Epílogo

378 33 2
                                    

Edades
Jungkok: 44
Nahee: 44
Jisang: 20
Hyun Mi: 16

Narra Jisang

—Appa... appa.

Hyun Mi sigue en su intento de convencimiento, más es inútil porque nuestro padre no sede.

—Appa... anda, ¿Si?—  jala, su brazo varía veces —omma dijo que no hay ningún problema.

—¿Ah, si?— alza una de sus cejas —muy bien, dile que tendrá que afrontar las consecuencias en la noche.

—¡Jeon Jungkook!

Omma pega un grito y puedo ver cómo  sus mejillas ahora están totalmente rojas y un tanto avergonzada por tal comentario.

—Demasiada información.

Mi hermana tapa sus oídos y  appa solo da su típica sonrisa

—Ves que eres una bebé. No deberías seguir insistiendo con ese chico.

—Tengo dieciséis por si lo habías olvidado appa.

—Eres una bebé, ¡Mi bebé!— dice señalándola con el dedo.

—Amor, lamentablemente ya no es así, ellos crecen al igual que lo hicimos nosotros— dice omma interfiriendo  con un tono suave.

—Es una bebé— mi padre detiene el juego y yo solo bufo. 

—Anda appa, por favor— dice haciendo un puchero. —Lía no tuvo ningún problema al llevar a Kyung con el tío Tae, además es muy bueno con el.

—Kyung  es un buen chico, lo conozco desde que nació. Además, es diferente porque ellos se criaron prácticamente juntos.

— Appa Seo Joon no es diferente a él y no miento.

—Eso yo no lo sé y como no lo sé, es un no.

—Oppa no seas así, ayúdame, es tu mejor amigo.

—¿Qué?

Mi padre me mira y yo solo miro a mi hermana por aquello que acaba de decir.

—Anda, ¿Si?, ¿Quién es el mejor appa del mundo?

— Yo, yo princesa...

—¿Entonces?... ¿Si?, al menos date la oportunidad de conocerlo. Hazlo por mi, por tu princesita.

Ella sabe que hablando en ese tono y mirándolo así appa no se negaría. Omma lo mira seriamente haciendo que él voltee los ojos.

—Está bien, puede  venir...

Mimi y mi madre sonríen satisfechas mientras la menor aplaude emocionada.

—No te emociones.

Y aquí vienen  los peros

Ella frunce su ceño y mi padre se levanta y arremanga su sweater.

—Sin contacto físico, y menos frente a mí, nada de palabras melosas ni sonrisas pícaras.

Ella asiente frenéticamente mientras lo abraza

—Y tú — mira a mi madre mientras la señala con el dedo. —Ya verás lo que te pasará esta noche.

—¡Gracias appa!  ¡Me iré a arreglar!

Sale corriendo de la sala de cine y yo solo río por cómo salió. Le doy play al juego, pero mi padre lo detiene nuevamente.

—Tú, los vigilarás

—Tienen que estarme bromeando, ¿No?

—No, así que espero que tus ojos estén sobre él, aunque sea tu amigo no me fío.

Royal Family Donde viven las historias. Descúbrelo ahora