Drystan tarda un poco en responder, aunque luego mueve sus labios, enloqueciéndome por completo cuando corresponde mi beso, cuando sus manos se ciñen a mi cintura y me aprietan contra él. Aquellos labios suaves siguen un ritmo suave como los míos, endulzando mi mundo, enloqueciendo mi corazón, liberándome de los terrores de mi vida. Aumentamos un poco la intensidad, encontrando nuestras lenguas en medio camino, jugueteando de una manera tan deleitable que no quisiera que esto termine. Enredo mis manos en su cabello, presionándolo contra mí, dándome el gusto de sentirlo por completo.
Empujo hacia atrás, para caer sobre el sofá, acomodándome sobre sus piernas firmes que se adaptan a mi comodidad. Drystan me presiona contra sí mismo, ambos jadeantes por el calor del otro, deseosos de sentir cada centímetro de nuestros cuerpos. Mi mano se aventura por debajo de su camiseta, percibiendo aquella piel tan suave, sus músculos duros que presiono para sacarle un suspiro ahogado. Él baja la cremallera de mi abrigo, despojándome de él e introduciendo sus manos a mi espalda, rozando suavemente sus dedos a lo que mi cuerpo reacciona tan bien al hacerme jadear.
—¿Seguro que quieres hacer esto? —pregunta cuando le doy una oportunidad. Sus ojos brillan, llenos del deseo y la lujuria, quizá tanto como los míos.
—Nunca he estado tan seguro en mi vida.
Lo vuelvo a besar, pasando ambas manos por todo su pecho y abdomen, levantando la camiseta hasta quitarla por completo. Beso su cuello, haciéndole gemir. Sus manos bajan por mis muslos, presionando con fuerza para retomar el camino por mi abdomen y rodear mi cintura por debajo de la camiseta. Siento su erección bajo la mía, ambas rozándose de una manera tan placentera que parece irreal. Muevo mi cadera como lo he visto que hacen, y le gusta mucho porque gime más fuerte. Sus dedos toman la cinturilla de mis pantalones y bóxer, bajándolos lo que más puede, para luego acariciar mi trasero y mi pelvis.
Drystan levanta mi camiseta, haciéndose hacia adelante, rodeándome con sus brazos para así besar mi cuello. Carajo, se siente tan bien. Succiona mi piel, deja leves mordidas, y juega con su lengua, todo eso de una manera tan hábil que me hace gemir automáticamente. Consigue bajar más mi ropa, presionando mis nalgas y rozando mi miembro duro por su tacto. Sus besos bajan por mis hombros hasta mi pecho, tomando entre sus labios uno de mis pezones. Aquella sensación nueva me hace temblar y jadear, al mismo tiempo que sus manos suben por mi cintura para tomar entre sus dedos mi otro pezón, pellizcando levemente, regocijándome como nadie nunca lo ha hecho.
—Oh, sí, Drystan —se me escapa de la boca sin que pueda detenerlo. Gemir su nombre fue demasiado excitante para mí, añadiendo más necesidad de él.
Me sujeto de sus hombros para levantar mis piernas y que me desnude por completo. Deja libre mi pecho para volver a besarme con ímpetu, mordiendo mi labio inferior. Acaricio su torso, deleitándome de esto tan nuevo como es el cuerpo de un hombre. Por mi desnudez, él tiene libertad de tocarme por todas partes, electrificando mi cuerpo porque nadie lo ha hecho de ese modo. Sus manos viajan por mi espalda, por mi pecho húmedo debido a sus labios, bajan por mi abdomen, tocan mis muslos y agarra mi erección, presionándola suavemente. Inicia un sube y baja muy lento, haciendo círculos sobre mi glande húmedo por el presemen. Yo gimo sobre sus labios, muy a gusto de sentir su gran mano sobre mi miembro deseoso.
Y yo deseo algo más, algo que no lo había deseado hasta ahora.
—Fóllame —le ordeno en un susurro lleno de lujuria.
—Eso haré, Kier. Eso haré.
Él se apresura a levantarme de él, hasta que mi miembro queda a la altura de su boca. Primero toma mis testículos entre sus labios, sin dejar de masturbarme. Siento su lengua juguetona, arrancándome suspiros largos. Pasa la punta húmeda desde la base de mi falo hasta llegar a la cabeza, creando círculos allí, para luego acunar mi pene en su lengua e introducirlo en su boca muy cálida.

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Un Solo Camino ©
عشوائيKier Evanson era relativamente feliz con la vida que llevaba, siempre mostrando una personalidad risueña con sus padres, vecinos y novia. Pero la muerte de su hermana Willow volcará todo lo que creía saber de sí mismo y de su familia, especialmente...