Las luces de los faroles son facinantes, como al pasar rápidamente ellas parecen dejar un hilo de luz que simulan dibujar algo. ¿Cómo no lo había notado antes?
-Hey, concéntrate en lo que te digo -Rosh llamó mi atención, giré hacia él.
-Los faroles son muy~ bonitos. ¿Lo sabías? -comenté dedicándole una sonrisa.
-No me digas que ya te he perdido completamente. Solo préstame atención y baja del auto -ordenó, realmente no se ve contento, tampoco tan irritado, pero es obvio que no está contento-. Anda, muévete.
-No~, no quiero~. Quiero otra cerveza~ -arrastré las palabras.
"¿Por qué me cuesta tanto formular algo más autoritario? Qué raro suena la palabra autoritario... No me había dado de cuenta"
-Por querer otra cerveza es que estás cómo estás. Solo sal del auto -levanto la voz, pero yo no pude hacer más que pegar mi cabeza al vidrio de la puerta de mi lado.
-Ya te dije... Que no quiero... No lo haré.
"¿Por qué no solo lo entiende?"
Escuché como abrió la puerta y la azotó con fuerza para luego pasar frente al auto y pararse frente a mi puerta, y luego la abrió sin dudar. Casi me caigo de boca al piso, de no ser porque me sostuve del asiento.
-Vamos, no me hagas una escenita ahora. Sal, ya de por sí me has causado bastantes problemas y hasta un susto me metiste.
-¡No, ya te dije~ que no lo haré! ¡No quiero caminar, estoy cansado! Mucho~
-Bien, pues no camines -cedió, me tomó del brazo y me jaló, al chocar con su pecho me sacó a la fuerza del asiento y después de sentir que el mundo giraba, lo siguiente que supe es que me estaba llevando cual costal de papas. Yo solo me pude echar a reír -. ¿De que mierda te ríes ahora?
-Es que soy una patata~ -comenté alegre.
Él gruñó. Maldito aguafiestas.
Sé que me volveré famoso con el hit de "soy una papata" que me inventé cuando Rosh me llevaba cargado hasta la puerta de su casa, pero creo que él no comprara el disco porque me pidió que me callara en más de una ocasión con un tono irritado. La música no es para todos, algunos no comprenden el arte.
-En el campo~ una papa~.
-Bien, llegamos. Ya deja de cantar pendejadas y cállate, desafinas más que un perro chihuahueño con bronquitis -ordenó y me bajó, yo apenas me pude poner de pie, el piso se hundía de vez en vez, ¿Acaso no podía notarlo? Estoy en los juegos mentales -. Quédate quieto mientras abro la puerta, necesito ambas manos-dijo, pero mi desequilibrio y el piso hundido no ayudaban así que me tuve que recostar en su espalda para no caerme.
Él... es cálido, y su cabello azabache huele bien, si... Como "Head & Shoulder", y no del anticaspa. Claro que no tiene caspa, es demasiado sexy para eso.
-Ya, Janer. No te me encarames que me cuesta meter la llave -advirtió molesto.
-Es que el piso se tambalea... -expliqué dejándome caer por completo en su espalda.
-El piso no se tambalea, es tu nivel de alcohol en sangre lo que se tambalea, idiota -contestó seco.
-¿Sabes...? Tenía muchos nervios de venir a tu casa hoy, no tienes porque tratarme así -solté de pronto.
-¿Qué? Pero si no sabías que ibas a venir -comentó abriendo la puerta -. Vamos, entra -me tomó del brazo y me jalo para después cerrar la puerta con delicadeza, yo me solté bruscamente de su agarre.
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Esta Vida Mía [Borrador] [BL/COMEDIA]
Teen Fiction¿Qué tan tragicómica y rara puede ser la vida de un adolescente estadounidense de clase media? Pues mucho. ...