Lo que pasó entre La toman y yo •Terminada•

Búsqueda

Buscar a Mikey resulta aún más complicado de lo que yo había pensado. Hasta he optado por el camino fácil de llamarlo al móvil o mandarle mensajes. Como era de esperar no responde a ninguna de las dos.
Draken y los demás lo han estado buscando por los pueblos cercanos y hablando con otras bandas, pero nadie parece saber nada.

Llevamos en búsqueda más de dos meses y sin conseguir nada. Ahora Draken y yo nos estamos encargando de la banda pero es demasiada responsabilidad... Tus acciones y decisiones son las que deciden el futuro y la vida de los demás. El ya está acostumbrado ya que cuando Mikey estaba y se ausentaba Draken era quien le sustituía. Pero para mí esto es demasiado.
Hace varias noches nos entraron a atacar en el almacén una banda de la que no teníamos conocimiento alguno.
Nos pillaron medio dormidos y algunos quedaron heridos de gravedad. Por suerte pudimos ganar la pelea pero no tuvimos ánimos de celebrarlo. Seis de los nuestros quedaron muy graves ya que los enemigos usaron armas blancas contra nosotros. Aún siguen en el hospital pero por suerte, ya están fuera de peligro.

Son casi las dos de la mañana y me encuentro apoyada en la ventana que hay en la parte superior del almacén. Aquí fue donde pasé mis últimos días con Mikey mientras lo veía dormir.
Echando la vista atrás, han pasado demasiadas cosas desde que llegue a esta ciudad. A veces pienso en que habría pasado si no hubiese decidido venir o si no me hubiera adentrado en la Toman.
¿Mikey seguiría aquí? ¿Y Emma?

Pienso en ella cada día. La echo demasiado de menos y echo de menos todo lo bueno que hacía a su alrededor. Hacía feliz a Draken a quién no he vuelto a ver sonreír de la misma manera que cuando lo conocí.
Hacía reir a Mikey y eso era realmente hermoso de ver. Desde que se fue es como si aquellos cuerpos fueran contenedores vacíos, sin alma... Cuerpos que simplemente vagan por una pequeña existencia pero que realmente no están aquí.

Quiero a Draken. A pesar de todo esto hemos pasado momentos muy hermoso juntos, pero el y yo tuvimos una conversación sobre lo que iba a pasar entre nosotros.

"No quiero traerte más dolor, ni a tí ni a nadie. Puedes tener esa felicidad que buscas lejos de aquí. Siempre me has dicho que quieres ampliar tu negocio y montar un taller en Europa. Ve y cumple ese sueño. He pensado muy bien en mi vida y en todo el daño que ha traído. No quiero decir con esto que vaya a alejarme de ti porque tu siempre estarás en mi mente y en mi corazón Draken. Algo realmente en mí no está bien y tampoco creo que este hecha para esto del amor. En mi pensar solo creo que trae desgracia y dolor. Nunca me perdonaría que os pasara algo a ninguno de vosotros. No voy a perder a ninguna familia más. Por eso te pido, por el bien de los dos, ya que sé que tú también lo necesitas porque no estás bien. Necesitas paz y tranquilidad. Por eso quiero mantener una amistad pura y sincera contigo. No sabemos dónde está Mikey, no sabemos con qué gente se está juntando ni que tan peligrosa es. Pero una cosa si es clara y es que si tengo que dar mi vida por salvar a Mikey, lo haré"

Draken entendió mis palabras y estuvo totalmente de acuerdo. Nunca hemos estado en una relación seria. Tampoco creo que estemos hechos para eso.
Pero el dolor que Emma dejó en nosotros no se quitará jamás. Entiendo muy bien que en su corazón siempre estará Emma y que una parte de el se culpa por estar conmigo. Por eso lo mejor para ambos, es dejar una pequeña distancia para que el dolor sane y así por fin volver a vivir de verdad.

Sigo sin tener nada de sueño así que decido ir a dar un paseo y respirar el aire fresco de la madrugada. Me encanta pasear de noche. Me recuerda a esas noches de verano en las que volvía a casa a las tantas con mis padres después de haber cenado fuera y pasar un buen rato en la feria. Mi padre me llevaba siempre que podía y esas noches eran insuperables.
Camino hasta la calle principal donde en seguida el ruido se apodera de todo. Esta ciudad nunca duerme. Los coches, las luces, la gente... Sea la hora que sea siempre está lleno y muy iluminado.

Paso por un pequeño puesto de dorayakis caseros. Son los favoritos de Mikey. Decido comprar uno recién hecho y comerlo mientras sigo con el paseo. Llego hasta un pequeño mirador donde se ve gran parte de la ciudad. Las vistas son preciosas. Termino de comer el dorayaki que aún sigue caliente sin poder evitar pensar en Mikey. Se ponía muy feliz cada vez que le compraba uno.

Me quedo mirando el paisaje metida en mis pensamientos sin darme cuenta que un poco más apartado de mi se encuentra otra persona apoyada en el mirador. No le hago caso y sigo metida en lo mío de tal manera que pierdo la noción del tiempo. Y es cuando el sol está saliendo justo delante de mí cuando me doy cuenta de lo tarde que se me ha hecho.

- Debes de tener bastantes problemas para haberte pasado tantas horas aquí plantada- dice una voz a mi lado. Al escucharla tan cerca hace que me sobresalto y el rostro de la chica se entristece un poco.

- Perdona, no quería asustarte. Es que me había preocupado un poco la verdad...llevo viendo unas horas y me daba miedo que te diera una loca y decidieras saltar- miro a la chica y no puedo evitar sonreír de manera burlona.

- Ojalá pudiera hacerlo, ¿Sabes? - digo mientras apoyo los brazos en la barandilla de madera. La chica me mira aún más con preocupación.

- No me malinterpretes, no tengo intención. Pero de haber venido aquí hoy para tirarme al vacío solo significaría que he logrado todo lo que tenía en mente ya que en mis pensamientos no está irme de este mundo sin antes zanjar unos asuntos pendientes- puedo escuchar como la chica suspira aliviada y ahora me mira con una sonrisa.

- Me gusta como piensas. Mikey sabe elegir muy bien a sus amigos- al escucharla la miro sorprendida.

-¿Conoces a Mikey? ¿Sabes dónde está?- pregunto.

- Por desgracia no. Igual empecé a buscarlo hace algún tiempo y no hay manera. Os estuve viendo como igualmente vosotros lo buscabais sin descanso-
- No es coincidencia que nos hayamos encontrado aquí hoy, ¿cierto? - pregunto a la chica mientras la miro atenta.

-No, por desgracia no. Creo que cuatro ojos ven más que dos. Aún muchos más si unimos fuerzas ambas bandas para poder encontrar a Mikey-

- ¿Quién eres tú?- pregunto directamente. ¿Quién es esta chica? ¿De qué conoce a Mikey y porque quiere ayudarnos?

La chica me mira con una amplia sonrisa y responde:

-Mi nombre es Senju Akashi, y soy la líder de Brahman-