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- ¡Hola! - exclamo Diego llegando al patio de Emilio con una caja envuelta en sus manos.

- ¡Tío! - gritó Alatz emocionado y corrió hasta el Alfa - ¡Viniste, viniste!

- Obvio que sí, mi amor. - Diego dejó la caja en el suelo y se agachó para besar a su Alfita.

El regalo fué llevado con los demás, Alatz se perdió entre los niños. Diego ayudó a Emilio a traer más comida después de saludar a todos.

- ¿Entonces no funcionó? - preguntó Emilio, concentrado en servir más aperitivos en los recipientes.

Diego bufó, recargándose en la mesa.

- No. Ese Alfa era insoportable. - dijo y se cruzó de brazos - No podía salir con él.

Emilio rió y le dió dos bowl a Diego para llenar los dos que faltaban.

- Para tí, todos son insoportables. Sólo elije uno y sé feliz amigo.

- No. - gruñó Diego - A Scott puede darle igual, pero a mí no. Quiero a alguien que sea capaz de amarme.

Emilio levantó los 2 recipientes que le correspondían y lo miró, con una mueca.

- Nunca les das el tiempo suficiente para demostrarte que puede hacerlo. Una semana no es suficiente para conocerte, chino.

- No lo sabes, tú lo sentiste desde que viste a Joaquín por primera vez. - Emilip sonrió - Eso es lo que quiero.

- Esa chispa es sutil, hermano. Quizás puedas encontrarte con ese alguien en cualquier lugar. Sigue buscando, vas a encontrarlo. - aseguró el Alfa menor.

Emilio le hizo señas para que volviera al patio, dónde era la fiesta de cumpleaños de su hijo.

El Alfa peligris formó una mueca, Emilio tenía razón. Pero Diego no podía decirle que ya había sentido esa chispa con alguien, que nunca admitiría que le gusta.

Al volver al patio y dejar todo en su lugar, se dedicó a disfrutar junto a su sobrino... Ó eso quiso, pero se apartó cuándo lo vió siendo el rey de su castillo inflable, él no podía interferir con su reinado.

Alfa guapo a las doce. 🐺

Alertó Scott, haciendo girar a Diego. El Alfa rodó los ojos al observar a Roy ayudando a unos niños con sus zapatos en la entrada del inflable.

Luciendo tan: «Soy un Alfa puro, médico y estoy mejor que cualquier modelo». Diego no lo quería cerca desde que se lo había encontrado en una fiesta del trabajo.

Él cómo un invitado especial y Diego cómo, bueno, el hijo de los dueños.

Era tan ridículamente amable. Diego no lo soportaba, su forma de ser lo cansaba, su voz era irritante y no podía dejar de verlo...

Él se vería lindo en una foto contigo. 🐺

Scott...

Deberías pedirle una... Y su número. 🐺

Cómo ahora, ya. 🐺

Roy les dió un besito en la cabeza a los niños al terminar de ayudarlos, gritando un tierno, «con cuidado, amores».

Rawr, yo le partiría la boca de un beso. ¿Qué opinas? 🐺

Que deberías parar.

Diego se maldijo al ser descubierto mirándolo, intentó escapar moviéndose hasta el grupo de adultos hablando, analizó con rapidez sus opciones.

Niko, Joaquín y dos betas charlaban animadamente, se mostraban sus celulares y soltaban unos cuántos «aww». No quiso interrumpir.

Alatz // Adaptación Emiliaco OmegaverseDonde viven las historias. Descúbrelo ahora