Capítulo 7

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Presente

Peichs Castella:

Una semana bastó para que los insumos se nos acabaran. No teníamos nada de comida para el resto del día, y las últimas galletas de este día fueron consumidas en el desayuno. Fué imposible no consumirlas en dicha hora, debido a nuestro estado.

Estoy muy segura que además de mí, todos estamos hambrientos. Por si fuera poco, el estar exhaustos y mareados no nos ayudaba mucho. Definitivamente teníamos que salir a buscar comida.

Estoy acostada sobre la colchoneta mientras miró el techo abovedado del lugar, reprimiendo el tronar de mis tripas. Mi respiración es pesada para cuando decidí levantarme y darle un vistazo a todos.

Kelly estaba sentada con Aiden examinando una pistola, y Anna se les unía. Naoh, Will y Peter estaban más alejados y tomaban café en esos extraños recipientes que encontraron; son similares a tubos de ensayo. Lucas estaba duchándose, imaginé.

—¿Tienen hambre? —increiblemente mi voz sonó más fuerte de lo que esperé, y todos se giraron hasta mí—. ¿Soy la única que tiene hambre?

—Todos tenemos hambre —avisó Noah antes de darse otro sorbo de café—. Pero ya no tenemos comida.

—Nosotros no, pero en la cafetería sí.

—La cafetería está llena de infectados —recordó Peter, ya que él estuvo allí antes, pero no me detuve.

—Si, pero somos hábiles, nos podríamos escabullir en el lugar y...

—Es arriesgado —la voz de mi novio se extendió a mis espaldas.

Pude notar como secaba sus largos mechones de cabello negro con la toalla, y por más linda que se viese la imagen de él saliendo y vistiendo un nuevo y limpio uniforme, me mantuve firme.

—No les estoy pidiendo a todos que me sigan, porque en definitiva saldré a buscar —avisé antes de volver mi vista hasta el grupo—. ¿Quién quiere acompañarme?

Envalentonados se ofrecieron Noah, Anna, Will, y sin más salidas Lucas. Me di cuenta que el hambre es impulsivo para muchos de seguir... Al mismo tiempo se ofreció Kelly y Aiden, pero por supuesto no quise arriesgar al más chico.

Confíe en que si no llego a volver, y por la charla con el chico hace una semana, Kelly sería la mejor para quedarse a cargo de Aiden. Entre muchos, solo confío en ella.

Peter, pidió no salir. Aunque nos serviría como guía, prefirió quedarse antes de volver a someterse a un infectado. Además se excusó con su cansancio físico para no servirnos. De igual manera no nos dedicamos en ver mucho a los que se quedarían, ya que nuestra vida dependería de los que salieran.

Una vez decidido, los seleccionados caminamos hasta el cuarto de uniformes y nos preparamos. Todos nos colocamos nuevos pantalones, camisas negras, cascos, guantes, botas, protectores de codos, hombros y rodillas. Nos armamos con las suficientes armas y municiones, y cada uno cogió un bolso.

Nos enfocaremos en traer lo siguiente: proteínas, carbohidratos y frutas. Aunque lo mejor sería llevar enlatados, los mismos causarían mucho ruido y es lo menos que queríamos hacer.

Preparados nos acercamos hasta Peter, el cual nos planteó en la arena del lugar un mapa que Lucas muy fácilmente comprendió. Lo bueno de los exploradores es que logran ejecutar planos de muy fácil comprensión para personas de su clase, y llaman “escalas” a todos esos puntos que denominan importantes. Así que, luego de trazar una ruta, estábamos listos para partir.

TRILOGY: VENASUMPWhere stories live. Discover now