CAPÍTULO 32

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- ¿Ya tuvieron su primera pelea de novios? _ preguntó la pelinegra del otro lado de la línea.

- Al parecer si, pero no entiendo cual fue el problema _ respondió el rubio aún con el celular en la oreja.

- Solo trata de arreglar las cosas con él, Jimin _ dijo comiendo su helado _ y pregúntale qué fue lo que le molestó para que arreglen las cosas.

- Trataré, pero sigo sin entender cuál fue el problema, además ya te conté lo que pasó _ suspiró _ ¿detectas algo raro?

- En realidad sí _ respondió algo dudosa _ talvez, solo talvez le molestó que le dijeras amigo.

- ¿Tu crees? Pero después el dijo que era mi novio.

- Exacto, tu no lo presentaste como tal, entonces él tuvo que hacerlo _ reprendió.

- Pero si lo iba a hacer _ trató de defenderse _ pero él se me adelantó.

- Aún así... Pero este es solo mi punto de vista.

- ¡Y la mía! _ gritó alguien del otro lado de la línea.

- ¿Estás con alguien Soni? _ preguntó confundido, sabiendo que la pelinegra no solía llevar gente a su departamento.

- Si, Jungkook está conmigo _ afirmó.

- ¡Hola Jimin!

- Hola kook.

- Soni tiene razón, ve a disculparte con Yoongi, y ruega para que no te deje en abstinencia...

- ¡Jeon Jungkook! _ gritó el rubio.

- ¡Ya dame mi celular Jungkook! _ se escuchó forcejear al otro lado de la línea _ ¡Jimin! Escuchá, tu solo habla con él, pregúntale la razón de su enojo y luego discúlpate con él y al final cogen.

- ¡Soni!!!

- Jajaja jajaja jajaja _ se escucharon risas del otro lado _ ya sabes lo que dicen, el sexo de reconciliación es lo mejor _ está vez habló el castaño.

- ¡Ya cállense mocosos! _ les gritó _ además díganme algo ¿Porque están juntos? _ preguntó intrigado.

- ....

- ¿Chicos siguen ahí? _ preguntó ante el silencio.

- Si, solo... Solo estamos en una pillamada ¿Verdad Jungkook? _ la pelinegra preguntó a su acompañante.

- Si, pillamada.

- Pensé que ustedes no se llevaban bien _ dijo el rubio, ya que sabía que eso dos no se llevaban del todo bien.

- ¿Nosotros?

- ¡Si!

- Hicimos una tregua ¿Verdad Soni? _ preguntó el castaño a su acompañante.

- Ajá.

- Vaya que sorpresa, bien chicos hablamos luego _ se despidió.

- Bien, y arregla las cosas con Yoongi _ dijo por último la pelinegra.

- De acuerdo.

- ¡Por qué sino no habrá sexo! _ gritó por último el castaño y colgó ya que no quería escuchar un grito por parte del rubio.

Dejando su celular a un lado salió de su habitación y fue hacia la habitación de Yoongi para arreglar las cosas como había prometido.

- ¿Yoongi? _ llamó tocando su puerta.

- ¿Quien es~? _ se escuchó en respuesta, el rubio solo rodó los ojos.

- ¡El repartidor de pizza! _ dijo irónico _ ¿Cómo que quien es? Obvio soy yo, Jimin.

- ¿Quien es~? _ se volvió a escuchar como respuesta.

- Yoongi no voy a seguir tu juego, abre de una vez _ volvió a insistir.

- ¿Quien es~? _ el rubio solo bufó, Yoongi se iba a salir con la suya.

- Soy yoo~ _ contestó resignado, siguiendo el juego del contrario.

- ¿Que bienes a buscar~? _ se escuchó en respuesta.

- A tii~

- ¡Ya es tardé~! _ se escuchó como gritaba.

- ¿Por quee~?

- ¡Por qué ahora soy yo él que quiere estar sin tí~!

- Yoongi abreme de una vez _ volvió a tocar, ya cansado del juego.

- Voy _ al fin, pensó el rubio. Al interior se escucharon pasos y luego la puerta fue abierta dando paso al rubio _ ¿Que? _ el pálido se cruzó de brazos.

- Yoongi...

- No me digas Yoongi... Mejor dime amigo _ ahí se dió cuenta que Soni tenía razón, él estaba molesto por eso.

- ¿Es encerio Yoongi?

- Si, dime amigo desde hoy en adelante _ vaya que si estaba molesto, talvez en esta ocasión había metido la pata, pero no había sido su intención.

Caprichos del destinoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora