Prefacio

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No creo en el amor, no digo que no exista (que lo dudo) pero si existe se acaba, pronto. Nada dura para siempre, todo el que te promete amor eterno en algún momento te engaña: mental o físicamente, es inevitable.

El hombre inteligente aprende de sus propios errores, y el sabio de los errores de los demás.

Jamás he pasado ese estado tan típico en los adolescentes, el estar "enamorado" porque ¿qué es el amor? ¿Es esperar algo de alguien del que siquiera signifiques nada para él o ella? Te destruyes desde lo más hondo de ti mismo, entregándote a otra persona. ¿Qué pasa cuándo no tengas más para dar? Te lo diré: todo se acaba.

La gente se aburre, se cansa de siempre tener lo mismo, ya sean personas u objetos. Lo he presenciado en mi casa; mis padres ya no se aman, ya no se quieren, ya no se aguantan. Sigen juntos por mí, pero ya es suficiente 17 años estorbando, al acabar este año de bachiller me iré lejos de todo.

Llevo viviendo en Valencia tres años. Antes vivía en New York, más exactamente en Manluis, pero desde el accidente, mi padre decidió llevarme lo más lejos posible de aquel lugar para que mis pesadillas cesaran.

Es un auténtico milagro que esté vivo, aunque tenía un 74% de posibilidades de seguir vivo. La mayoría de los sobrevivientes quedan con secuelas físicas y mentales que los acompañan toda la vida. Desde aquel día ya casi no tengo capacidad auditiva, pero lo que es mentalmente estoy en perfecto estado y el audífono BTE me ayuda bastante con lo de estar medio sordo.

He perdido la capacidad de sentir frío y es una jodida mierda, ya que si tengo un puto resfriado o catarro puedo acabar muerto.

Pronto comenzará el nuevo curso y tendré a todos los profesores pensado que soy un retrasado mental por lo ocurrido, después de hacer un par de exámenes creerán que copio o que soy un jodido genio. De nuevo tendré que taparme la estúpida marca que me dejo el accidente, no me gusta que me tengan lástima y menos aún que crean que es un tatuaje.

Mi vida es así; vivo para no existir, cuanto menos me note y menos me molesten más a gusto vivo. Si te metes conmigo, sufres, si te fijas en mí como persona, sufres. Pienso que las mujeres son el ser más manipulador de sentimientos que existe. He visto a mi madre manipular a mi padre durante años sin él saber que le es infiel la mitad de su matrimonio. Las mujeres para mí son como los cigarrillos: te consume lentamente hasta dejarte sin vida.

Me gustan las mujeres, en fin, soy hetero, pero no pienso enamorarme de ninguna, no pienso pasar más de una noche con ninguna, no voy a caer en la trampa de ninguna.

Ódiame hasta el final (ÓHEF#1)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora