El encuentro

85.3K 2.3K 120
                                    

Al fin estaba de vacaciones tras un largo curso universitario.
Este verano sabía que iba a ser diferente ya que por primera vez tenía novio, Diego, un chico perfecto... inteligente, guapo y con sentido del humor.
Quedé con él para pasar el día en la playa, lo que no sabía era que traería a un invitado especial. Me encontraba tumbada en mi toalla tomando el sol en mi cuerpo embadurnado de crema aceitosa y haciendo topless, detestaba que se me quedase el pecho blanco.
Cerré los ojos para descansar bajo la calidez del sol y noté que algo me hacía sombra.
Miré hacia arriba y me encontré con el que aún no sabía que era el padre de mi novio.
-Disculpe, ¿podría apartarse?, intento tomar el sol- respondí secamente.
-Tú eres Emma¿verdad?- me incorporé algo sorprendida, ¿de qué me conocía este hombre?
-Perdona ¿Nos conocemos?
-Me llamo Leo, soy el padre de Diego- la sangre me subió a la cabeza y me ruboricé al instante.
-Eh...bu-bueno e- encantada de conocerte- dije tartamudeando mientras me ponía una camiseta, me sentía desnuda delante de él, no sabía cuantos años tendría pero parecía muy joven y en forma, con unos brazos musculosos con las venas marcadas y tableta en el torso.
Entonces ví a mi novio llegar por detrás de mí.
-Parece que ya os habéis presentado. Hola Emma - se agachó y me dió un beso en la boca e intentó introducir la lengua, pero lo aparté, no pensaba besarme con él de ese modo delante de su padre, que nos estaba observando con una mirada fría y penetrante, con el ceño fruncido y una expresión seria.
-Perdona por la sorpresa Emma, tenía que resolver unos asuntos del negocio familiar con mi padre.

No sabía exactamente muy bien de qué iba ese negocio, a mi novio no le gustaba hablar de ello.

-Bueno, tengo prisa, vamos al restaurante que reservé y solucionémoslo ya.
-Yo... Diego no me dijo nada de que tenía que hablar contigo, disculpa si he resultado una molestia, me iré yendo a casa.
-No, tú te vienes con nosotros, él si que me avisó y he reservado para los tres. Voy a vestirme adecuadamente a aquella caseta de allá, espero que vosotros hagáis lo mismo- entonces miró al hijo con cara de pocos amigos y dijo con voz grave y ronca- si me entero de que os toqueteáis cambiándoos habrá consecuencias.

EL CELOSO DE MI SUEGRO (+18)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora