— Otro trago!— Jackson... Hoy me embriago con Yixuan. Ustedes no.
— Jefe solo es el segundo.
Yixuan sacó su arma y disparó al cielo. Los demás le miraron confundidos, pero el golpe que recibió fue de Yibo. — ¿Eres imbecil? ¿Quieres llamar la atención?
Un poco mareado Jackson tomó la botella entre sus manos. — Solo estoy muy contento hoy...
—¿...?
— Wenhan se despertó.
— Sirvan otro trago... Parece que por lo menos hay buenas noticias para alguien.
— Yibo... ¿Puedes dejarlo ir?
Yixuan interrumpió el brindis.
La mirada de Yibo se amargo. — XuanGe... Eres mi hermano, pero sabes que no puedo hacer eso. Wenhan sabe demasiado.
— Pero... Yibo...
— Yixuan detente! Tu sabes como son las cosas! — Jackson trató de detenerlo.
— A menos que se quede a tu lado. Confío en ti, pero en el no.
— Yibo! Es demasiado inconveniente! No necesitamos donceles. Las mujeres y los donceles son problemas. Hay que protegerlos.
Bouboo se había quedado callado. — Le enseñare a cuidarse.
— Está bien. — Yibo brindó. Jackson maldijo... Su jefe había perdido la razón.
Cuando se sintió lo suficientemente ebrio, después de haber tomado desde la mañana Jackson acompañó a su jefe a la habitación. No estaba tan ebrio... Pero su cuerpo estaba acalorado. El relajo los musculos de su cuello y al pasar por uno de los pasillos, vio la silueta del pelinegro yendo hacia la cocina. Llevaba a una bata blanca... Tan tarde y Zhan estaba ansioso. No tenía mucho en lo que usar sus energías así que dormir era un acontecimiento.
— Yibo... — Jackson vio que siguió la silueta. Quiso detenerlo pero una mirada de reojo le fue suficiente para saber que no quería entrara.
Ahí estaba el pelinegro empinando su trasero tratando de alcanzar la nutella del estante. Logró que la bata se levantara lo suficiente para dejar ver un poco de sus muslos y Yibo se recostó en la pared. El estiró su pantalón en su entrepierna...
Zhan empezó a comer de forma desprevenida la nutella. Yibo se reacomodo sin hacer ruido alguno...
Zhan lamia la extensión de sus dedos con su lengua roja y al final lo chupó. Le encantaba el sabor del chocolate.
Yibo aclaró su garganta, realmente pensó que Zhan estaba pretendiendo que no había sentido su presencia ahí.
Era evidente que lo estaba seduciendo...
El pelinegro se congeló en sus movimientos y sus piernas se tensaron sin saber quién podía estar vigilandolo. De repente sintió que la bata era tan corta. El bajo su mano sutilmente y le jaloneo hacia abajo... Sintió su cuerpo tan desnudo que se estremeció.
El trató de mirar de reojo... Y en la oscuridad solo podía ver que era un hombre alto...
La respiración se le entrecorto.
¿Yibo?
XZ mood: comiendo nutella. No estoy seduciendo a nadie, ¿OK?