Dónde el cachorro de Emilio reclama al Omega de Joaquín, cómo su mami.
«Gracias por elegirme de entre todas las almas perdidas de éste mundo»
Adaptación Omegaverse Autorizada
Todos los créditos son de la autora original @Illbeyourlight_2809. Grac...
El Omega quitó su atención de la cuchara amarilla que estaba sobre la otra mesa. ¿Porqué estaba mirando aquello?, y más importante, ¿porqué tenían una cuchara amarilla?
Niko meció el cochecito de su bebé con ayuda de su pié, mientras miraba a su amigo con el ceño fruncido.
- Cielos, amigo. Estás más que distraído.
- Eh, si, si. Te estaba escuchando. - mintió Joaquín centrando la vista en la lista del baby shower otra vez.
- Supongamos que sí. - bufó Niko tachando algunas cosas de la lista -. Entonces tenemos todo, menos los globos dónde irán los colores para revelar el sexo de los bebés.
Joaquín hizo un puchero, viendo a su amigo anotar cosas en su libreta. La libreta que tenía prohibido mirar.
- De eso me ocupo en casa... - susurró Niko para sí mismo.
- Recuérdame porqué tú sabes el seco de mis bebés y yo no.
Niko lo miró con una ceja alzada y luego le sonrió de lado.
- Porque con Emilio decidimos que ambos tenían que sorprenderse.
- Gracias por invitarme a esa reunión. - chistó el Omega, acariciando con suavidad su vientre.
Jason comenzó a llorar y Niko lo meció otra vez con su pié, subiendo un poco la voz para decir: «Sh, sh. Calma, cariño. Mamá sigue aquí». Joaquín observó que el rubio nunca dejó de escribir, pero su voz se escuchaba dulce.
- ¿No lo levantas? - preguntó Joaquín, recordando que eso solía hacer con sus sobrinos mayores
Niko levantó la vista y le sonrió con ternura a su amigo, negando.
- No. Si lo levanto siempre que llora se vá a acostumbrar a dormir en mis brazos -. Niko se mordió el labio, dando un vistazo a su bebé que ahora estaba despierto, pero ya no lloraba -. Tengo más hijos, cariño. No puedo dedicarle tiempo a uno sólo.
Jason se rió viendo las muecas que su madre le hacía, tirando sus manitas hasta él. Niko sólo acercó su mano, para que el bebé tomara su dedo índice.
Joaquín asintió entendiendo y señaló un pastel para el baby shower y su amigo lo anotó.
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El patio de los Osorio estaba todo decorado de azul y rosa. Una gran mesa con bocadillos de ambos colores estaba en uno de los rincones.
Los invitados no eran demasiados, sólo las familias de Joaquín y Emilio, además de un amigo que otro de la pareja.
Los pequeños corrían por todo el lugar, jugando con los globos y comiendo los dulces.
Niko llegó emocionado con su libreta. El Omega traía un broche rosa y el otro azul, para no revelar el sexo de los bebés.
