Se me había olvidado cómo era una vida normal y tranquila. Digo, sé que nada más ha pasado un mes desde que entré a esta escuela y todo se ha vuelto un desastre digno de un programa de Televisa, pero, vaya que tantas cosas han pasado que, irónicamente, el tiempo parece haber ido muy lento hasta ahora.
Si no supiera la fecha y la hora en la que estoy ahora y alguien viniera y me dijera que ha pasado más de un año desde que estoy en este desastre de vida, se lo creería sin problemas. Sin embargo, me asustaría si me dijera que solo ha pasado un mes, y probablemente me asustaría.
Pero incluso siendo está la semana más tranquila hasta el momento de mi realidad actual, no es como si no hubiera pasado nada de nada. No, señor, han pasado cosas, solo que son eventos que se podrían comparar como básicos para lo que es mi normalidad y eso ya es mucho decir. Digo, ya me secuestraron, torturaron y golpearon, ¿Que más puedo pedir de tranquilidad si no es la ausencia de eso? Y está semana lo cumplió con perfección.
Podría empezar por mencionar que Freddy volvió el martes, el día siguiente de que Victor me diera la flor. Fue insistente y su papá había estado de acuerdo con que volviera a la escuela tan rápido únicamente para que no se retrasará en sus estudios, cosa que Freddy aprovechó sin dudar, y la encargada de ponerla al tanto de todo lo que había pasado en su ausencia no fue ninguna otra que Winy.
Por si las mil preguntas de Freddy no bastaron, las dos mil respuestas de Winy tampoco, incluso con detalles extra que ni venían al caso. Yo no tenía la voluntad de contarlo de nuevo y en medio de todo eso me sentí muy avergonzado.
Escuchar esa humillante historia, que había vivido personalmente, de boca de otro, resaltaba cada pendejada cometida. Oh, pero nada comparado con la parte en la que llegó el momento de contarle a Freddy sobre mi pequeño triángulo amoroso involuntario orquestado por mi nuevo pretendiente: Victor.
Debo decir, su cara de consternación, superó a la de Winy. Tal vez porque asimiló más información de golpe que Winy, pero no era nada como mi consternación cuando me enteré, la mía fue peor porque yo viví ese momento en vivo; y no bastó con eso, también tuvo que mostrarle los vídeos de la fiesta.
Hubiera muerto de vergüenza ahí mismo si Freddy no se hubiera tomado las cosas mejor de lo que esperaba, es decir, sí, estaba muy asombrada, pero manejó bien las cosas. Sí, las manejó bien y se preocupó... después de reírse un poco de mí.
Después de ese momento ahí si pudo preguntarme si estaba bien, como si estuviera herido o algo así, parecía una mamá angustiada y asustada, incluso pidió revisar mi herida que, para ese momento, se encontraba mejor. Seguidamente me preguntó cómo me sentía y por último me hizo varias preguntas muy lógicas con suficiente tacto referentes a toda la situación.
Una de esas fue si sentía algo por Víctor, aunque me tomó por sorpresa, tajantemente había respondido que no, — lo mismo que con Winy — luego me preguntó por qué había aceptado sus regalos entonces y a eso respondí simplemente que dejarlo intentar no es lo mismo que aceptarlo, nunca pasaría. Unas cuantas preguntas después el asunto quedó en disculpas por no haberme podido apoyar por su ausencia y algo de compasión. Eso fue suficiente para mí.
¿Por qué sienten esa necesidad de disculparse? No lo entiendo, no es como si fueran culpables de algo.
[Tal vez sea lo mismo que tú con tu necesidad de ser dramático.]
No, definitivamente no es lo mismo. Y yo no tengo necesidad, que mi vida sea dramática es distinto.
[Como tú digas.]
Sí, por supuesto.
De segundo puedo mencionar el importante hecho de que Victor cumplió con su promesa de encargarse del problema con Dick.
ESTÁS LEYENDO
Esta Vida Mía [Borrador] [BL/COMEDIA]
Roman pour Adolescents¿Qué tan tragicómica y rara puede ser la vida de un adolescente estadounidense de clase media? Pues mucho. ...