CAPÍTULO 6. MOOD DETECTIVE, ACTIVADO

309 26 0
                                    

Danielle.

—Gabriela estaba desesperada por vender, nosotros llevábamos tiempo queriendo hacer algo diferente con la empresa y... —Mamá sonríe —Al final lo hablamos, entramos en negociaciones con todos los socios e inversores y nos decidimos.

—Con Blake fue difícil, pero como su hija tiene más mano ahí que él...

—¿Y Sean? ¿Cómo se ha tomado la noticia? —es Stella la que habla, y aclaro mi garganta mientras observo como mira a mi madre con atención.

—Por supuesto que él es dueño, como nosotros, pero no ha querido anunciarlo todavía.

—En la cúspide estamos Lucas, él y yo.

—Debe estar emocionado, siempre ha sido su sueño, y encima llevarlo a cabo contigo, que es con quien empezó todo esto.

Esta vez habla Liam, que asiente con una sonrisa y sin dejar de alegrarse por Sean, que es uno de sus mejores amigos.

Estamos en casa de Sam, cenando con mis suegros, que casualmente son también amigos de mis padres desde que mamá y Stella se conocieron en las clases de preparación al parto, así que digamos que hay confianza a pesar de que se me siga haciendo raro ver ahora a estas personas como "mis suegros".

Aún no lo puedo creer.

Samuel hacía bastante que quería una cena así, como en los viejos tiempos, y como me pasé con él tres pueblos la última vez que discutimos, decidí que iba a ser el momento perfecto para vernos todos juntos, aunque no sea nada nuevo.

Mis padres y los suyos se ven a menudo para tomar algo.

Le pedí mil veces perdón a mi novio por haber sido tan injusta con él, y entendí que si yo hubiese estado en su situación, hubiese hecho lo mismo. Días después lo invité a Chicago, y como venganza me denegó la oferta, para que así me diera cuenta de lo que consigo con mis actitudes  inmaduras.

—¿Y Jaden? —pregunta Stella tomando un sorbo de vino.

Lucas y Liam ya se han levantado para ir a fumar, aunque sé perfectamente que están haciendo negocios.

—Se ha quedado unos días más en Chicago, con Star —apunta mamá —Querían terminar de cerrar unos temas.

—¿Ya tiene algo claro?

Lana suspira, echando su pelo hacia atrás —Nada, Stella, a ver si con mi ahijada allí, se le abre un poco la mente.

—Seguro que ya se decanta más por una cosa que por otra, pero no estará seguro del todo aún.

—Yo creo que...

—¡Hola! —Sarah aparece con una sonrisa y la miro, para ver como rodea a mi madre desde atrás y besa su mejilla con ímpetu.

La hermana de mi novio es la persona más increíble que he conocido en la vida, y hay veces que puedo contar con ella como una amiga más, aunque sea cinco años mayor que yo.

Anoche cuando me quedé a dormir con su hermano, no me la esperé aquí porque no sabía que había vuelto de su viaje a Australia, y no me pudo hacer más ilusión verla.

Me ha traído tres regalos, a cual más grande, y por supuesto que se lo he agradecido este medio día con una comida en su restaurante favorito.

—Sarah, cariño, cuanto tiempo —Mamá se levanta a saludarla mientras Stella sonríe, y yo giro mi cabeza para mirar a Sam, que está entretenido con su móvil.

Él ahora ha empezado las prácticas en la empresa de unos amigos de su abuelo, y nos vemos muy poco.

Sonrío y pongo una mano en su muslo, llamando su atención —¿Vas a estar toda la noche con el móvil? Pensaba que hoy yo era tu única distracción.

¿A donde vamos? Donde viven las historias. Descúbrelo ahora