
- Si cree que le cuesta mucho hablar, escríbame las respuestas a estas preguntas, por favor- el chico me pasa una carpeta y un boli.
Miro la hoja y me dispongo a responderlas.
(¿Conocía a los atacantes?)
-No
(¿Podría describirme a los atacantes?)
- No pude verles la cara
(¿Hay algún motivo por el que alguien querría atacarlos?)
- No lo sé
(¿Era familia de la víctima?)

La víctima. La chica a la que habían asesinado. Emma.
Cojo la carpeta y se la doy al policía mientras, me pongo en pie arrastrando la silla con fuerza.
- Señorita, todavía no ha contestado a todas las preguntas.
- Y no lo pienso hacer. No conocíamos a los agresores y es más que obvio que si conocíamos a la víctima. Pero la víctima tiene nombre. Se llamaba Emma...- Hago una pequeña pausa- se llama, Emma. Ya tienen la información que querían así que hagan el favor de dejarnos en paz-

Esa misma noche, decidimos pasarla todos juntos en el almacén. Todos estamos muy dolidos por lo que ha pasado, pero Mikey y Draken parecen puros fantasmas. Ambos están más aislados apoyados junto a una ventana del piso de arriba. Ninguno habla.
Me acerco a ellos y los miro. Ellos me devuelven la mirada. Nuestros ojos están rojos y muy hinchados.
Ofrezco mi mano a ambos y ellas la toman. Yo las agarro con fuerza.
- Esto no se va a quedar así, aunque sea lo último que haga, aunque me cueste la vida...os juro que esto no se va a quedar así-
- No tenías mucha relación con ella T/N, no te incumbe- susurra Mikey volviendo la vista a la ventana.
- Te equívocas Mikey. Desde que conocí a Emma, en todo momento la adoré y también la envidié y desee ser ella en muchos momentos. Emma era la chica más risueña y alegre que he conocido nunca y ni ella ni nadie se merecía lo que le ha pasado. Es una cuestión de amistad y amor. Emma nos ha dejado un gran vacío a todos. Ya no tendré a la chica que venía a verme en los entrenamientos para que no me sintiera sola entre tantos chicos, ya no tendré a la chica que todos los días me recordaba lo fuerte que era, no tendré a la chica que hacía feliz a todas las personas a las que quiero. Te equivocas Mikey, si me incumbe, y mucho-
Mikey suspira tristemente, se acerca a mi y me abraza con fuerza.

Al día siguiente celebramos el entierro. Duró varias horas. Después de la misa todos fueron saliendo de la sala. Mikey, Draken y yo nos esperamos para entrar los últimos a verla. Yo me quedé detrás.
Mikey se acercó a ella, durante unos minutos le estuvo susurrando algo para luego acariciar su mejilla y depositar un último beso en su frente.
Draken la estuvo mirando todo el tiempo, como si quisiera plasmar su rostro en su mente. Como si aún intentara asimilar que la había perdido.
Ambos me abrazan un poco a cada lado intentando de igual manera darme fuerzas para verla una última vez.
- Nunca te irás de nosotros Emma, siempre vas a permanecer aquí. Me has enseñado demasiadas cosas sin siquiera explicarme. Voy a cuidarles lo mejor que pueda, te lo prometo. Al igual que te prometo que tu muerte no se va a quedar en vano.
Te prometo Emma que voy a acabar con el- susurro mientras beso su frente.

Me giro hacia los chicos. Mikey, Draken y ahora también toda La toman tras ellos.
- Vamos a acabar con la banda de Tenjiku...Voy a acabar con Izana Kurokawa-

Lo que pasó entre La toman y yo •Terminada•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora