🦋Capítulo 46

432 32 11
                                    

~Mariana~

Mi alarma suena, pero no me tomo el trabajo ni de silenciarla. No le presto atención. Sé que debo levantarme, que a las doce del mediodía tengo el juego de los chicos, mas no quiero hacerlo. Algo dentro mío me dice que siga durmiendo.

Un recuerdo, uno que me atormenta desde ayer en la noche, me dice que siga durmiendo. Que al levantarme todo se derrumbará. Todo se acabará otra vez. A pesar de que no quiero, mi celular sonando me incita a despertarme, bostezo a la vez que me estiro para tomarlo. Una vez lo tengo en las manos, sin ver el nombre, atiendo.

Hola, bonita. Sé que hoy te voy a ver, pero quería desearte un feliz cumpleaños ahora. La emoción no me permitía esperar. ¿Cómo estás?

—Dormida —respondo bostezando. Refriego los ojos con la yema de mis dedos, para luego abrirlos. Mi habitación está sumida en una oscuridad tranquilizadora, la única luz que entra es por la puerta que se encuentra abierta, como la he tenido en el último tiempo. Escuchar la corta risa de Fede, me genera una sonrisa en el rostro, pese al tormento que fue mi noche.

Ayer intenté comunicarme contigo, para felicitarte a las doce en punto, pero no me respondiste, me ignoraste.

—No te ignoré, solo me dormí temprano —sé que él está bromeando, pero en estas fechas mi percepción de las emociones, aumenta—. Gracias por saludarme, fuiste el primero.

¿Y Lucas?

—¿Qué? —por algún motivo, percibí que su pregunta tenía doble sentido.

¿Él no te... saludó? ¿No…? ¿No te habló de nada?

—Nop. No que yo sepa, al menos. Supongo que me mandó algún mensaje, pero aún no le he visto. ¿Por?

No, por nada. Simple curiosidad —un silencio incómodo se hace entre nosotros, uno que nunca antes habíamos experimentado. Tras varios segundos, él vuelve a hablar—. Bueno, bonita, nos vemos. Te quiero... no lo olvides.

—Nunca —me río por su repentino cambio, no entiendo su afán de querer remarcar su sentimiento hacia mí, no obstante, lo dejo pasar—. Yo también te quiero, sos mi hermano de la vida, del alma. Gracias por enseñarme a confiar en vos, sos muy importante para mí.

No soy de hablar de mis sentimientos, pero con él y con Lucas, me salen con facilidad. Y no me arrepiento de haberme abierto con ellos, porque sé que en ellos puedo confiar.

En pocos se debe confiar, mi cielo.

Ignoro a mi retorcida conciencia. Hace un tiempo que este tipo de pensamientos no me invadían, de todas formas no le presto atención, lo más probable es que sea por la fecha.

En cuanto cuelgo, la pesadez regresa a mi pecho. No quiero salir de la cama, pero el hambre comienza a ser presente en mí. Me destapo y salgo de la cama. Antes de salir de mi habitación, observo las notificaciones, tengo varios mensajes.

Chico tacleador: Sé que te ibas a dormir temprano, y que lo más probable es que no veas este mensaje hasta mañana de mañana. Pero no importa. Hola, rayito de luz, hoy ya sos mayor de edad, ¿se siente el cambio? [00:00]

Chico tacleador: Te quiero, y me alegro de haberte tacleado. Quizás no me alegre tanto lo de caerme encima tuyo, pero sí todo lo que hemos vivido en este año <3 [00:00]

Chico tacleador: Ya quiero que sea mañana. Te extraño. [00:00]

Val♡: Holaaaaaaaaaa... cumpleañera. [00:00]

🦋Perfectamente Imperfectos🦋Donde viven las historias. Descúbrelo ahora