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Capítulo 20

—By, te dije que no salieras sin mí. —La voz de Taylor suena irritada atreves del teléfono, pongo los ojos en blanco, levantando el dedo, señalando a Emma que me espere un segundo.

—Taylor, estoy en la estética junto a Emma, no me pasara nada ¿Está bien? —Un gruñido se escucha de parte de Taylor.

—Estaré allí en una hora, debo arreglar unos problemas con Sean, no te muevas de ahí, By. Hablo enserio.

—Como sea. —Respondo, algo irritada—. Tengo que irme, Emma me espera. —Sin esperar su respuesta, termino con la llamada, guardando mi teléfono en el pequeño bolso que cuelga de mi hombro.

—Creo que ya encontré un color que quedaría genial en ti. —Observo la caja con algo de duda, el color era realmente desconocido para mí, por lo que me adelanto a negar con la cabeza. No queriendo hacer sufrir a mi cabello—. El color es genial, te lo prometo. —Emma tira de mi mano, llevando hacia las sillas vacías.

La sigo, aun dudando sobre el cambio de color, pero ya había pasado mucho tiempo desde la última vez que lo hice, y esa mañana me había despertado con ganas de cambiar el color.

Al no obtener respuesta de mis padres ni de Bastian, me había detenido en mi búsqueda de respuestas, por ese lado no conseguiría nada, y más aun sabiendo la negación que Taylor tenia sobre que buscara al licántropo que estaba detrás de mi familia.

Pero necesitaba respuestas.

Y si no era por el lado de mi familia, las conseguiría en otro lugar. Solo que no tenía idea de cómo hacerlo.

—¿Qué sabes de los dos chicos que llegaron a la universidad con olor a vampiro? —Pregunto, no dándole mucha importancia. Emma se detiene por un segundo, pero casi al instante, regresa a su trabajo.

—Nada. —Su boca se cierra con rapidez y la veo tragar saliva—. En realidad Taylor no ha dicho nada de eso a la manada, el que se encargo del problema fue Sean.

—¿Él los conocía? —Emma se encoge de hombros, observándome a través del cristal.

—Sean y Taylor son muy diferentes... la primera vez que llego con Eider a la manada fue algo extraño. —Mi ceño se frunce. ¿No era la primera vez de Eider en la manada?

—¿La primera vez? ¿Ya ha estado ahí antes? —Emma me lanza una mirada confundida, para luego asentir.

—Es la segunda vez que veo a Eider... luego de lo que ocurrió con un grupo de Rogues. —Ella niega con la cabeza—. Fue algo triste.

—¿Qué ocurrió? —Emma suelta un suspiro ante mi insistencia, pero no dice nada, solo se limita a aplicar la capa de color a mi cabello.

—No es algo que me corresponde decir a mí, es algo muy personal para Sean y Eider. —Asiento entendiendo su punto. Pero la duda sigue instalada en mí. ¿Por qué Taylor no me había hablado sobre eso?

¿Tan malo era?

Una hora después estaba observándome frente al espejo de cuerpo completo que había en la estética, el azul en mi cabello parecía algo sucio, pero el tono del gris lo dejaba realmente bien.

—Esta genial. —Digo, observando con atención mi cabello—. ¿De dónde sacaste el color?

—¿Viste el último video de Hilary Duff? —Niego con rapidez. Había estado algo alejada del internet—. Bueno, yo sí. El color se ve genial en la oscuridad, luces bajas, algo romántico, no sé si me entiendes. —Suelto un risa, entendiéndola completamente bien.