Cambio de roles

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Narra Emma:

No podía creer todo lo que me estaba atreviendo a hacer, la verdad es que yo estaba muy nerviosa, pero decidí ocultarlo para hacerme la dura.
Al ver a Leo vestido así no pude evitar reírme de la impresión que me dió, estaba acostumbrada a que él iba vestido de traje o con pintas de dominante, y ahora llevaba un traje de maid y orejitas.
Sin embargo estaba muy sexy y era tierno verlo avergonzado.
-Dame el extremo de la correa y ponte a cuatro patas- él me hizo caso pero actuaba cortado, lo acerqué a mí estirando suavemente de la correa, su cara acabó entre mis muslos.
-No tengas miedo, aquí está tu ama - dije acariciándole la cabeza y resolviendo su pelo, él se dejó llevar y cerró los ojos apoyando su cabeza en mi muslo, e incluso me pareció que ronroneaba.
-Buen chico ¿qué vas a hacer para complacer a tu dueña?
Él se quedó pensativo y entonces metió la cabeza debajo de mi falda.
Yo lo agarré la cabeza y lo aparté.
-No me has pedido permiso.
-¿Puedo lamer ahí, por favor?- dijo acariciando mi muslo.
-Está bien.
Él metió la cabeza y me bajó las bragas estirando con su boca.
Metió la cabeza entre las bragas y mi vulba y empezó a lamer.
-Ah~ - unas cosquillas placenteras invadieron mis genitales.
Succionó la zona donde se encuentra el clítoris y la soltó, volvió a succionar y así continuamente, muy rápido, como si fuese un chupete.
Introdujo su mano debajo de la falda y me metió sus dedos para moverlos al mismo tiempo.
Siguió así hasta que tuve un orgasmo.
-Ah~ Leo, buen chico.
-Me duele abajo, ¿podría mi ama aliviarme?
-Túmbate, yo voy arriba esta vez .
Le puse el condón y después me puse de cuclillas sobre su pene, puse su glande en mi entrada guiándo el pene con la mano y lo metí en mi interior de una.
-Ah~Leo me llenas mucho, eres muy grande.
-Por favor, Emma, mi ama, ayúdame- su respiración estaba agitada, yo le agarré de las muñecas poniéndolas a los lados de su cabeza y empecé a subir y bajar.
Iba despacio porque era agotador, sin embargo se sentía muy bien, aunque me gustaría haberme movido más rápido y sin tanto esfuerzo.
-No puedo más, discúlpame- me agarró de las caderas con sus fuertes manos y moviendo su cadera hacia arriba me penetró profunda y fuertemente.
-Ah~Leo joder, más.

EL CELOSO DE MI SUEGRO (+18)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora