La fiesta

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-No me jodas. La cocaína es mucho más barata. -exclamó Sasuke en shock. Viendo el costo de los medicamentos ahora que estaba frente a la farmacia. Y claro, porque el puto seguro de gastos médicos no incluía esos medicamentos. No los que el necesitaba por su maldito problema con las drogas.

Naruto dio una sonora carcajada, ganándose una mirada reprobatoria por parte de su compañero, que no parecía creer lo que estaba en la farmacia, por suerte el no lo había pagado, si no su jefe.

-En serio Naruto. ¿Sabes a cuanta gente tendría que tirarme para pagar eso?

-Sasuke. El seguro que tenemos te aseguro que si lo cubre. Y los que no. Tómalo como mi regalo. Y yo creí que nadie consumiría más medicamentos que yo.

-¿Y qué? ¿quiere que chupe el pene o qué?

-No estaría mal, si te pusieras unas tetas seguro que podrías practicarme una rusa. -respondió a modo de broma. El menor se mordió los labios. Naruto adoraba ese tic por parte de él.

-Además, bueno. Manejarás dosis reducción. Es claro que no puedes dejar todo de golpe. Así que.... Bueno. Serán varios... a ver dejame ver la receta, quiero saber en que gasté mi dinero. Oh. Antidepresivos. ¡Ja! ¡Sabía que eras un emo depresivo!

Esta vez Sasuke le quitó la receta de un manotazo y le dio un golpe que el rubio alcanzó a bloquear con su hombro.

-¡Ay! -el rubio hizo un puchero, quejándose por el golpe. -¿eso por que fue?

-¿A quien llamaste emo? Maldito tonto.

-Pasaste de emo depresivo a emo vengador.-se quejó por el golpe sobándose dramáticamente.

-Hijo de....

-Soy huérfano. -le cortó divertido.

Naruto dejó a Sasuke en su departamento, con cierto disgusto, ya que aun podía ver a Suigetsu andando en los alrededores, aunque claro, apenas lo veía el hombre saldría huyendo, no es que quisiese que Naruto le arrancase el brazo, Sasuke iba a salir, cuando Naruto hizo un movimiento y activó los seguros. El Uchiha se giró hacia él y enarcó una ceja perfecta, esperando una explicación.

-Esto solo funcionara si tu quieres dejarlo. ¿Ok? Se que te negaste a ser internado, y no lo veo mal. Pero Sasuke, por favor. Haz las cosas bien, vale... no puedo perderte.... No Sabes lo mucho que eso me descontrolaría.

-si, no cualquiera puede aguantar tus golpes.

-Ojalá fuese tan sencillo como eso.-comentó antes de dejar salir al más joven, dejándolo en su departamento. Asegurándose de que subiría y luego esperando una hora, cuando se sentía con cierta seguridad de que no se iría, entonces se alejaría.

***

Sakura fue llevada en esta ocasión por Hinata y su primo, al departamento de Sasuke, ya que ciertamente, la quería lo más lejos posible de Naruto, y si con eso la ayudaba a demás a conseguir el amor de su vida era mucho mejor. No estaba solos, Neji Hyuuga manejaba, y el pelo lacio se ponía de punta, con tan solo ver el tipo de gente en las calles.

-¿Segura qué es este es el sujeto con el que quieres andar, Sakura? Alguien con tu nivel podría estar una persona de otra categoría.

-Sasuke se ha desempeñado bastante bien. Y tú lo sabes Neji Hyuuga.

-Juró que no entiendo que le ven a ese sujeto, su actitud apesta. Pero todas ustedes se mueren por el, es como si les llamase la atención que sea un drogadicto.

Ella se hizo de oídos sordos, es cierto. Quizás ese es el problema que no había logrado resolver, estaba pensando y además estudiando sobre los tratamientos sobre como ayudar a su compañero. E Ino, le ayudana investigar los diferentes temas y fármacos con los que podría trabajar de ahora en adelante. Ahora solo tendría que convencer al Uchiha de aceptar, estaba pensando su discurso. Pero también aprovecho la oportunidad para hablar de Sai, el hombre de quien Ino estaba apantallada, porque claro, Sasuke era solamente para ella. Así que cuando Sai le comenzó que tendrían una fiesta dentro de poco para celebrar el cierre de la empresa, y cierre de contrato. Así que envió el contacto a Ino, la fiesta seguramente sería muy agradable.

Alcohol, cocaína y otras adicciones (NaruSasu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora