Perdido [34]

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Caminando por dónde habiamos venido originalmente, que había sido por el camino de Paatie.  Durante la mayoría del viaje me encontraba particularmente concentrado entre mis pensamientos; no fue hasta que a mitad de llegar de vuelta a la ciudad, Wisteria comenzó a hablar y volví a la realidad.

— Hoshi... ¿Acaso es necesario tener a esa lagartija tan cerca tuyo?

Al esta decir esto, fue cuando me había dado cuenta del hecho de que Einde se encontraba agarrada de mi antebrazo mientras pegaba su rostro a este.  Su rostro se veía lleno de felicidad, aunque lo sorprendente era que podía caminar de lo más bien.

— ¿Que...?  ¿Acaso te quieres unir?  Tienes el otro brazo disponible~

— Pues cl-

— No —fue lo único que dije mientras separaba el rostro de Einde para liberar mi brazo

— Aww... Maestro, no eres divertido —dijo Einde siguiendo su paso cómo regular

Tras ese pequeño evento de palabras entre nosotros, seguimos caminando hasta llegar al fin a la entrada de Kalastaa.  Al estar a puntos de atravesar la gran entrada por la cuál multiples góndolas transitaban por el canal central, un dúo de guardias no detuvieron para luego realizar una colección diversa de preguntas.

— Oh, Wisteria y su parej-

— ¡No somos pareja! —interrumpió Wisteria rápidamente algo nerviosa

— Pero acaso no es tu pare- bah, olvídalo... Wisteria y su acompañante —dijo el primer guardía — Nos avisaron de que estarían volviendo prontamente ustedes dos

— Pero veo que han vuelto con alguien más —añadió el segundo guardía — ¿Se podría saber quién es esta dama?

Al escuchar esta pregunta mi mente comenzó a pensar rápidamente.  No podría decirles que esa joven alta de cabello azul y ojos amarillos con pupilas peculiares no era más quien uno de los dragones míticos que la mayoría temen, y mucho menos cuando se encontraba a mí lado cómo si nada.

— Eh... ella es...

"Eh piensa; su cabello y los ojos que tiene... Podría ser Fukai y uh... ¿Enkamiya?"

Realmente no se me ocurría mucho, así que solamente pensé en su cabello y las habilidades que había demostrado.  Tras unos segundos de pensar en cuál podría ser su posible nombre, llegué a una conclusión.

— Ella es Fukai Enkamiya, no se preocupe por ella, solo es una víctima que encontramos en el camino

El primer guardía miró al segundo para luego quedarse en silencio por unos segundos.  Luego de esos segundos ambos se echaron a un lado para permitirnos el paso hacia dentro de la ciudad.

— Fukai Enkamiya... me agrada —comentó la dragón con una sonrisa — Aunque no me agrada esa historia...

— Era eso, o quedarte afuera esperando —respondí manteniendo mis pasos en dirección del CTK, dónde Sade se encontraba.

— Hmm... Buen punto

Entonces continuamos caminando en dirección del gran edificio en el que nos habíamos encontrado antes.  Durante nuestra trayectoria habíamos mantenido una conversación entre los tres, tratando de que el tiempo durante caminar no fuese tan tedioso.  Tras caminar por aproximadamente cómo treinta minutos, terminamos llegando al edificio una vez más. 

— Al fin hemos llega- oh no... —Wisteria se interrumpió ella misma al llegar

En la entrada había una fila de espera cómo el doble de grande comparado con la primera vez que habíamos venido.  Sabiendo que la primera vez estuvimos tanto tiempo esperando, podíamos imaginar que estaríamos buenas horas en espera.  No habiendo más remedio nos comenzamos a mover en dirección de la cola de la fila.

CaelestiabellumDonde viven las historias. Descúbrelo ahora