Nota de la autora: ¡Hola! Me atrasé un día en subir el capítulo, pero aquí está por fin. Estoy acostumbrada a subir un capítulo a la semana, así que todavía me cuesta acostumbrarme a la dinámica, pero prometo que intentaré que no pase más. ¡¡Un abrazo!!
~ Nova
Antes de regresar a Corea, tenía claro que Leo había sido quien me había roto el corazón, y pensaba firmemente que aquellos que vinieran tras él serían los rasguños. Sin embargo, a medida que iba viendo y conociendo más a Jimin, más dudas albergaba acerca de aquello que en su día tenía tan claro. Ese intento frustrado de beso que experimentamos en el polideportivo me hizo cuestionármelo todavía un poco más debido a la opresión de esas extrañas mariposas en mi estómago. Aunque no sabía si se trataba de amor o mera atracción, lo que sí tenía claro es que quería averiguarlo por todos los medios.
Ese día estuve a punto de perder el tren, así que nos despedimos a lo lejos, torpe y apresuradamente. Sin embargo, durante la noche y tras la cena, rememorar lo sucedido hacía que mi corazón y mi estómago se oprimieran. Incluso dormir me había costado, y a pesar de que Jungkook me contó lo ilusionado que estaba por la conferencia a la que había conseguido entrar, yo solamente era capaz de pensar en lo mismo todo el tiempo. No sabía qué me había hecho Park Jimin, pero no sería fácil librarse de algo así.
Al día siguiente no había visto a Jimin por ninguna parte durante las clases, así que afronté el entrenamiento con menos ilusión que los días anteriores. Se estaba convirtiendo en una fuente de fuerzas y felicidad, y yo ni siquiera me estaba dando cuenta de hasta qué punto estaba ahondando en mí.
Mi jornada escolar se extendió hasta las siete de la tarde, como todos los días anteriores. Estaba dando todo de mí misma para poder rendir como me gustaría en la competición entre universidades, así que acababa tan cansada que, por lo general, solamente me quedaban ganas de llegar a casa y dormir. Al menos, eso era lo que sucedía antes de que existiera una nueva variable en mi vida, que en este caso era Jimin. Ese día ignoré por completo mi cansancio y decidí que verlo al menos una vez al día me servía como una especie de terapia.
Al terminar el entrenamiento, salí de la piscina y me fui al vestuario cambiándome a toda prisa. Me llevé conmigo mi bolsa llena de la ropa de entrenamiento y me encaminé a toda prisa en dirección a la salida del polideportivo con un objetivo en mente.
- Nova, espera un momento -me detuvo la voz de Taeyang.
- ¿Sucede algo? -fruncí el ceño, esperando que no me detuviera demasiado tiempo.
- No, nada. Has entrenado muy bien -felicitó.
- ¿De verdad? Me alegra estar a la altura, seguiré entrenando duro -prometí yo, haciendo ademán de darme la vuelta para irme.
- Espera -me detuvo de nuevo Taeyang-. Nova, eres nueva aquí y no es que quiera meterme en tus asuntos personales ni nada por el estilo. Perdona que te pregunte esto, pero no puedo evitarlo. ¿Eres cercana a Park Jimin?
- Yo no lo calificaría así -me encogí de hombros, sorprendida por su pregunta.
- ¿Cómo lo calificarías? -insistió, haciéndome sentir incómoda.
- ¿Es relevante?
- No, no. Claro que no -respondió él, evadiendo mi mirada-. Simplemente me interesaba porque me has caído bien, y no estoy seguro de que sea una buena compañía.
- Agradezco que te preocupes, pero creo que eso debo decidirlo yo -respondí firmemente, zanjando el tema de conversación-. Mañana a la misma hora ¿no?
ESTÁS LEYENDO
[PJM] Si tú no fueras tú
RomanceNova, si tú no hubieras sido tú, nunca habría sentido el dolor más profundo que uno puede sentir en sus entrañas. Si tú no hubieras sido tú, nada de esto habría pasado, y tal vez nuestros corazones -o al menos el tuyo- seguirían de una pieza, tenien...