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CAPÍTULO 38

CAPÍTULO 38

Yeimy permanecía en su nuevo apartamento, desde que había llegado de la entrevista se dedicó a desempacar y arreglar su ropa y las pocas cosas que había conservado de su antigua casa.

En ese momento, relajada en su sala se atrevió a revisar sus redes. Tal como esperaba tenía cantidad de mensajes y comentarios luego de confirmar públicamente su relación con Charly. Había comentarios de todo tipo, gente que los apoyaba, algunos sorprendidos por la relación y otros que solo se dedicaban a criticarlos.

No podía evitarlo, para bien o para mal, le gustaba bastante poco que la gente hablara de su vida, los comentarios le habían afectado cuando había perdido la voz y le estaban afectando ahora, pero decidió dejarlo pasar, al menos por esa vez la gente hablaba de algo que la hacía feliz.

Vió la entrevista en el canal de Zulma y una sonrisa se iba formando en su rostro mientras avanzaba el video, notó como Charly y ella habían permanecido con las manos entrelazadas durante toda la transmisión y cómo se miraban él uno al otro con cariño genuino y amor, ella ya no tenía problemas en aceptar sus sentimientos y verse junto a Charly tan feliz le generaba un cómodo cosquilleo en la boca del estomago.

Se sintió realmente orgullosa al ver la naturalidad con la manejó el tema de Grey Shark, pero esa situación la seguía incomodando, necesitaba encontrarle solución a ese tema y estaba convencida de que para eso iba a necesitar aliados y si, seguía pensando que Jack Del Catillo era su mejor opción.

Miró la hora y aún era temprano, no pudo evitar sentir algo de remordimiento, después de todo Jack había sido un gran amigo —y probablemente aún lo era— y ella solo pensaba en él porque necesitaba de su ayuda, pero no lo pensó demasiado y antes de darse tiempo de arrepentirse estaba marcando el número que aún conservaba de él y rogando porque no lo hubiese cambiado.

—¿Aló? —respondió una voz masculina.

—¿Hola? ¿Jack? —preguntó ella.

—Si... ¿Quién habla?

—Es Yeimy... Yeimy Montoya.

—¿Yeimy? —repitió él en un tono mucho más amable— No puede ser, te llamé con el pensamiento.

—¿Cómo así? ¿Por qué?

—Estaba por llamarte —explicó Jack— pero, eh... perdí tu número. Pensaba pedirle a alguien tu contacto.

—¿Ah sí? —preguntó Yeimy un poco extrañada— ¿Por qué ibas a llamarme?

—Espero que no te lo tomes mal. —respondió él con algo de duda en la voz— Pero es que no se que haces con ese tipo.

—¿Perdón? —exclamó Yeimy algo indignada, la sonrisa sincera que había empezado a formarse por contactar de nuevo con su amigo se borró de golpe.

—Ya sé que hace full tiempo que no hablamos y que no tengo porque meterme en tu vida solo es que de verdad no entiendo que haces con alguien tan nefasto.

—Tenés razón Jack, no hay razón alguna para que te metas en mi vida —contestó Yeimy cada vez más molesta pero un par de segundos después se alegraría de haber contenido el impulso de colgar la llamada.

—Ya sé y discúlpame —se excusó Jack— Pero te conozco y no se como es que terminaste trabajando con alguien como Mike Rivera.

—Oh...—Yeimy contuvo una exclamación entendiendo por fin— ¿Estabas hablando de Mike?

—Obvio. —contestó Jack— ¿De quién más?

—Nada... Olvidalo.

—Yeimy, es en serio, ese tipo es terrible. —dijo Jack— ¿Cómo es que estás trabajando para él?