Capítulo 45. La fiesta de la Diosa

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Oven

Las celebraciones para agradecer a la Diosa todos los embarazos están a punto de comenzar, toda la manada está reunida.


Busco a Honey, quiero que esté junto a él cuando yo me vaya. Pero no lo veo por ningún lado. ¿Dónde demonios está este puñetero omega?


Hammer toma mi mano, y le miro, joder, ¿estoy seguro de lo que voy a hacer?
En qué momento todo se complicó tanto, miro a este alfa enorme, con su pelo trenzado como marca la ceremonia, ha arreglado su barba descuidada. Y sé que voy a guardar esta imagen por el resto de mi vida, sus ojos mirándome, su sonrisa solo para mí.

—Voy a ir a echarle una mano a Mop —digo casi sin poder tragar.

Él solo asiente, no sospecha nada, y yo me quiero morir, pero doy los pasos hasta salir de la zona de celebración.

Le veo hablar con un par de alfas que le apoyan desde el primer día. Y estoy tentado de volver, de agarrarme a él y decirle cuánto le quiero, que hago esto por eso mismo, porque le quiero más que a mí mismo.

Pero yo no estoy hecho para ese tipo de conversaciones. No, yo paso tras paso me alejo de mi manada.

La única que sabe que me voy es la abuela, ni siquiera mi pequeño Mop lo sabe. Pero él ahora está bien, está con Slate y sé que ese beta lo va a cuidar.

Me cruzo con betas y alfas que van hasta el lugar de celebración y que me ignoran, y nunca me alegro más de que esta gentuza pase de nosotros. De todos modos, trato de mantener mi rostro oculto, las sombras de la noche me lo facilitan.

No sé si son mis piernas o es el suelo enlodado, no lo sé, pero me pesan, y yo soy un tipo ágil, no sé si me explico.

Me da igual lo que diga mi cuerpo, yo me voy.

En un punto ya no hay nadie, y escucho la música de fondo, apuesto porque en las puertas los guardia estén más interesado por lo que entra que por lo que sale. Y sino, esperaré.

Mi idea es ir al sur, por lo que Blue cuenta allí las cosas son diferentes, pero no puedo ir a su manada, estoy seguro de que allí me encontrarían.

Pero sé que el puesto del este es el más fácil de pasar, aún así nunca lo he traspasado, ni este ni ninguno. Nunca he salido de aquí, y una aprensión me jode por dentro.

Al final voy a ser un gamma acojonado como todos, y eso me hace seguir andando, no soy un puto llorica.

Quizás si no fuera porque estoy más enfocado en insultarme a mí mismo y demostrarme que soy todo un intrépido lo hubiera notado antes.

Pero lo veo casi cuando me caigo sobre un cuerpo en el suelo, luego lo huelo.

En el suelo hay una alfa, lo que huelo es sangre, pero hay feromonas por todos lados, casi me caigo de la peste.

Pero eso no es lo peor, lo peor es ver que no es el único cuerpo en el suelo, lo peor no es ver cómo un alfa de mi manada está rajando a uno de los suyos, lo peor es ver que Honey está allí, y no está solo.

Una mujer pequeña está a su lado, pero solo sé que es pequeña por su estatura, porque su aura es enorme, nunca he visto a una mujer así, nunca he visto a una reina, pero ella lo es. Y tras ella lleva a un ejército de deltas.




Hammer

Cuando he visto venir hacia a mí a Dagger me he puesto en tensión, ha tardado mucho, pero sin Oven a mi lado, sin tener que mantenerme positivo, casi me alegro de que él no esté ahora mismo.

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