Extra 2. El nombre de los gemelos. (2)

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Arregló el chal de color rojo en sus hombros, cerrando la botella de tinta traída por una de sus sirvientas y colocándola en la mesita de noche junto a la cama. Usando la mesa portátil para desayuna, escribió una lista de nombres llenando tres hojas de papel, entre manchas por gotas de tintas y tachones al equivocarse, dejó un par de nombres como su elección final.

No podía pasar el resto de la vida, llamando a sus hijos, bebés.

—Listo. Ambos duermen tranquilamente. —Dijo Carsein, estirando sus brazos por encima de su cabeza, regresando de cantar una canción para sus dos hijos, que roncaban plácidamente en la cuna colocada al otro lado de la habitación a unos pocos pasos de la cama que compartían.

Jieun levantó la vista de su papel, notando que Carsein deshacía torpemente los botones de su camisa, caminando entre tropiezos, hasta llegar a la cama y caer de cara. Sonrió divertida, inclinándose hacia adelante y estirando su brazo, palmeando el rojizo cabello rebelde.

—Buen trabajo. Ya no desafinas tanto. —Felicitó con una sutil broma.

Carsein berreó, su voz, amortiguada por las cobijas y el colchón, Jieun rio en broma. Carsein estiro su mano, buscando atientas la de Jieun que seguía acariciando su cabello; al dar con ella, despegó el rostro del colchón girando su rostro y poniendo la mano de Jieun en su mejilla.

Le gustaba sentir la textura y temperatura de su piel.

—Estoy muerto.

—Podemos contratar una niñera, ya tienes bastante trabajo administrando la mansión y vigilando los entrenamientos. —Sugirió, considerando algunas opciones. —También si me das algunos papeles-

—No. —Dijo de inmediato Carsein, cortando las palabras de Jieun. Apoyándose en sus brazos, dejó que la suave mano regresara a su dueña, mientras él se hincaba en el colchón y se sentaba sobre sus piernas. —La anciana y el brócoli loco dijeron que guardes reposo un mes. Sin presión, sin trabajo, sin dejar esa cama.

—Me siento mejor. Soy muy resistente, ¿recuerdas? —Levantó su brazo, palmeando el interior de su antebrazo.

Ella quien había muerto dos veces, perdido sus poderes por salvar a otro y finalmente regresar de lo que sería su tercera muerte. Dar a luz a un par de bebés, era como un paseo por el parque.

—No, es no.

Sin embargo su historial no parecía convencer a Carsein, al contrario, aumentaba su preocupación por ella y reafirmaba su opinión de no dejarla que abandonara la cama, ni siquiera la habitación por al menos ese mes. Todas sus necesidades serian cubiertas por las sirvientas, cuidada por los caballeros en la puerta cuando él estuviera trabajando y pequeñas visitas de Liver, Zen y Chang Xue para que no se sintiera tan sola.

—Recuperar tu salud es primordial, además no me importa trabajar extra y los bebés son tranquilos. —Dijo Carsein, levantándose de la cama, yendo al armario a por su pijama.

—Tu cuerpo no está en condiciones de pasar largas horas sentada, llenando y revisando aburridas hojas de papel. —Siguió, quitándose el uniforme y cambiándolo por la suave tela del pijama que era del mismo color del chal en los hombros de Jieun. —Prefirió que pases las horas del día en la habitación con los bebés a que te lastimes. —Terminó de cerrar los botones de la camisa, recogiendo la ropa y arrojándola en un cesto al lado del armario, caminando de regreso a la cama y meterse debajo de las cobijas.

—Hm... ¿Enserio? —Respondió Jieun, elevando una ceja y cruzándose de brazos, olvidando lo que tenía escrito y planeaba mostrarle a Carsein.

—¿Qué significa esa mirada? —Preguntó Carsein estando sentado en la cama, aún sin cubrirse las piernas.

Sin amor - Ruta alterna CarseinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora