¡Te Pagaré!

Tres: Como un trabajo

Sabía que acercarme a Sunghoon no era una buena idea, no cuando él se encontraba limpiando el salón de ciencias por el castigo que le habían puesto por "mi culpa".

Aunque técnicamente no era del todo mi culpa, yo no le dije "hey, golpeame", ni mucho menos lo provoque de alguna forma, sólo le pedí un pequeño favor, a él le dio el gay panic.

Así que fiel a mi pensamiento de que yo era inocente y estaba libre de culpas, entré en la sala y me paré frente a él para sonreirle.

Él me asesinó con la mirada. ¿Dónde estaba el lindo y servicial Park Sunghoon?

───¿Qué haces aquí?

───Que agresivo ───le quite el trapo de sus manos y lo pasé superficialmente sobre la mesa que nos separaba───. Vine a ayudarte, ahora me debes una.

Rodó los ojos e intentó recuperar su trapo, pero yo fui más rápido y me giré hacia la mesa del otro lado para seguir limpiando.

Escuché a Sunghoon quejarse detrás mío.

───Sé lo que planeas y no va a funcionar, no voy a fingir una relación contigo.

───¿Por qué no? ───lo miré cuando comenzó a acomodar el escritorio de la profesora Kim───. ¿Es mucho para tu heterosexualidad?

Lo vi rodar sus ojos y reí, pero a él claramente no le pareció gracioso.

───Sólo no quiero hacerlo.

───¿Pero por qué? ───me acerqué a él con la excusa de ayudarlo───. Soy guapo y tendrás el privilegio de conocer a la familia Shim, ¿sabes cuántos quisieran estar en tu lugar?

───Entonces no tendrás problema en buscar a alguien que sí quiera hacerlo.

Tras decir eso me empujó del pecho y caminó hacia el final del salón donde comenzó a acomodar los tubos en sus respectivos lugares.

Pff, ¿por qué se hacía el difícil?

───Es que quiero que seas tú, no soy gay sabes pero sé admirar la belleza masculina y tú sí que la tienes.

Se sonrojó y aproveché eso para acercarme a él peligrosamente. Se puso rápidamente tenso e intentó alejarse.

───Estás loco.

───¡Te pagaré!

No supe exactamente porqué le dije eso pero seguro fue la desesperación del momento, aunque me pareció que eso no iba a funcionar del todo cuando frunció su ceño.

───No necesito tu dinero.

───Todos lo necesitan ───intenté seguir firme ante mi propuesta, aunque noté que fue incómodo para él───. Unos gustos de más no te harían daño, a todos nos sirve. Tu me ayudas y yo te pago por eso, ¡puedes verlo como un trabajo si quieres! ───lo vi en sus ojos, estaba dudando y yo obviamente iba a aprovecharme de eso───. Además me lo debes ───señalé mi ojo morado y él sonrió.

───Lamento eso.

───Puedes lamentarlo este sábado a las nueve mientras cenas junto a mi familia.

Él rió y una pequeña esperanza apareció para mí.

───Buen intento.

¿Por qué se niega tanto? Me estresa.

───Vamos, pareces que tienes miedo a enamorarte de mí.

Una de sus cejas se elevó con ironía.

───En realidad estoy seguro que el enamorado aquí serás tú.

Oh por Dios, ¿de dónde salió eso? No lo sabía pero me gustaba ese Sunghoon.

───Seré totalmente profesional. Te lo dije, como un trabajo, vas, cenas, finges estar perdidamente enamorado de mí, te ganas a mi familia y yo te pago lo que tú quieras para el final de la noche. Pan comido.

Pareció pensarlo y nuevamente la esperanza apareció en mí.

Normalmente no era tan insistente pero él era el crush de mi hermanastra a quien no tolero y, por cierto, a quien también quiero cerrarle la boca por ser una maldita homofobica, ¿y qué mejor idea de hacerle creer que el chico que le gustaba era gay?

───¿Me pagarás lo que yo quiera?

Uuuh, podía ser que ya lo tenía en la palma de mi mano.

───Lo que quieras.

Hizo una mueca, seguramente pensando el fabuloso trato que le estaba ofreciendo. Pasó unos largos minutos, tantos que comencé a notar que estábamos demasiado cerca el uno del otro, aunque Park parecía inmerso en sus pensamientos.

───Bueno... ───mis ojos brillaron───. Cien mil wones.

Ah, pero no pide nada.

───Tú obviamente te estás aprovechando de la situación, pero acepto.

Quise estrechar su mano pero él pareció notar entonces nuestra cercanía y me empujó nuevamente para seguir con la limpieza.

───Hablaremos mañana en la cafetería, ahora ayúdame a terminar de limpiar aquí.

No faltaba realmente mucho y tampoco era mi deber ayudarlo, pero no iba a perder la oportunidad que me había dado así que como fiel sirviente corrí hacia la escoba y comencé a barrer.

Jay iba a estar orgulloso de mí.

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───¿Lo lograste?

Sonreí con arrogancia mientras tomaba de mi jugo de frutilla.

───Obviamente, ¿con quién crees que estás hablando?

Chaehyun rodó los ojos y me robó de mi jugo. Maldita niña mimada.

───¿Cuánto tiempo le estuviste rogando para que aceptara?

Pff. Yo no le rogaba a nadie. Bueno, quizás un poco a Sunghoon, pero sólo un poquito. Aunque ellos no tenían porqué saberlo.

───Yo no───.

───Veintitrés minutos ───me frené de golpe cuando escuché la voz de Sunghoon a mi lado, pero parecía que no era el único sorprendido de verlo ahí porque Chaehyun se ahogó con el jugo que me robó───, aproximadamente.

Jay lo miró rápidamente mientras Chaehyun trataba de tomar aire. Yo por mi parte intentaba entender qué hacía él aquí.

Había pasado un día desde que hablamos y lo convencí de ayudarme, no lo volví a ver luego de eso, bueno, sólo en clase pero eso no contaba.

───Tú eres Sunghoon, supongo ───Jay le sonrió sinceramente───. Soy Jay, amigo de Jake, y la niña de cabello rosado que se está ahogando desde que llegaste es Chaehyun, ella dice que es nuestra amiga pero eso es algo dudoso.

Vi a Sunghoon sonreír. Pff, la primera vez que yo le hablé sólo recibí un golpe, del cual Ryujin hizo miles de preguntas.

───Un gusto conocerlos ───agachó un poco su cabeza en modo de saludo y luego me miró a mí───. Vine por ti, dije que hablaríamos hoy sobre lo del sábado.

Asentí y lo invité a sentarse a mi lado, él miró dudoso a Chae y Jay. Claro, él no sabía que ellos ya sabían.

Sonó como trabalenguas.

───Tranquilo, ellos lo saben, nos van a ayudar.

───Si, es que Jake no piensa correctamente.

───Él nunca tuvo pareja, por eso.

Menudos amigos.