Caprichos del destino

CAPÍTULO 41

Después de desayunar Jimin agarró la maleta de Yoongi y a Holly para irse junto con el nombrado. Habían acordado con la pelinegra encontrarse por la tarde para ir a la cena de agradecimiento de los padres de Soni.

Cuando Yoongi y Jimin llegaron al departamento la rubia seguía allí, asi que sin pensarlo dos veces Jimin le dijo que ya no podía quedarse y obviamente la rubia reaccionó mal, hizo todo un escándalo antes de irse, pero al final se termino yendo sin antes decir.

- Se van arrepentir de ésto _ apuntó a ambos _ y tú Jimin, terminarás buscándome _ miró fijamente al rubio, para luego irse echando humos.

Al pálido si le dió un poco de intriga esa advertencia ¿Porque habrá dicho eso? Se preguntó así mismo.

El rubio no le prestó mucha importancia y se encogió de hombros, entre besos y risas pasaron el día hasta que llegó la tarde.

Ambos fueron a la cena junto con la pelinegra y aún que Jimin notó algo raros a los padres de Soni no dijo nada, pero claramente sentía la tensión en el ambiente. Una vez terminado todo ambos chicos se fueron despidiéndose y la pelinegra se quedó con sus padres por petición de su padre.

- Papá me alegra que las cosas estén mejorando _ habló la pelinegra con una sonrisa.

- Hija _ llamo su madre _ en realidad estamos alquilando este lugar.

- ¿Cómo? _ preguntó sorprendida, ya que durante la cena habían dicho que tenían unos ahorros y con eso compraron ese lugar _ pensé que habían dicho que...

- ¿Querías que nos quedemos en el departamento de tu amigo para toda la vida? _ preguntó su padre con algo de sarcasmo.

- Claro que no pero...

- Hija solo queríamos decirte que tienes que ayudarnos a pagar este lugar _ dijo su madre.

- ¿Y mi hermana?

- ¿Acaso no la vez? _ habló su padre _ aún está en depresión por su divorcio.

- Pero ya pasaron tres años _ recordó.

- Ya hablamos con ella y no puede ¿Qué no entiendes? Si no quieres ayudarnos entonces...

- Si los voy a ayudar _ corto rápidamente _ pero tendría que buscar otro trabajo más _ dijo pensativa _ por qué no creo que pueda con mis gastos y los de ustedes.

- Solo te estamos pidiendo ayuda con el alquiler nada más _ dijo su padre con desinterés.

- Bien, si eso es todo yo me voy _ se levantó para irse.

- Quería hablarte de algo más _ dijo el hombre seriamente.

- Que pasa.

- Es cierto que Yoongi se divorció _ la pelinegra solo se preguntaba ¿cómo es que su padre se había enterado de eso?

- Pues si _ dijo lentamente _ ¿pasa algo con eso?

- Pues que mal.

- ¿Papá, es en serio? _ preguntó frunciendo el ceño.

- Si, que mal que haya dejado a su esposa.

- Papá tu no sabes cómo fueron las cosas, además te recuerdo que mi hermana está igualmente divorciada _ dijo tratando de contener su molestia.

- Por eso mismo lo digo, que mal de su parte haber dejado a su esposa, así como dejaron a tu hermana _ dijo en tono molesto _ y también quería corroborar algo... ¿En serio se va a volver a casar?

- Si _ contestó la pelinegra.

- Dime que es broma que se va a casar con tu otro amigo con el que vinieron hoy _ claramente se notaba la molestia en sus palabras.

- Si, yo no lo veo nada de malo _ se encogió de hombros.

- Pues desde ahora quiero que te alejes de ellos, no puedes ser amiga de gays _ la pelinegra se sorprendió por el comentario de su padre ¿Cómo es qué le decía eso? _ eso no está bien, están enfermos.

- ¿Es broma no es cierto?

- Que tal si te pegan su cosa gay _ la miró asqueado _ por esa razón más que todo nos fuimos de su departamento.

- ¿¡Que!? _ se alteró la pelinegra _ ¡que dices papá!

- Ya lo dije, no te quiero cerca de ellos _ demandó firme.

- ¡NO! eso sí que no, como me puedes pedir eso _ empezó a negar con su cabeza _ ellos son mis amigos, además nos ayudaron cuando más lo necesitamos, no puedo hacer eso. Además que tiene de malo.

- ¡Eso está mal!

- Y que dirías si te digo que a mí me gustan las chicas _ dijo retando con la mirada a su padre _ ¿me dejaran de hablar? ¿Ya no seré su hija?

- ¡No digas tonterías! _ gritó él hombre golpeando a la pelinegra.

- Cálmate cariño _ su madre tratando de calmar al hombre _ ella no habla en serio.

- ¡Hablo muy en serio! _ dijo con los ojos cristalizados _ ¡así que no me pienso alejar de ellos solo por esa estupidez, yo no tengo homofobia como ustedes! _ gritó por último saliendo de la casa. Ya no quería escuchar las tonterías que decía su padre.

Aún con lágrimas en sus ojos empezó a correr, ya no soportaba su vida ¿Por qué las cosas se complicaban de esa manera? Tal vez había mentido con lo de gustar de otra chica, ya que a ella si le gustaban los hombres, pero no le veía nada de malo el ser homosexual. El sonido de su celular la saco de sus pensamientos.

- Hola

- Hola bonita, ¿tienes tiempo para tomar una copa?

- Que bien que me llamaste, porque justo necesito una _ dijo con una triste sonrisa.

- Bien entonces te espero en el lugar de siempre.

- Está bien, nos vemos _ se despidió. Sabía que estaba mal hacer esto, alcoholizarte no siempre era lo mejor, pero no podía evitarlo.