¿Cómo nos convertimos en extraños?

24. Graduation day

El día de la graduación había llegado, para Jolene y sus amigos, el día que por fin estarían más cerca de la vida adulta, seguían muy nerviosos ya que aún no sabían si los habían aceptado pero la emoción no dejaba de que esa duda le volara la cabeza, al menos no en este día tan especial para los tres.

La castaña comenzó el día levantándose para dirigirse al baño y tomar una ducha, después se colocó una mascarilla, se puso ropa que pudiera ensuciar se puso crema y bajo a desayunar, por obvias razones sus padres no fueron a trabajar después de desayunar ellos se fueron a alistar mientras Jolene limpiaba la cocina. Al término comió un sándwich para aguantar la ceremonia y se fue a su habitación para alistarse comenzó con el maquillaje, sencillo, se onduló el cabello y finalizó colocándose el vestido su teléfono vibraba así que lo cogio para responder los mensajes de Lewis los cuales decían que ya iba en camino a su casa para que fueran juntos a su graduación, lo que más raro le parecía era que estaba planeando que haría al rato con sus padres y no con sus amigos. Ella rápidamente bajo a la sala y su madre ya estaba lista con la cámara en mano, todos los padres suelen fotografiar a sus hijos en eventos así pero no cualquiera puede tener fotos de tan buena calidad tomadas por sus padres, Liane la madre de Jolene era una profesional pero su talento lo reservaba para su familia.

A Lewis lo dejo su madre en la casa de los Harper y después de algunas fotos finalmente se dirigieron a la escuela. Jolene estaba muy contenta hacía demasiado tiempo que el castaño no aparecía físicamente en su vida y tenerlo de nuevo consigo la hacía más feliz sobretodo en este día, durante el trayecto hablaron de la universidad y de lo bien que la estaba pasando si era pesado a veces pero sabía que había elegido bien gracias a una persona también estaba contento de que pronto les dieran los resultados aunque se le hizo raro que dieran después los resultados siendo que a el se los dieron incluso antes del baile pero eso no es tan relevante no dudaba que la chica entrara. Sus padres también hablaron con el, era una de las pocas personas con las que le gustaba que su hija pasara tiempo al igual que con Lilian y Joe, en sus mentes querían algo más con Lewis pero sabían que aún eran algo jóvenes.

Una vez que llegaron a la escuela Jolene se dirigió con sus compañeros ya con su toga puesta, los alumnos se colocaron en sus respectivos lugares y tiempo después la ceremonia empezó con el presidium de la gente importante; las palabras algunos videos entrega de los reconocimientos entre ellos se le otorgó uno a Jolene  por estar entre los mejores promedios; pero el mejor de esa generación había sido un chico de origen latino por ende el dio las palabras. Eso no le molesto para nada a la castaña a ella ya la recordaban por su singular actitud el ser vicepresidenta haber estado en una obra y ser la estelar, haber salido con el capitán del equipo y que la terminarán en una fiesta; pero eso es historia para otro día, lo que más resaltaba era que la recordarían y no porque fue la más lista o dio las palabras sino porque en los pasillos ella había dejado huella.
Cuando la ceremonia terminó y los alumnos lanzaron sus birretes Jolene y sus amigos daban por hecho que el próximo paso que darían cambiaria sus vidas, pero antes de eso las lágrimas los abrazos entre alumnos no se hicieron esperar entre ellos las famosas frases "seguimos en contacto" "no te pierdas" "amigos por siempre" "voy a extrañarte" "nunca cambies" "sigue tus sueños" "te amo" "no dejes de hablarme" muchas de esas frases tenían trasfondo; la preparatoria es una buena etapa donde te vas convirtiendo en una persona más madura pero sabes que eres joven y nunca más volverá a serlo además es cuando poco a poco empiezas a descubrir la persona que vas a ser para el resto de tu vida, haces amigos los cuales esperas que sean para toda la vida pero aunque lo desees tanto no siempre se cumple aunque trates de que la comunicación sea constante, pero vamos la mayoría se gradúa de la preparatoria con 18 años y creemos saber todo ¡Ja! Que vil mentira.

Sin embargo en la vida hay excepciones Lilian y Jolene llevaban conociendo la mayor parte de su vida y estaba por ingresar a la misma universidad diferentes facultades pero un mismo Campus es una idea muy loca pero ellas confiaba a ciegas que su amistad seguiría hasta que la vida se los permitiera al igual que con la de Joe pero aún existía la posibilidad de que él volviera a Rumania las chicas esperaban que eso no sucediera. Las fotos entre amigos siguieron y después se abrazaron para convivir con sus familias pero antes de irse acordaron verse en el verano pero los tres dijeron que buscarían trabajo para tener dinero en la universidad.

— Felicidades al segundo mejor promedio, pudiste ser el primero pero muchos profesores no se dejaron sobornar — comentó Lewis una vez que la castaña se acercó.

— No fue por falta de dinero solo no quise destacar tuve que fallar en algunos exámenes — Lene se encogió de hombros — Wright a veces hay que ser humilde es algo que deberías aprender.

El castaño solo movió la cabeza de un lado a otro, parecía negación pero se estaba riendo — Felicidades Lene — dijo en tono más serio y la atrajo hacia él para envolverla en un abrazo — No necesitabas que te condecorarán como el mejor promedio, ya lo eres para nosotros.

— Lo se, me alegra más que hayas asistido. — comentó en su oído.

— No quería, mi mamá me obligó — dijo una vez que se separó de ella.

— Es momento de una foto — Dijo Liane y ambos jóvenes se colocaron para la foto, después de eso la mujer se acercó a su hija y envolvió en un fuerte abrazo — Felicidades Lene, sigue cosechando buenos éxitos.

— Gracias mamá.

— Felicidades hija — comentó su padre ahora abrazándola — es el principio de lo que sigue pero se que te irá bien y ya sabes que estaremos para ayudarte en tu nueva etapa tu mamá y yo ya la pasamos.

— Si lo se, — asintió la chica y luego se abrazaron — gracias papá.

— De nada, ¿Que les parece si vamos a comer para celebrar?

— Vamos que muero de hambre — respondió su esposa.

Comieron en un bonito restaurant y todos le comenzaron a a hablar a Jolene de lo contentos que estaban por ella además de la nueva etapa que está por cruzar es una muy importante y los tres coincidieron que era una de la que más atesoraban como la mejor de sus vidas, eso le elevó las expectativas a la graduada pues anhelaba ya saber su resultado y empezar todo lo de la mudanza cuanto antes.