Alison Black
Ayer fue un día lindo. De verdad, las horas que nos la pasamos juntos en la mañana, y luego que saliéramos... parecíamos una pareja de verdad. De mi parte mi felicidad, cada risa y cada momento fue real, lo disfruté mucho. Fue tan bonito, tan sincero que a ratos dolía pensar en qué tal vez Ethan solo sentía lástima por mi. Que solo quería hacerme sentir mejor.
¿Porqué no solo decirle lo que siento? Pues iba a hacerlo, pero luego de que Jack apareciera mi cabeza está perdida en otro lugar. Aunque ayer traté de transmitir todo eso sin las palabras. Fue como un Te quiero que jamás dije.
Todo fue perfecto, hasta que el primer mensaje llegó mientras estábamos almorzando. No sé cómo Jack consiguió mi número, aunque tampoco es tan difícil con la influencia que tiene.
¿Podemos vernos?
No respondí porque claramente no tengo intenciones de volver a verlo. Pero siguió insistiendo, y terminó arruinando mi noche. Todo el día había sido tan perfecto que en mi vida es obvio que no podía salir todo bien.
Solo un café, Ali. Quiero hablar, he cambiado, y te juro que no es mi intención hacerte daño. ¿Temes que tu esposo me vea?
Seria bueno conocerlo ¿No crees?
Tenía miles de mensajes así. Ayer, hoy. Cuando fui a dormir y cuando me levanté temprano para correr, me sirve cuando quiero pensar pero no estaba funcionando. Mientras me duchaba pensaba en la posibilidad de que Jack siguiera siendo tan insistente y que viniera aquí. Imaginé cómo sería que se topara con Ethan y eso no saldría bien, ni aunque Ethan no tenga idea de mi pasado.
Así que aquí estoy, frente al teñido. Y no, hoy no me siento como una persona débil. Tengo una extraña calma. Y creo saber porque.
Es porque no temo enfrentarme a él si así consigo que Ethan esté bien.
-¿Que quieres?
-Te ves preciosa- me sonrió.
-Dime algo que no sepa- dije sarcástica.
-Tengo mi auto aquí- Señaló un auto de lujo que estaba estacionado frente a nosotros- ¿Vamos por un café?
-Prefiero caminar.
-No voy a secuestrarte Alison.
-No estoy segura de eso.
-¿No confías en mi?- preguntó dolido.
-Tu pregunta es estúpida. Claro que no confío- dije obvia.
-Bien. Caminemos- dijo rendido- Pero te arriesgas a que todo el mundo te vea conmigo, y me han reconocido en cada calle por la que he pasado- presumió.
Mierda. Es verdad. Jack sonrió victorioso. Caminó hasta su auto y me abrió la puerta.
-La princesa primero.
Dudé mucho. Claro que no quiero estar en el mismo lugar cerrado que el. Pero no tengo opción. Así que lo hice. Y fue muy incómodo, su auto lleno de lujos excesivos no me gusta. Es extremadamente llamativo. Por suerte llegamos a una cafetería, quise sentarme en la terraza para respirar, su perfume me tiene mareada. Que asco.
-¿Y?- insistí.
-No soy el mismo chico que conociste hace años.
-Puedo verlo- aseguré.
-Me refiero a como fui contigo- me miró a los ojos- Estaba mal y tú tenías razón, necesitaba ayuda. Tú no merecías ser maltratada así. Nadie merece eso. Y me costó aceptarlo. Porque esos ataques de ira no siempre fueron parte de mi.
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Todo comenzó con un contrato
Storie d'amoreNovela destacada de Octubre 2022!!!! 🏆 Alison Morgan, tenía todo lo que pudiera desear: fama, respeto, éxito, dinero. Pero no tenía lo más importante, por lo que había luchado toda su vida, la presidencia del imperio familiar. Existía una condició...