Green Eyes © |SIN EDITAR|

3.

¡Hola! Lamento tanto haber tardo en subir este capítulo, pero estuve algo ocupada. Espero que les guste, y realice pequeños cambios, por los cuales muchos se quejaban. 

No olviden pasarse por mi nueva historia "Unbreakable" la encontrarán en mi perfil. 

Pueden encontrarme en instagram y twitter con el user DenisseGBellamy, estaré encantada de darles follow<3

Siendo todo por ahora... ¡Disfruten su lectura! 

~*~ 

—¿Aun no estás lista? —Siento a papá entrando en mi habitación—. ¿Qué tienes, By? —Su tono de sorpresa sólo indica que no me veo nada bien.

—No me siento bien —Suelto, tratando de hacer que el malestar desparezca de mi cuerpo, pero no lo logro. La mano de papá se detiene sobre mi frente y, en una fracción de segundo, lo veo alejarse, soltando un siseo ante la temperatura de mi cuerpo—. ¿Soy lo bastante caliente para que me toquen?

La diversión tiñe mi voz, a lo que papá niega suavemente. Si, al parecer estaba enferma, y era algo que no sólo pasaría con una sopa mágica de mamá. Un suspiro es liberado de mi parte cuando noto que aun tengo tiempo para llegar a la segunda clase, sin mucho esfuerzo logro quitar la sabana que cubre mi cuerpo, ganándome una mirada desaprobatoria por parte de mi parte.

—¿A dónde crees que vas, jovencita? —Papá me empuja nuevamente en la cama, observándome con el ceño fruncido—. Estás ardiendo en fiebre.

—Tomaré una ducha fría —Indico, regalándole una sonrisa—. Tengo un examen en una hora, no puedo faltar, Blair —El hombre frente a mi me mira mal cuando lo llamo por su nombre de pila, lo cual me hace reír. Amaba molestarlo un poco—. Lo sé, también odio al maestro.

Me levanto ignorando las palabras de papá cuando me indica que la salud es más importante que un examen y me pierdo en el interior del baño.

Me sentía como un grano en el culo. Justo ahora, lo único que quería hacer era meter la cabeza en un aguajero y sacarla el día que me sienta mejora. Como toda una jirafa que medía un metro sesenta. Nótese el sarcasmo. Todo era por terminar la carrera, y poder publicar mi primer libro.

Todo valía la pena si llegaba a cumplir mi sueño.

Me deshago de la sudadera y del pantalón de yoga que había tomado a media noche cuando el frío había empezado a calar en lo más profundo de mis huesos. El dormir sin ropa interior sólo era un hábito que había adquirido desde niña.

Era cómodo dormir sin nada bajo el pijama.

Una vez que me meto a la ducha, el agua fría cae con rapidez sobre mi cuerpo, haciéndome soltar un chillido. El vapor no tarda en aparecer en el ambiente, haciéndome saber que tan caliente estaba.

¿Realmente era posible que un cuerpo forme tanto vapor?...

Era extraño.

Cierro mis ojos, dejando que el agua se llevará todo el rastro de la fiebre de mi cuerpo.

Necesito salir... By, por favor.

Mis ojos se abren de golpe, ignorando el agua que cae sobre mi rostro, y escaneo todo mí alrededor. Estaba en el baño, completamente sola. Aquella voz retumba como un eco incesante en mi cabeza, haciendo que el miedo se filtre en mi sistema.