Capítulo 23: Reflexionando

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Manoban Camp 1820

El poco o mucho avance que pudo haber habido en la relación entre Bridget y Lalisa se vino abajo luego de la tarde en la que Bridget conoció a las elegantes mujeres de Drumnadrochit.

Una semana más continuó el periodo de hostilidad en el matrimonio. En esos días Lisa tuvo que seguir en casa debido a las ordenes del Doctor Nevon a pesar de sentirse mucho mejor; mientras tanto Bridget siguió organizando a la gente de Manoban Camp en las tierras para evitar encontrarse con ella bajo cualquier circunstancia.

Aquel día Bridget tuvo que volver a casa temprano debido a una cita con los hermanos McDonald para hablar de negocios como cada semana, luego de una corta negociación en la que ambas partes salieron conformes Bridget despidió a los ancianos desde la puerta, ambos subieron a su carruaje y se despidieron amablemente de la joven señora que les veía sonriente desde el marco de la puerta.

Cuando Lisa apareció en el marco de la puerta para unirse a su esposa en el despido de ambos hombres que ya se alejaban en su carruaje, Bridget le dijo sin alterar su rostro ni dejar de mirar aquel carruaje.

—Deberías estar descansando

—Y tú debiste llegar a casa desde hace una hora. El doctor Nevon vino a revisarme y tú no estuviste

—No creí necesaria mi presencia

—Estuviste las visitas anteriores- dice con un ligero tono de reclamo

—Me necesitabas en las visitas anteriores, ahora no es así. Tu salud ha mejorado bastante.

—En eso tienes razón. El doctor Nevon me dice que puedo hacer mi vida como de costumbre. Ya estoy fuera de peligro

—¿Entonces planeas acostarte con la otra mitad de Mujeres Escocesas que tienes pendiente?- interroga indiferente la castaña felina

—¿No estás siendo demasiado severa?

—Tal vez solo demasiado sincera. Pero dudo que eso te afecte, no estoy diciendo nada más que la verdad.

Bridget dio media vuelta ignorando a Lisa y pasándole por un lado pero ella le cerró el paso con un brazo.

—Déjame pasar

—Bridget, no podemos seguir así.

—¿Así cómo, Lisa?

—Siendo tan hostil, Bridget. Apenas y me diriges la palabra

La joven castaña miró indiferente para responderle.

—¿Acaso tengo que fingir ante la señora que usted me agrada solo para elevar su ego?

—Te agradaba antes... -Dice dulce la rubia.

—No. te toleraba antes. Eso es distinto- responde haciendo a un lado el brazo que le impedía el paso —con permiso

Lisa toma de un rápido movimiento entre sus brazos la delgada cintura de Bridget aprisionándola contra su pecho.

—Mientes... Sé que mientes- insiste en tono juguetón.

—Suéltame o no respondo, Lisa- gruñe la muchacha.

Eso parece más que una amenaza una invitación en los oídos de la dueña de Manoban Camp que clava sus labios en los rojos de su esposa que se sorprende por tal atrevimiento y por un segundo se permite reaccionar ante aquella pasión de la misma forma y deliberadamente entreabre sus labios para permitir que aquel beso se haga aun más profundo e íntimo de lo queya es, pero esa debilidad duró demasiado poco y la fiera muchacha de Elgin mordió con fuerza el labio inferior de Lisa haciéndole sangrar y aprovechando el gruñido de dolor la empujó.

El Canto Del Fénix (Jenlisa) || COMPLETODonde viven las historias. Descúbrelo ahora