El Alfa Divino: La Leyenda Del Hombre Lobo

Capítulo 57: Semilla De Manada

Sharlet.

Vamos en coche, Ingrit esta atrás conmigo y Ewaan está conduciendo.

Llegamos a la granja y ya no están, Ingrit se baja y corre a tirarse al suelo, hay rastros de sangre.

— Esta es sangre de Stalin— dice mi hermana siguiendo una dirección. — Ha peleado con Sylvia, aquí ella raspó su rodilla y ambos terminaron contra el arbol. Siendo rabia de un amigo, chico de Stalin, quería defender a Stalin pero no lo hizo, varios de los otros estaban nerviosos. Ariel estaba aquí— señala un lugar apartado. —Estaba contento, creo que Stalin pudo contrarestar el dúo y por eso Ariel terminó herido, y si, Sylvia perdió el control porque es un sentimiento neutro.

Ingrit, como se nota, era la líder del cuerpo elite de búsqueda, rastreo y vigilancia del reino. Tras tantos años no ha disminuido su capacidad.

— Vamos, tengo el rastro— se sube al coche y conduce.

Va muy rápido, menos mal que estamos en una patrulla y no llamamos la atención.

Desde lejos consigo notar que todos están tranquilos y en silencio, se nos escucha llegar. Todos están tan cansados que no nos huelen y no saben que somos nosotros. Se ponen delante de Stalin, creo que piensan que somos del reino. Sylvia y Ariel que están muy debilitados con esfuerzo se ponen de pie y protegen a Stalin. Detrás se oyen pasos pero no se ve quienes son, un amigo de Stalin y otro chico que no conozco se ponen a la espalda de Stalin. Creo que Stalin está lastimado.

Ingrit abre la puerta y con la corriente de aire, Sylvia y Ariel me huelen y se relajan.

Stalin.

Nos han rodeado, no sé que pasa, Sylvia y Ariel se ponen enfrente del coche, Drakon y Even están en dirección de los arboles. Si son del reino no podré hacer nada. Mi corazón se acelera, mis ojos me palpitan. Se abre la puerta del coche, todos atentos, una corriente de aire llega hacia nosotros y huelo a mi tía, mi madre, padre y mi tío. Detrás se acercan y todos giramos, eran mi hermanos, Been, Sean, Tom y Zend. Todos nos relajamos y nos tiramos al suelo. Scarlet comienza a reir y todos la seguimos.

— Suban al coche— dice mi madre en una van. — Aquí caben 3 más, y los demás al otro coche, y mis hijos se van caminando, quedamos en el granero.

Sin pronunciar una palabra aceptamos de lo cansados que estábamos.

Poco a poco llegamos, y el atardecer se hace presente, se me cierran los ojos, pero no cedo al cansancio. Nos bajamos todos del coche, entramos al granero y todos nos sentamos en las sillas, no había suficiente y algunos se sientan en las mesas o en el suelo. Mi madre está de pie enfrente de todos.

— Todos aquí sabemos que vamos a hacer, pero nadie sabe a que se enfrenta en realidad. Esto no va a ser como aquel alfa que vino a atacarnos, no va a ser como las cientos de batallas que habéis tenido— mira a Sylvia y a Ariel. — Tampoco va a ser como la pelea que hubo entre Drakon y Stalin, ni mucho menos va a ser ni parecido a lo que os pasó a todos en el instituto hace unos días. El verdadero temor va a caer sobre este pueblo, niños, ancianos, familias enteras sufrirán una ira de la que no tienen que ver, pero que ya no se puede evitar. El reino nos ha declarado la guerra, y solo tenemos dos opciones para terminar con esto, la más fácil es rendirnos, que el rey mande sobre nosotros, arrodillarnos ante su poder y que siga con su dictadura. O, luchar contra el reino, varias manadas unidas que se enfrentaran a nosotros para defender al rey, mucha sangre se derramará, de nuestra parte y del reino, además de gente inocente del pueblo que estará en el medio. Pero antes de decidir nada, tenemos que dejar algo muy claro.

— Quien es el alfa de la manada— dice mi padre poniéndose de pie y enseñando sus ojos rojos escarlata.

Todos se ponen de pie sintiendo el poder de un alfa por primera vez, por parte de mis amigos.

— Exacto. Como podéis ver, Ewaan es un alfa, Yo...— enseña los ojos. — Tambien soy un alfa. Pero una manada no puede haber 3 alfas— mi madre mira a mis amigos, a mis primos y finalmente a mí. — Después de 15 años vamos a seguir la tradición del Reino Memberry, decidiremos quien será el alfa de la manada, y todos tenemos que estar de acuerdo— sale del establo y todos la seguimos. — Sabía que llegaría este momento asi que tenia adelantado esto. Antiguamente cuando un beta retaba a su alfa, una semana antes del reto el consejo de banshees plantaba un tallo del "arbol de la manada". Un tesoro aún preservado por la familia Memberry es la semilla del "arbol de la manada", creada hace más de 400 años por dos o tres banshees de una familia humilde apellidada Memberry, desde hace unas semanas que volvió Stalin decidí plantar esta semilla, y esa hoja es "el arbol de la manada". El ritual consiste en que cada uno de los participantes del consejo de la manada tiene que estar presentes, asi que desde ahora este es el comienzo de la Manada Memberry y este su nuevo consejo. Antiguamente, desde un principio de la manada siempre han sido solo miembros la familia Memberry, asi que para que el ritual funcione solo miembros de la familia Memberry pueden realizar este ritual. Este cuenco ha sido creado por el primer "arbol de la manada" de la familia Memberry, aquí todos los presentes tienen que derramar su sangre como pacto con el futuro alfa— mi padre vuelve al establo y saca una cocina de camping.

— La madera del cuenco es ignifuga, ya que contiene magia antigua de banshees— dice mi padre, enciende la cocina y pone el cuenco encima, comienza a encenderse la madera pero no se quema. — Para que el ritual funcione todos tenemos que aceptar de corazón al futuro alfa, sino el fuego no cambiará.