Lo que pasó entre La toman y yo •Terminada•

La visita

Los siguientes días se me hacen muy extraños. Emma organizó un grupo en el teléfono para ayudarla con cosas de su boda. A mi me metió sin siquiera preguntarme pero, ¿debería abandonarlo? ¿Qué explicación le daría cuando me preguntara? "Lo siento pero me he salido porque no quiero ver como organizas la boda con el chico que me gusta" por dios T/N...
A cada momento el teléfono suena y recibe mensajes del tipo "necesito que me acompañéis a mirar los vestidos" o "estoy tan feliz de casarme con Draken". Todos y cada uno de esos mensajes se me clavan en el pecho.

No quiero ir a ningún lado con Emma, no quiero acudir a esa boda. Lo siento mucho por ella. No tiene la culpa de lo que ha sucedido pero no puedo evitar odiarla un poco. Es un sentimiento horrible hacia una persona tan buena que no me ha hecho nada.
Suspiro molesta conmigo misma por sentirme así. Me tumbo en el sofá y me tapo la cara con un cojín. Me siento tan frustrada.

Consigo quedarme un poco dormida cuando Mikey me llama por teléfono. Descuelgo la llamada y enseguida escucho gritos de otros chicos. Parecen estar discutiendo por algo de un traje por lo que alcanzo a escuchar.
- Ey T/N sino estás ocupada, ¿Por qué no vienes con nosotros a tomar algo?- antes de poder contestar tocan el timbre.
- Dame un segundo Mikey, están llamando a la puerta- sin descolgar la llamada voy a abrir la puerta cuando siento el golpe de alguien en mi cara. El golpe es tan fuerte que me hace caer al suelo y quejarme de dolor.
-Pero que cojones...- digo alzando la vista y ver a mi tía delante de mí con su rostro de asco y enfado. Mikey parece haberme escuchado ya que al otro lado del teléfono se escucha: "T/N, ¿estás bien? ¿Qué pasa?" No puedo contestarle ya que ante el golpe el teléfono salió disparado lejos de mi. En seguida que ella entra a la casa me agarra de la camiseta y comienza a golpearme en la cara.

-Niñata desagradecida. Con todo lo que yo he hecho por ti tienes el valor de hacerme esto. ¿Acaso crees que no sabría que vendrías aquí?- cuando me agarra la parte delantera de mi camiseta se levanta dejando a ver mi vendaje en el abdomen.
- Veo que no te ha ido del todo bien, ¿verdad?. Ahora me vas a pagar por hacerme esto. Todo lo que tienes me pertenece. De no ser por mi estarías muerta- me agarra de la camiseta con más fuerza y me golpea fuertemente en la herida haciendo que grite de dolor. Aún no está muy curada por lo que en cuestión de segundos la herida se abre y comienza a empapar de sangre todo el vendaje. Ella me empuja contra el suelo donde apenas me puedo mover por el dolor.

-Volverás a casa conmigo. Venderos esta asquerosa casa y me darás todo el dinero. Después de eso te voy a internar niña. No estás capacitada mentalmente para estar tú sola y yo no voy a hacerme más cargo de ti- se abalanzan de nuevo sobre mi ejerciéndome presión en la herida y haciéndome gritar.

-Eres una desgraciada- digo con dificultad- sabes que no dejaré que hagas nada de eso y aún menos que toques un simple centavo del dinero de mis padres. A ellos les costo mucho ganarlo, pero tú lo único que hacías es pedir prestado, ¿sabes por qué? Porque eres una inútil y una falsa. Siempre ibas de buena cara ante mis padres pero luego los humillabas a sus espaldas. Eso es de ser una hija de puta...- el rostro de ella cada vez se transforma más

-Ya estoy harta de ti, maldita niña. Siempre te he odiado tanto...creo que voy a arreglar las cosas de otra manera- ella aprieta mis piernas con las suyas mientras me agarra del cuello con ambas manos dejándome inmóvil.

-Aunque me quede sin nada voy a acabar contigo- comienza a ejercer cada vez más  presión. La cara me comienza a arder. El rostro victorioso de ella me da cada vez más rabia. Su sonrisa triunfante. La que siempre me ponía cuando a mi me tocaba ocultar lo qué me hacia.
Miro a mi alrededor buscando algo con lo que poder golpearla para quitarla de encima. Mis brazos a penas responden y algún golpe directo no creo que consiga hacer nada. Consigo agarrar un pequeño jarrón que había en una mesita y se lo estampo en la cabeza. Ella se echa para atrás apretándose la herida donde ahora le brota sangre. Yo consigo respirar por fin pero la herida del abdomen me anula demasiado. Como puedo me levanto, cojo mi teléfono y voy hacia la cocina.
- Mikey!- grito colocándome el teléfono en el oído.
- T/N no sé que está pasando pero ya estamos de camino, aguanta ya casi llegamos!- grita el mientras se escucha el sonido de las motos a través de el.
- Mi tía..está aquí...-
*sonido de línea cortada*
-Tranquila que antes de que lleguen habremos acabado con esto- dice ella con un cable en la mano. Maldita bruja.
Ella saca un arma y me apunta con ella.
- Había dado por echo que no te vendrías por las buenas- el sonido de unas motos a lo lejos hace que ella baje la guardia durante unos segundos. Momento en el que aprovecho para abalanzarme sobre ella e intentar quitarle el arma. Ambas forcejeamos durante un tiempo hasta que se escucha un fuerte disparo.

Mikey, Draken y Pahchin entran en la casa derribando la puerta de una patada. Cuando llegan a la cocina me encuentran en el suelo de rodillas con las manos ensangrentadas. Mi tía está en el suelo, desangrándose, probablemente esté muerta.
Mis manos comienzan a temblar y mis lagrimas caen con fuerza de mis ojos. Estoy en shock. No puedo hablar ni moverme. Los chicos han llamado a la policía y en cuestión de minutos entran a la casa acompañados de la ambulancia.
Unos enfermeros acuden al cuerpo de mi tía y otro acude a mi para revisar mi abdomen.
La policía está hablando con los chicos peor no logro escuchar nada, apenas consigo mantenerme en pie. La ambulancia se lleva el cuerpo tapado de mi tía, lo que me da a entender que está muerta. La...la he matado.
Después de curarme uno de los policías se acerca a mi y pone unas esposas.
- Señorita T/N T/apellido, queda detenida por asesinato a mano armada- no puedo reaccionar, no puedo negarme. Maldita sea. Ni siquiera puedo hablar para contar lo que ha pasado.
Una vez el policía me mete en el coche veo por la ventanilla como Mikey y Draken les gritan algo y luego me miran a mí.
No sé que pasa, pero tengo la vista muy cansada. Lo último que veo es a Draken golpeando el cristal del coche de policía antes de desmayarme.