035. Valhalla

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—entonces es aquí —levantó la mirada al cartel fuera del local— ¿por qué una tienda de juegos?

—quebró hace algunos años y fue abandonada
—sonrió— adelante —con un ademán de su mano la invitó a pasar—

—claro...—Takemichi caminó rápidamente detrás de ella para que no se alejaran el uno del otro en ningún momento—

Cruzaron la puerta de entrada siguiendo a Hanemiya con inquietud.

un ángel sin cabeza...—en su mente recreó el dibujo que había visto en la puerta—

Al entrar se encontraron con una gran cantidad de los miembros de Valhalla. Conversaban entre ellos con normalidad y vestían similares; aunque lo más llamativo en todos era la chaqueta gris que portaban con un dibujo de un hombre alado sin cabeza en la espalda.

y ahí está otra vez.

El ambiente allí era aterrador. No se parecía en nada al de la Tōman.

Caminando hacia el centro del lugar dieron con un círculo de chicos que parecía observar algo con expectación.

En medio se encontraba Baji, golpeando a un muchacho que Ayame no reconoció al momento por la sangre que cubría su rostro.

—¿por qué hace eso? —con tristeza frunció el ceño—
¿Cuál es el punto? —miró con molestia a Kazutora—

—¿no es obvio? —se atrevió a mirar detalladamente la expresión de la joven— es una prueba de fe

—¿a eso llamas fe? ¿Qué clase de imbe-
—al sentir la mano de su amigo rubio sobre su hombro trató de calmarse—

—¿a que te refieres con prueba de fe? —intervino Michi—

—es para ver si Baji cree en nuestro grupo
—soltó sin más— el pasar de la Tōman a Valhalla...es como cambiar de religión. Ahora mismo está golpeando al sub-capitán de la primera división, y su asistente más leal.

Chifuyu si no me equivoco.

—¡Chifuyu Matsuno! ¡Es un placer señorita Ayame!

(...)

—espera, ¿Ayame? ¿Esa Ayame? ¿La ex-comandante de las Sukeban?

(...)

—¡no sabes cuánto te admiro!

ese chico no tiene culpa, ¿qué demonios le pasa a Baji? —Kazutora, te pediré de forma amable que pares esto
—se acercó al muchacho con voz amenazante—

—mi querida Yami, no soy yo quien pone las reglas...
—soltó en un canturreo—

La joven fijó su atención nuevamente en Baji. Este por fin había dejado de golpear al de ojos verdes y se había levantado del suelo.

Su respiración estaba acelerada, pero para sorpresa de la castaña terminó sonriendo.

—y bien...¿te parece suficiente...Hanma?
—su voz tranquila ocultaba tras de sí mucha ira y tristeza— ¿ya me dejarás unirme a Valhalla?
—desató el moño que había sujetado su cabello anteriormente—

El mencionado Hanma se encontraba con la cabeza agachada, sentado como todo un rey, siendo rodeado por sus más fieles compañeros.

Con lentitud dirigió sus ojos hacia el pelinegro y soltó una risita.

𝓟𝓮𝓻𝓭𝓲𝓬𝓲𝓸𝓷 卐 𝐓𝐎𝐊𝐘𝐎 𝐑𝐄𝐕𝐄𝐍𝐆𝐄𝐑𝐒Donde viven las historias. Descúbrelo ahora