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Al oírle decir aquello, Rory se dejó caer sobre la cama, con la mirada clavada al frente mientras se pasaba la mano por el pelo. Pensando en qué debía de contestar. 

La idea de estar con Rafe era algo que ella realmente quería. Esperaba que tarde o temprano llegara el momento en el que lo hablasen y formalizaran lo suyo, pero ella esperaba que fuera más tarde que temprano. No es que no estuviera segura de la decisión, sabía que quería decir que sí, con todo su corazón. Aunque su última experiencia amorosa le impedía por una parte aceptar, ya que tenía miedo de acabar igual de mal que la última vez. Además, la discusión con JJ aquella misma mañana la había dejado bastante dolida. Él era su mejor amigo y nunca habían discutido de una manera parecida. 

Rafe se tensó sobre su sitio, tapado todavía por la sabana. Se acercó a Rory y apoyó una mano sobre la de ella.

-Dime algo Rory...

-Rafe yo... Quiero estar contigo, de verdad. Pero ahora mismo no puedo decirte lo que quieres escuchar. 

-A qué te refieres? ¿Ha pasado algo?

-No, bueno, si...-cogió una bocanada de aire- esta mañana he tenido una discusión bastante fuerte con JJ, nos vio en el aparcamiento el día de la película. 

Entonces Rory le explicó lo ocurrido aquella mañana en el Chateau, lo de su pelea con el rubio y la discusión de Kie con Jonh B por lo de Sarah y todo aquello.

-Rafe aparte de Jonh B y ahora JJ nadie más sabe lo nuestro y me gustaría poder explicárselo al resto antes de nada, y creo que tu deberías hacer lo mismo con tus amigos.

-Si... Tienes razón.

Ambos quedaron en que les hablarían a sus amigos del otro antes de formalizar nada, para hacer las cosas bien. Se despidieron y finalmente la rubia se fue. 

Era tarde así que se fue directa a casa con su padre. Al día siguiente hablaría con el grupo sobre lo suyo con Rafe e intentaría arreglar las cosas con JJ. Al llegar a casa, su padre había encargado pizza, cosa que le alegró bastante a Rory. Ambos se sentaron en el comedor mientras veían una película juntos.


Cuando Rory se despertó, supo que le esperaría un día bastante intenso. Cuando desbloqueó su teléfono, vio que Kie les había citado en el restaurante de sus padres para invitarles a desayunar, eso le facilitó a Rory las cosas, ya que allí estarían todos juntos para darles la noticia.

La rubia se preparó y salió directa hacia The Wreck donde les esperaría. Una vez llegó, se encontró a Pope, Jonh B y Kie sentados en su mesa habitual en la terraza, pero ni rastro del rubio. 

-Bueno, ya estamos todos-sonrió Jonh B mientras le daba un beso en la frente a Rory en forma de saludo.

-Todavía falta JJ no?

-No, no vendrá. Ha dicho que tenía cosas que hacer.-respondió Kie.

Rory sabía que no venía por la discusión del día anterior, al igual que Jonh B. En ese momento, decidió dejar a un lado el tema del rubio y concentrarse en explicarle a sus otros dos amigos todo aquello.

Kie sirvió el desayuno. En la mesa colocó unos gofres y unos batidos y zumo para todos. 

-Joder Kie, están de muerte.

-Gracias Jonh B, pero no seas tan cerdo, tienes toda la cara llena de chocolate-dijo mientras reíamos todos.

Estuvieron disfrutando de la comida entre risas, hasta que finalmente la rubia se armó de valor.

-Chicos quiero contaros algo, pero antes que nada necesito que me escuchéis y me dejéis terminar.-Kie y Pope se miraron extrañados, Jonh B ya sabía de lo que se trataba así que le dedicó una mirada cómplice de soporte a su amiga. Deseando que esta conversación no acabara tan mal como la suya el día anterior.

A contracorriente || Rafe CameronDonde viven las historias. Descúbrelo ahora