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—¡Dae ya está el desayuno!— grita Hongjoong desde abajo apurandose para irse a arreglar y salir a su trabajo.

Pone los platos sobre la mesa junto a la comida que preparó para estar con su hermano como todas la mañanas antes de que los dos se dirijan a sus distintas obligaciones.

A los pocos minutos, el menor baja no viéndose de un muy buen ánimo y no era específicamente por levantarse temprano o que aún tuviese sueño.

—Hongie no quiero ir a la escuela— dice cuando ya está sentado con el castaño.

—¿Qué pasa? ¿Estás enfermo?

—No...

—¿Entonces?— pregunta preocupado —¿Te están haciendo algo? ¿Te molestan tus compañeros?— se alarma a lo que contrario niega enseguida.

—No, no me hacen bullying ni nada, es solo que mis supuestos amigos son los que buscan problemas y por más que intento alejarme de ellos parecen no entender y lo que menos quiero es tener problemas en la escuela— comenta jugando un poco su comida.

—¿Haz pedido que te cambien de salón? ¿Desde cuándo está pasando esto? Debiste comentármelo a penas lo notaras Dae— regaña y este baja un poco la cabeza —pero no te preocupes, mañana me acercaré y le daremos una solución a esto

—Es que no me quiero meter en líos con ellos si los acuso

—Pero ponte a pensar que esos líos te pueden arrastrar a ti, por eso, por más "amigos" que sean, debes decirlo

—Está bien...

—Ahora termina de comer que se te hace tarde

Ambos continúan conversando acerca del tema ya que Hongjoong quiere obtener más detalles.
Después de un rato terminan sus desayunos y el mayor despide al pelinegro dejandolo ir, además, le advierte que cualquier cosa que pase lo mantenga informado.

Por lo que, luego de quedarse sólo, lava los platos y ordena la cocina para subir rápidamente e irse a cambiar.

El humor de Yunho todo el día estuvo por los suelos

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El humor de Yunho todo el día estuvo por los suelos. Tantas cosas por atender y sumándole la pelea con Mingi que se había extendido hasta varios días si hablarse lo tenían demasiado irritado, sintiendo que en cualquier momento tendría un ataque del estrés.

—Ten estos papeles. Cuando venga Mingi dile que los firme para la reunión que tenemos en una hora— ordena a una de las trabajadoras.

—Pero usted mandó estos y ya los firmó ayer— comenta nerviosa.

—Claro que no

—Sí señor, fue en la mañana de ayer

—¡Pues que los firme de nuevo!— se exalta y la mujer asiente saliendo a la vez que Wooyoung entra.

—Vaya, nos levantamos de pésimo humor— dice sentándose en frente de él.

—De verdad no estoy para que me digas nada— el rubio cierra sus ojos frotando un poco su sien.

Bitter Sweet (Minjoong)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora