Reina de la mafia #3

CAP. 37

Gemelas RS.

Mis pequeñas saltan en la cama y aria no dejó de preguntarme por qué puse a dormir al hombre y hasta le contó a mamá y tuve que dar muchas explicaciones.

Erick salió hace un rato y lo espero con las gemelas comiendo palomitas en la cama, Angie se recostó conmigo y aria sheguía saltando en la cama, vimos unos cuantos capítulos de pepa y luego Erick llegó.

_Que tal mis pequeñas luciérnagas, papi las llevará por primera vez al parque de diversiones.

Sonrío cuando las dos empiezan a gritar me siento tan bien de que por primera vez en dos años saldremos todos juntos como una familia normal, bueno un poco normal.

Ducho a las pequeñas y les coloco pijamas que la cubren completas, no es que sean muy grandes tomaron el tamaño de mi mamá.

Salgo con ambas cuando me ducho y me coloco algo cómodo, bajamos las escaleras y Angie tiene en la mano su peluche de felpa que nadie se lo quita, abordamos el Lamborghini de Erick y el toma camino.

El trayecto al parque de juegos no es muy lejos, al bajar aprecio la rueda de la fortuna y varios juegos más, la noche está iluminada por las luces de todos los juegos y mis gemelas saltan de alegría, el padre toma a la más revoltosa y nos adentramos en el parque.

Los niños se mueven de aquí para allá queriendo que sus padres los lleven a todos los juegos.

_Mami mira el hombre duerme como el que dormiste.

Observo a dónde señala y miro a un hombre recostado en la silla, ¿Acaso esta niña nunca olvida?.

Y ¿Como rayos habla tan claro?.

Angie no suelta mi mano ni el peluche camino junto con ella y me subo a los caballitos que dan vueltas dramáticamente, el padre paga los boletos y la máquina empieza a dar vueltas.

Amo estos juegos, ángel me traía cada que podía.

Aria grita a un lado y Angie se sujeta de mis brazos fuertemente, sonrío un poco mientras veo a Erick grabar con su celular, me sonrío a la cámara cuando doy vueltas cerca suyo.

Me siento tan feliz, tan cómoda, tengo una familia, tengo un esposo y gracias a Dios tengo amor por parte de todos, no force una amistad con nadie y prefiero estar así que mi familia sean mis únicos acompañantes.

Pasamos la noche en el parque de diversiones, nos subimos a diferentes juegos y a Erick casi se le sale el corazón en la rueda de la fortuna, comimos algodón de azúcar y tomamos malteadas como toda una familia normal.

Dejo a las bebés en su habitación, ambas se quedaron dormidas cuando abordamos el auto para venir.

Erick me espera recostado en la cama con una toalla en la cintura mientras mira la TV, las ganas me surgen pero lo ignoro caminando hacia el baño, extraño estar con el piel con piel pero tendrá que esperar por qué sudé demasiado en esos juegos.

Me ducho y salgo en una toalla, Erick sigue en la misma posición pero está vez cubrió su cuerpo con las sábanas. Dejo caer la toalla y camino a la cama lentamente, me adentro en las sábanas y me quedo mirando a la nada.

_¿Te piensas quedar hay?.

_¿Para donde crees que voy?.

_Crei que íbamos a follar_ se levanta de la cama enojado y lo miro incrédula por qué ni yo hago esos berrinches.

_Que pasa?.

_Vete a la mierda Angela.

_Mmmm, que rico.

Me mira desde la puerta, la abre y se va.

_¿Pero que dije?.

Me levanto riendo y alcanzo la toalla, no se que le dio en verdad.

Bajo las escaleras llamando a Erick, lo encuentro en la cocina con un arma en la mano mirando hacia todos lados, no pregunto que pasa si no que me arreglo la toalla y alcanzo una de las armas debajo de los sillones.

Apunto a una sola dirección cuando el también lo hace, algo se mueve entre los sillones de la sala y no dejo de apuntar con el arma. Una balacera se escucha afuera y ambos nos arrojamos al piso cuando los cristales se rompen debido a las balas.

_Ve por las niñas.

Obedezco caminando rápidamente subiendo las escaleras. Las bebés duermen plácidamente y la balacera abajo no cesa, busco algo que ponerme y a tiempo récord le preparo una bolsa enorme con las ropitas de mis bebés.

No se a se debe esto pero no me quedaré observando, Erick entra desesperado y toma a una de las bebés, en la otra habitación nos colocamos algo de ropa y preparamos las armas, movemos la cama para bajar hacia el sótano con las escaleras, las bebés siguen dormidas y apuro el paso iluminando los túneles del sótano.

_¿Que diablos pasa?.

Corro con Erick al lado mío cargando a las bebés y salimos al patio trasero, las lámparas iluminan poco y una tanda de disparos sale en nuestra dirección, corro con todo lo que tengo a miedo de que algo les pase a mis hijas.

El Lamborghini espera en el estacionamiento y Erick no espera a que la puerta se abra por completo si no que sale sin importar que el Lamborghini se raspe la parte de arriba.

Abrochó el cinturón de las bebés en el asiento de atrás y no entiendo como rayos siguen dormidas cuando yo y su padre corrimos y hasta nos cubrimos los oídos por las municiones que lanzaban.

Erick maneja sin importar los medios de tránsito, una camioneta nos persigue y saco el rifle M4 disparando varias veces hasta que se revientan las gomas y pierde el control.

_Mamá.

_¿Si cariño que sucede?.

_Mamá maldición como puedes dormir tanto, abre las rejas ahora nos están persiguiendo te cuento cuando lleguemos.

Cuelgo la llamada sin esperar a que responda las camionetas nos persiguen atrás sin importar que dispare una y otra vez.

_¿De dónde diablos salen?.

Erick sigue manejando y las camionetas se nos acercan más y más, las puertas se están cerrando lentamente y una vez adentro puedo respirar, los hombres de mi padre empiezan a disparar a las camionetas y los de la camioneta también.

Salgo también con arma en mano y me ocultó detrás de las rejas que se cierran, voy caminando junto con la puerta que se cierra y disparó cuatro veces matando a pocos de los que están allí, las camionetas no dejan de venir y mi padre desde el balcón me ayuda con los de afuera.

La puerta se cierra y corro con Erick que sacó a las pequeñas que siguen dormidas profundamente.

Todos nos reunimos adentro cuando los disparos de afuera cesan y los hombres se van.