Serendipia (Saga Sempiterno, Libro 2)

CARNADA

¡ÚLTIMOS CAPÍTULOS!

¡ÚLTIMOS CAPÍTULOS!

¡ÚLTIMOS CAPÍTULOS!

-¿De qué tanto hablaban? – Blaise la recibió con un abrazo y un beso en la coronilla –

-Cosas de mujeres Blaise – rodó los ojos –

-Esas cosas me gustan – susurró en su oreja –

-Hay por amor a Morgana – musitó Theo – podrían respetar la casa de los padres de Hermione

-¿Demostrarnos cariño no es respetarla? – sonrió la pelinegra de medio lado abrazándose al moreno –

-¡Draco! – negó Theo alejándose de la pareja – aviéntales un hechizo de agua por amor a Salazar

-¡Ya sepárense! – negó dejando el té sobre las temblorosas manos de Hermione – es momento de planear la mejor estrategia que podamos – se llevó las manos al rostro – y sólo para que quede totalmente claro no estoy de acuerdo con ello

-No tenemos otra opción – musito Blaise sentándose en el sillón de una plaza con Pansy en sus piernas – cuando a nuestra nueva... adquisición se le ocurrió besarte enfrente de todo el mundo

-No te puedes resistir a eso Blaise – Pansy le abrazó por el cuello – no podemos negar que Draco levanta ese tipo de comportamientos

-Seguimos aquí – rodó los ojos el rubio – ahora lo único que podemos hacer es tratar de pensar en los puntos débiles que ellos puedan tener – los observa – y en teoría sé que ellos son mi familiares, pero... – movió la cabeza de un lado a otro con una mueca en el rostro –

-¿Qué pasa? ¿Qué no convivías con toda la familia? – preguntó de manera inocente Luna provocando las carcajadas de todas las serpientes – ¿Fue algo gracioso?

-Nosotros no convivimos – respondió Theo tratando de tranquilizarse – simplemente asistimos a las reuniones

-¿No es lo mismo?

-En teoría – asintió Pansy – pero lo que se ve en las reuniones simplemente son negocios, acuerdos – mueve la mano – hacer las mejores conexiones con las personas correctas

-Exacto, no hacemos comidas lujosas en nuestras mansiones porque tengamos demasiados amigos – se burló de medio lado Blaise –

-Entonces ¿Cómo es que ustedes se hicieron buenos amigos? – preguntó Hermione –

-Porque en las últimas décadas somos los herederos de las familias más importantes dentro de los Sagrados veintiocho – respondió Draco – hacer alianzas entre nosotros les conviene a todos nuestros padres

-Aunque mi madre y Cissy en realidad lo veían desde otro punto de vista – sonrió nostálgica Pansy – querían que tuviéramos un entorno menos solitario entre nosotros

-Chicos enfóquense – los centró Theo – los hermanos Lestrange ¿Qué sabemos de ellos?

-Que poseen una fuerza brutal y tienen el cerebro del tamaño de un cacahuate – sonrió Pansy – son despiadados, de los mejores soldados que ha tenido el Lord jamás, no son personas con las que te gustaría meterte... al menos no a propósito

-Debe de haber alguna manera de vencerlos – Draco comienza a caminar en círculos alrededor de la sala –

-Y la hay – asiente Hermione – los capturaron una vez así que si estudiamos la manera en que lo lograron

-Hermione no podemos hacerlo – niega Pansy –

-Ya sé que el riesgo puede ser enorme... pero podemos mejorar la estrategia si tan sólo...

-¡Que no se puede joder! – gritó Pansy poniéndose de pie –

-Tranquila Pan – Blaise la tomó del brazo volviéndola a colocar sobre su regazo –

-Lo... lo siento – mustió Hermione al verla tan afectada –

-No es personal Granger – intervino Theo tras unos minutos en silencio – no se puede simplemente porque no tienes el factor que hizo a uno de los hermanos Lestrange caer en la trampa mientras el otro trataba de rescatarlo

-¿El... el factor? – preguntó la castaña confundida –

-Mi madre – susurró la pelinegra escondida entre los brazos del moreno –