Capítulo 45: Los abuelos y malos presentimientos

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Tiempo Actual

Hoy Lisa ha salido de casa, seguro algo que tiene que ver con Bridget, hay mucho misterio alrededor de esa mujer... y de todo en Manoban Camp. Quizás incluso yo. No le he contado a Lisa nada de mis sueños, de mis visiones y de todo lo que me hace sentir esta tierra. No comprendo de dónde viene todo, antes, la vieja Jennie, la que vivía en Corea se hubiera burlado de todas estas ideas que pasan por mi mente sin orden alguno. No entiendo nada, lo único de lo que estoy completamente segura es del amor que siento por Lisa, aunque no sé si esto es amor a primera vista o si se trata de un amor que ha existido desde tiempos ajenos a mis conocimientos, a mi lógica.

Un fuerte pinchazo en mi hombro me hace verme en el espejo, una marca de quemadura se nota en él, estoy por revisarme, pero Jisoo entra de repente y subo el hombro de mi bata para que no lo vea

—Buen día, dormilona

—Hola, Chu. ¿Cómo estás?

—De maravilla, estoy de acuerdo contigo, Escocia tiene su encanto.

—¿Chaeyoung? — Interrogo

—Chaeyoung...Oui, Oui...

—Eso es francés

—Si también el estilo de co... digo ¿te sientes bien? Aún estas en bata ¿noche agotadora con Lisa?

—No... es solo que... quise quedarme así un poco más

—Escocia te ha sentado bien, pero te he visto algo decaída en estos días, no eres la misma Jennie de siempre

—No me siento la misma, amiga... hay algo entre estas paredes que me está cambiando

—¿Tiene algo que ver con la escocesa? Sabes... es linda, pero... ¿no crees que es demasiado rara? y no solo por ese asunto de la inmortalidad, es demasiado misteriosa.

—No es la única con misterios, yo no le he contado nada sobre mi

—¿Qué tendías que contarle? No hay nadie de quien... ah, claro... ya entiendo. ¿no le has hablado de "él"?

—No. No es la mejor idea. Lisa es extremadamente celosa.

—Algo que compartir contigo.

—Yo no soy celosa.

—No lo eras hasta llegar a Escocia, he visto como miras a la asistente, si pudieras la matarías.

—Claro que no— Me indigno

—Señorita Kim...— escucho a alguien llamarme en la puerta y es esa mujer...

—Fuera de aquí

—He venido a curar su hombro, la señora me dijo que estaba herida

—¿Te lastimaste el hombro? — Se sorprende Jisoo

—No me interesan sus cuidados, salga de aquí.

—Debo insistir. En estas tierras las heridas son peligrosas, por favor... no sea necia.

—Debes hacerle caso, amiga. No seas testaruda. ¿Dónde está la mujer madura que conozco?

—Bien...—digo de mala gana

—Iré a buscar algo de comer, regreso en un instante— me dice Jisoo mientras sale de la habitación de prisa, yo no tengo tiempo de alegar nada.

—Por favor, permítame curar su hombro.

La mujer se acerca a mí y colocando una bandeja sobre el tocador descubre mi hombro, el ardor aumenta y ella lo nota.

—¿Cómo se hizo esto?

—No lo sé... solo apareció

La veo abrir un frasco con una sustancia espesa que coloca en mi espalda, el dolor se calma de inmediato y yo me relajo.

El Canto Del Fénix (Jenlisa) || COMPLETODonde viven las historias. Descúbrelo ahora