Lo que pasó entre La toman y yo •Terminada•

Un solo ganador

Por fin ha llegado el día tan esperado. El día en el que podemos recuperar a Mikey. Todos hemos entrenado mucho para este día, pero tenemos el mismo nivel de valentía como de temor. Todos y cada uno de la banda han acudido para la pelea y ya no hay vuelta atrás.

No nos mareamos demasiado y decidimos no evadir más la espera, así que cuando ya estaban todos en el almacén pusimos rumbo al lugar acordado.

Por cada minuto que pasa me tiemblan más y más las piernas. En lo único que puedo pensar es en que todo esto se acabe de una vez y que todos vuelvan a tener su vida, una vida feliz.

Nos lleva un rato llegar ya que el lugar acordado está casi a las afueras y es en un pequeño pueblo abandonado. Nadie, ni siquiera la policía va por esa zona así que es el lugar idóneo para ponerle un fin a esto.

Una vez llegamos dejamos las motos en la entrada del pueblo y decidimos ir a pie. Por el momento solo hay silencio de no ser por el viento que ha saltado de repente.

No cabe duda de que la banda de Mikey es mucho mayor que la nuestra, pero no por ello nos vamos a echar atrás.

De esta batalla solo una banda saldrá ganadora.

Mientras seguimos caminando por el pueblo llegamos a una parte donde se han acabado las casas y solo hay asfalto y algunas farolas. A lo lejos se ven algunas motos aparcadas y con unas siluetas a su alrededor. 

- Son ellos, ¿verdad?- pregunta Takemichi.

- Así es- respondo - Chicos, antes de que se acerquen está es la última oportunidad que tendréis. Puedo que ellos no os dejen rendiros-

Algunos se miran entre sí pero no dicen nada. Doy por hecho que ninguno se va a dar la vuelta. La pelea es ahora y con todos.

La banda de Mikey comienza a andar hacia nosotros. A medida que se van acercando es cuando vamos reconociendo las siluetas y es ahí cuando más me empieza a temblar todo el cuerpo. Realmente es una banda muy poderosa y no tengo tiempo de pensar en sí le ganaremos o no. Ahora solo queda pelear con todas nuestras fuerzas y que sea lo que tenga que pasar.

Ellos se acercan bastante pero aún siguen dejando una larga distancia. Junto a Mikey, Tetta Kisaki nos mira con burla y superioridad mientras sonríe y le susurra algo a Mikey en el oído.

Siento tanta rabia que apenas puedo controlarme.

- Voy a borrarte esa sonrisita de la cara en un momento Kisaki, así que ríete mientras puedas- añado malhumorada. 

Draken, Baji, entre otros me miran sorprendidos. No pretendo enfadarlos pero ahora mismo es algo que no puedo evitar.

- Como en toda batalla, la pelea acaba cuando pierde el capitán- digo mientras me giro hacia ellos. Así que mientras podáis, intentad mantener ocupados al resto. Aunque Mikey es muy fuerte de por sí y no necesita a nadie. Pero yo iré por el-

- No voy a dejarte que hagas eso- dice Draken.

- ¿Acaso crees que Hanma, con el odio que te tiene va a dejar que des un paso? Al igual que los demás. Esto es un ajuste de cuentas Draken. Aquí acabará todo vínculo, odio o cualquier cosa que se tenga con aquellas personas. Me aterraba la idea de enfrentarme a Mikey, pero pensándolo bien no me queda de otra-

Los miro a todos y a pesar de mis nervios intento dedicarles una sonrisa.

- Os deseo toda la suerte del mundo, sois lo mejor que haya podido conocer. Sed valientes y luchad con todas vuestras fuerzas. Hoy ganaremos a la Kanto Manji. Chicos...- suspiro y trato de coger fuerzas. - Os veo después de esto-

Despejo todo pensamiento de pena ya que es muy probable que no los vuelva a ver. Pero en estos momentos solo importa una cosa y es por la que hemos venido.

- Mikey!- grita Draken dando unos pasos al frente.

- Tú no quieres esta guerra, tú no quieres hacer daño a los que te quieren. Por eso estamos aquí. Para traerte de vuelta. No queremos hacerte daño, pero si esta es la única manera, así será. Por favor, no lleves más muertes en tu conciencia-

Las palabras de Draken hacen que todo se vuelva a quedar en silencio. Por una pequeña milésima de segundo llegue a tener una pequeña esperanza de que Mikey nos dijera algo que corroborara nuestras dudas sobre que el no quiere esto y que lo están chantajeando.

Eso no llego.

Lo que si llegó, fue uno de los dolores más fuertes que pude sentir nunca en mi pecho, sin que nadie me llegara a tocar.

Mikey nos dedicó una mirada de rabia y a continuación les dijo a sus hombres.

- Acabad con ellos-

Al oír sus palabras ya sentí que lo había perdido para siempre. Pero no iba a echarme atrás. Pienso luchar hasta el final para recuperarte.

Todo se quedó en silencio en mi cabeza y como si pasara a cámara lenta, ambas bandas corríamos hacia la otra para enfrentarnos por fin. Había llegado el momento.

Puñetazos, patadas, cabezazos...ahora solo la violencia llenaba aquel lugar.

Como era de esperar y como les dije ante cada uno tiene su propio contrincante. De alguna manera tienen un asunto pendiente que tienen que solucionar. Por eso Hanma se abalanza con fuerza para golpear a Draken. Al igual que Sanzu lo hace con Senju, sin importarle que sea de su misma sangre.

La pelea ya ha comenzado y no va a tener un buen final. Kisaki va directo hacia mí y como siempre con un arma la ropa. Es tan miserable y cobarde.

- No vales nada Kisaki, no sé que le has metido en la cabeza a Mikey pero el va a volver con nosotros-

El vuelve a burlarse frente a mí.

- ¿De verdad crees que yo he tenido algo que ver en la decisión de Mikey? Fue por su voluntad propia crear esta banda y querer acabar con vosotros- añade el.

- Mikey jamás habría hecho eso sin una mala razón- me abalanzo sobre el y en cuestión de segundos saca su arma y me apunta a la cabeza.

- ¿Por qué tanta prisa? Esto acaba de empezar y tengo a dos amigos que tienen que terminar una antigua charla contigo- dice Kisaki mientras da unos pasos hacia atrás y los hermanos Haitani se acercan a mí.

A lo lejos puedo ver a Mikey allí parado mientras observa todo. No voy a dejarme vencer y voy a llegar hasta el.

Ambos hermanos me miran con desprecio mientras me dispongo a dar el primer golpe pero algo me golpea el hombro y me hace girar la vista. Es Senju. Está limpiándose la sangre que le sale del labio.

- ¿Qué hay de Sanzu?- pregunto

- Wakasa se encargará de él- ella aprieta una de mis manos con fuerza mientras mira a los hermanos Haitani.

- Acabemos con ellos de una vez y recuperemos a Mikey- añade Senju.