All i want is You [ Bruno X Camilo, Encanto.]

You wish you had never met me.

Gruesas Lágrimas caían de aquellos ojos cafeses, buscando algún cariño en sus brazos. Rodeado de escombros observando fotografías rotas.

Estaban empapadas de mismo llanto, se abrazaba a si mismo con amargura. Mordía ferozmente su propio labio tratando de callar sus sollozos.

- ¿P..por qué..?.- tal vez si había sido mala idea salir al pueblo.

Está tarde decidió darse una segunda oportunidad para iniciar su vida desde cero más sin embargo su sorpresa fue ingrata.

Él estaba ahí sonriendo cargando a una menor en brazos aun lado estaba aquella mujer que arruinó a su familia.

Él tenía una hija, le había sido infiel y al parecer no le bastó con hacer eso... también embarazó a la mujer.

- Mi..mierda, no tengo porqué estar llorando snig.- Sorbio su nariz limpiando sus lágrimas, botando aquellas fotografías a la basura.

Desde que iniciaron su relación hasta el día de su boda y embarazo..aquellos días tan especiales que ya no mostraban ningún sentido para él.

- Lo pagarás..yo lo sé, volverás a mi y te rechazaré.- Limpió su mejilla con su puño cerrado.

Miro de reojo el pasillo confirmando que su pequeño no despertará.

Su cabello había crecido al paso del tiempo, bruno amaba ese cabello. Más sin embargo una rabia lo invadió.

No quería nada que Bruno gustará en su cuerpo, abrió el cajón izquierdo de su alacena sacando unas tijeras de metal.

Sabía perfectamente los patrones de su nuevo corte, no fue una tarea difícil más sin embargo si una tarea llenas de recuerdos desperdiciados.

Corto su cabello hasta dejarlo abajo de sus orejas, el resto lo tiró en una cesta.

Observo detalles en su cuerpo que habían cambiado, sin duda había cambiado y mucho.

Ahora tenía 18, miro sus uñas pensando si era buena idea pintarlas aunque si estaban largas.

Se sentó en el sofá sacando su esmalte de un color morado comenzando a pintar una por una deteniendo su mano cada vez para poder suspirar.

- ¿Que va a ser de mí..?.- Una vez más se encontraba mirándose en el espejo. Aunque su pregunta no fue sinónimo de tristeza si no una de felicidad, podía tener una nueva vida ¡Eso era genial!.

Sin tener ataduras, tenía a su bebé, se tenía a él mismo...¡Eso era perfecto!.

- I'm made for you..- Tarareó una vez aquella melodía de su canción favorita.

Fue a despertar a su niño viendo cómo este estaba hecho bolita en su cama, sonrió para si mismo.

Se acostó sin cuidado alguno para comenzar a hacer cosquillas a su bebé viendo cómo este despertaba rápidamente tratando de quitar sus manos.

- M-mami, ¡P-para!.- Ariel reía junto con Camilo, ¿Hace cuánto no se divertía?.

- Venga hay que hacer unos arreglos en la casa cariño.- él menor asintio contento.

Había extrañado a su mami de antes, aquel que reía y bromeaba sin tener que preocuparse si llegaba el mayor.

- Mami, ¡Quero ir a pueblo!.- Ariel nunca había salido tan lejos de la cabaña y menos al exterior.

Camilo pareció dudar unos segundos pero al instante sonrió asintiendo, su bebé no tenía la culpa de lo que pasó con su matrimonio.

Tal vez aprovecharía para pedirle el divorcio a Bruno y poder ser libre aunque ya lo era.

- Por supuesto mi bebé, iremos al pueblo.- Lo dejo sentado en su sillita mientras que él servía la comida.

Eran solo unos tacos de carne que al menor le encantaban, amaba ver a su hijo feliz y el amaba por fin no depender de alguien para ser feliz.

Él volverá a desear a tenerlo, volverá porque sabrá que jamás podrá tener lo que tuvo con él.

Alguien que lo amo y que otorgó tener a un hijo,jamás tendrá eso.

Pero al volver el pondrá una sonrisa y con una cara bonita lo rechazará, porqué ya no es lo que él necesita.