La cita secreta

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Narra Víctor:

Tal y como acordamos quedamos de nuevo para vernos a escondidas, sentía muchas cosquillas en el estómago y estaba muy nervioso, tenía un extraño sentimiento de inmoralidad que llevaba mi adrenalina a las nubes.
Esta vez fuimos a mi casa, quedamos en merendar y ver una peli.
Ahora me tocaba a mí cocinar, decidí preparar unas tortitas... sin embargo salió de todo menos unas tortitas, todo era un desastre, la cocina hecha un asco, yo pringado...
Y entonces, en pleno caos él tocó a la puerta, ya no me daba tiempo de limpiar.
No me quedó otra que abrir la puerta avergonzado, mirando mis zapatos manchados.
-Tienes un poco de pelo en la harina- dijo riendo y sacudiéndome el pelo con la mano- ¿puedo pasar?
-Que remedio... he hecho un desastre, quería tenerlo todo bonito y cocinar tortitas para tí pero...- él cerró la puerta tras de sí y me abrazó, su pecho era tan cálido.
-Yo te ayudaré con todo Víctor.
-No, no quiero darte trabajo, yo solo quería hacerte tortitas porque tú me diste de comer la última vez.
-Pero si tú también me alimentaste- dijo con una sonrisa pícara.
-¿Eh? No... ¿qué se supone que te di yo?
Se acercó a mi cuello acariciandolo con la punta de su nariz y luego ascendió a mi oído.
-Tu cuerpo...- me puse rojísimo ¿Cómo podía decir esas cosas?
-Pervertido...
-¿Por qué? Eres lo mejor que he comido nunca...
Me levantó a volandas y me tumbó sobre la encimera de la cocina.
-Di-Diego ¿qué haces?
-Voy a alimentarme. Tranquilo, también te daré de comer.
Me quitó la camiseta y también se quitó la suya.
-Tienes un poco de caramelo aquí- dijo lamiéndome la comisura del labio.
Después de eso nos besamos y nos acabamos de desnudar.
-Cierra los ojos, confía en mí- no sabía si cerrarlos porque sentía que estaba a punto de lanzarse sobre mí y devorarme, a pesar de ello al final los cerré.
Sentí un chorro de caramelo cayendo sobre mi pecho y descendiendo a mis genitales. Después puso por encima nata.
-Abre los ojos- me puso una manzana en la boca.
-Juguemos, no dejes que se te caiga la manzana o habrá castigo.



EL CELOSO DE MI SUEGRO (+18)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora