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Cuarto mes🍂

Aristóteles aún seguía algo adormecido, pero no tardaba en volver a la normalidad. Lo poco que Emilio había hablado con él dió a entender que se había resignado a compartir su cuerpo.

Los chequeos con la doctora eran estresantes, todos lo trataban cómo a un extraterrestre. La doctora siempre le recordaba que nada era totalmente correcto y que se limitara a intentar cosas nuevas. Sólo por precaución.

— La doctora dijo que no puedes comer eso. — Diego pasó enfrente de él y le quitó las papas fritas que estaba por comer.

— ¡Diego! Devuélveme eso. — el Alfa menor lo miró con el ceño fruncido — No es gracioso.

Diego y Emilio tuvieron una guerra de miradas, el Alfa peligris bufó y continuó la tarea de llevar la comida a la cocina otra vez.

Cuándo la puerta de la cocina se cerró Emilio sólo se quedó sentado en el sillón, ni siquiera supo en que momento sus ojos se cristalizaron y comenzó a hipar. ¡Él quería esas papas!

— ¿Mailo? — preguntó Diego cuándo volvió a la sala con comida que su amigo si tenía permitido comer. Se quedó mirando a su amigo que lloraba poquito, cubriendo sus ojos con sus manos.

Diego sólo suspiró y le sonrió tratando de explicarle otra vez, porque no podía comer aquello. Diego durmió en el dormitorio de su amigo esa noche.

Aristóteles terminó de volver en la madrugada y cuándo Emilio despertó tuvieron una charla sobre el cachorro. Aristóteles estaba inquieto, no lo admitiría, pero Emilio sabía que estaba asustado.

¿Y si no sabemos qué hacer? ¿Sabes que los cachorros necesitan de muchos cuidados para no morir? Emilio, ¡Ni siquiera tenemos Omega!  🐺

Tranquilo, no necesitamos uno. Podremos con ésto, éste niño estará bien, ya verás. Tenemos a papá y mamá. Diego también.

Su cachorro era un niño, cómo esperaba su doctora, un Alfa puro.

¿Y si tiene muchos rasgos de su padre?  🐺

Sólo aprendemos a vivir con ellos.

No, Emilio. No lo entiendes. 🐺

Aristóteles, él no está. No puede quitárnoslo.

Aristóteles gruñó, no quería, no quería compartir a su cachorro. Con nadie. Ni siquiera con un desconocido que no piensa buscar.

Y ahí estaba otra característica de su lobo, él era muy posesivo. Amoroso con los que amaba, no le gustaba pensar que podía perderlos.

Vá a convertirse en lobo muy seguido. Y no vamos a poder controlarlo. 🐺

Aris, es sólo un bebé. No puedes tenerle tanto miedo.

¿Miedo? Soy un Alfa, yo no tengo miedo. Sólo estoy... viendo todos los posibles escenarios. 🐺

Cómo digas.

Así que estaba ansioso por volverse a casa, estaban planeando volver a México antes de fin de año.

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Alatz // Adaptación Emiliaco OmegaverseDonde viven las historias. Descúbrelo ahora