TRILOGY: VENASUMP

Extra#1

Futuro

Peichs Castella:

Alcé mi arma y disparé a siete infectados que se iban acercando se manera veloz hasta el auto y tiro a todos al suelo con disparos asertivos a su cabeza.

Vuelvo a entrar en el mismo y me giro a ver a mi novio para besarlo luego de recibir una felicitación de su parte.

-¿Visitaremos el laboratorio hoy? -preguntó Lucas mientras desvío su mirada un poco de la ruta y la llevó hasta mí.

Me encanta sentir su verdoso mirada sobre mí, y siento una ola de sensaciones agradables al cruzarla. Lucas es mi chico ideal por sobre muchas cosas en el mundo.

Físicamente tiene todo lo que me encanta de un chico. Cabello negro largo y enmarañado, piel pálida, facciones delgadas, cejas espesas del mismo color azabache de su cabello, nariz respingona, y orejas pequeñas en dónde relucen aretes. Además de un aspecto de chico rompe estabilidad emocional.

Buen físico gracias a su trabajo de soldado en grupos de exploración, y gran actitud. Cariñoso, tierno, amable, inteligente, dulce, honesto, y respetuoso. Es el mejor chico que he podido encontrar en este mundo.

-Mi madre me dijo que hoy sería la prueba de la primera vacuna con el chico que atrapamos la vez pasada -funcí ligeramente mi nariz-. Espero que la extracción de mi sangre haya servido esta vez. No quiero volver a sentir más pinchazos en mi vida.

-No volverás a dormir conmigo entonces -soltó burlón el chico haciéndome reír.

Golpeó su hombro mientras reímos y él vuelve su vista hasta la autopista. Ahora manejar por las calles de California es más fácil gracias a los trabajos que las personas de La Icmar hemos hecho en recuperación del estado. Ya no hay cuerpos tirados en la calle, y mucho menos tenemos autos repartidos por allí.

Lucas conduce con velocidad hasta nuestro último punto de visita diaria, mientras en el reproductor del auto utilizamos ese viejo disco que encontramos en una de nuestras expediciones, y ambos la tarareamos debido a las veces en que la hemos repetido. Era imposible no haberla aprendido.

La autopista de Oregon y California luce tranquila durante el trayecto que recorremos, pero, antes de llegar a un extremo un poco más lejano de la mitad, las cosas parecieron tomar un giro inexplicable.

-¡Qué mierda! -la voz de Lucas salió igual de sorprendida que la mía al ver la escena.

A la lejanía, se lograba ver aquello que nunca esperamos de vuelta en el estado. Una turba de infectados se acerca casi que corriendo mientras cruzan la exacta salida de Oregon y se conducen con velocidad hasta nuestro lugar.

-¿No se habían aniquilado a los infectados de las zonas vecinas? -el pelinegro me preguntó mientras yo no dejaba de ver sorprendida a los montones de contaminados acercarse.

-Arranca, Lucas -pedí como pude y como ví que no acató mi orden, me exasperé-. ¡Qué lo hagas ya!

-¡De acuerdo! -gritó el chico que comenzaba dar marcha atrás y giraba el auto. Minutos luego se atrevió a soltar-. ¿Vamos a la base?

-Sí, solo conduce y ya -solté apenas lo ví encaminarse a La Icmar.

Me giré hasta ver por la ventana trasera como seguían acercándose los infectados y solo pude soltarle algo que solo salió como un susurro.

-California no la podemos perder...

CONTINUARÁ

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Nota del autor:

Gracias por haberme acompañado durante todo este viaje, pero les informo que las escalas aún no terminan.

Necesitamos conocer un punto de vista de contaminación interna a una zona segura; el juego de esperanza y muerte de los contaminados; y ver si le conseguimos el fin a una pandemia.

Así que no se preocupen, aún tenemos dos historias más por culminar. Entonces, sepan que aún habrá mucho camino por recorrer... Procura no infectarte ☢️