Ojalá me diga que si (parte dos)

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Sam.

He perdido.

He perdido la guerra contra un tipo que seguro que no me llega ni a la suela de los zapatos, pero que ha sido capaz de convertirse en su novio antes que yo, que me duele el pecho de quererla tanto.

No sé cuanto tiempo llevarán juntos, ni si he sido objeto de cuernos en esa relación, pero lo que sí tengo claro es que tengo toda la atención de Danielle Dawson a pesar de todo, y que de aquí a nada tengo el presentimiento que las cosas entre nosotros van a dar un giro de ciento ochenta grados.

Porque el corazón de la hermana de mi mejor amigo, diga ella lo que diga y esté saliendo con quien esté saliendo, me pertenece, y eso es así.

Vale, si, estoy flipando un poco.

Cuando he oído al ecuenclo ese diciendo que era su novio, he querido llevarme a Dan lejos de todo el mundo para pedirle una explicación, pero al final he preferido disimular todo lo que mi rabia me ha dejado y he decidido cargar yo solo con la frustración de que otro tenga la suerte de llamarla "novia"

¡Ogg! Me odio a mi mismo por estar tan jodido por ella.

Liberarme con mi mejor amigo me había venido muy bien. Él me ha comprendido, apoyado y aconsejado, y aunque no ha servido de mucho, tengo que decir que el simple hecho de que él lo sepa, me basta.

Era de lo que más miedo tenía en realidad.

Volviendo al tema de Danielle...

El encuentro que hemos tenido, me ha demostrado aún más las cosas. He querido saltarme el "protocolo" Y hacérselo con el traje de lobo puesto, pero Caperucita me ha cabreado con su juego y he decidido parar, marchándome rápido de allí pero deseando que desobedeciera a sus padres y viniese esta noche aquí, así la estaría viendo en todo su esplendor aunque no pudiese tocarla.

Nadie es consciente de las ganas que tengo de tocarla.

Marie pasa una mano frente a mi rostro y parpadeo, mirándola directamente a ella y alzando mis cejas cuando veo la mueca de su rostro —Estás empanado, Sam.

Aclaro mi garganta, incorporándome y acomodándome en el sofá de Stuart, el anfitrión —Estaba pensando en mis cosas, perdóname —sonrío —¿Que me estabas diciendo?

Ella sonríe de vuelta, dándole un buche a su copa y mirando a su hermano y Star, que están frente a nosotros más enamorados que nunca —Te hablaba de lo que me gusta ver a mi hermano de nuevo con Star —hace una mueca —Lo he pasado muy mal viendo como la trataba estos últimos meses.

En realidad si es raro, pero yo me alegro que vuelvan a estar así porque sé lo que se quieren.

Echo mi pelo hacia atrás —Hay mucho amor de por medio, y la estupidez  de tu hermano estos meses atrás era todo una farsa para llevar mejor la ruptura.

Frunce su ceño, como si hubiera dicho la cosa más loca del mundo —¿Si, verdad?

Asiento, dándole un buche largo a mi Ron cola, antes de hablar —Dime, tú que conoces a Jad mejor que yo, ¿de verdad te tragaste todo ese rollo del "fuckboy" sin sentimientos que se acostaba con toda tía que se le cruzaba, por placer? —niego —Tu hermano es un buenazo sensiblón al que le hirieron el corazoncito y no se supo manejar bien, Marie.

La pequeña de los Dawson se ríe y la miro, riendo después con ella.

Cuando le conté a James todo lo que me había pasado con Danielle, me dijo que si con ella no había podido ser, que lo intentara con su hermana, que al fin y al cabo tenían la misma cara y no se iba a notar la diferencia, y a mí no me puedo dar más asco ese consejo porque no sé qué jodida imagen tiene mi amigo de mí, si cree que voy a jugar así con la hermana más pequeña de mi mejor amigo si ella no es la que me gusta.

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