Parte 32

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La próxima vez que mi madre toco a mi hermana, estaba mirando.

No había sido fácil arreglarlo. Cynthia había estado de acuerdo inmediatamente, por supuesto. Mi hermana había pasado el punto de necesitar justificación.

Ella era tan hermosamente complaciente en todo lo que esperabas que se resistiera, ordenes como 'tu hermano necesita estar en el cuarto mientras tu madre te toca'. Pero incluso aunque que ella estaba completamente sexualmente obsesionada conmigo, incluso aunque ella no quería nada más que excitarme...ella aun no me dejaba ver sus tetas.

En casi de que no lo haya mencionado aun: Desesperadamente quería ver sus tetas.

Pero esto era muy genial también.

No, el verdadero esfuerzo había sido en hacer que nuestra madre este de acuerdo con esto. Su lógica interna era casi tan retorcida: Mama me dejaba atar sus pechos, nos servía el desayuno en topless, me mostraba su trasero y (cuando estaba en trance) me dejaba nalguearla hasta el orgasmo mientras estaba completamente desnuda...pero si había una oportunidad de ver a mi hermana desnuda, eso era un no.

Al menos me dejo ver mientras nalgueaba a Cynthia, mientras mi hermana estuviera completamente vestida. Tan pronto como la desnudez estuviera involucrada, estaba completamente fuera de discusión.

Incluso aunque había visto cada parte del cuerpo de mi madre. Incluso aunque Cynthia caminaba con nada más que ropa interior todo el día.

Intente unas cuantas diferentes aproximaciones antes de que finalmente hiciera algún avance. Le recordé que no era sexual, que es una mujer ayudando a otra mujer con su pérdida de peso. Que hacer a mi madre correrse cuando la nalgueo no era sexual, y tampoco esto. Si estuviera equivocado, Mama no lo hubiera hecho. No había nada malo conmigo estando ahí mientras pasaba.

Pero finalmente encontré el problema. No era yo viendo la tocar a Cynthia...era la desnudez, pura y simple.

Si, así es. Mirar a mi Mama tocar a mi hermana estaba bien, mientras ningunas bragas fueran removidas. Si Cynthia no se quitaba sus bragas, no vería nada inapropiado.

Incluso entonces, ella no quería hacerlo. Podía hacer que estuviera de acuerdo en lo abstracto que estaría bien, pero cuando sugería que pasara, Mama se negaba.

Afortunadamente, tenía formas de que hacer que mis parientes hagan...bueno, casi cualquier cosa.

Todo lo que tenía que hacer era recordarles lo que podía pasar si no lo hacían.

*                                                            *                                                       *

"Cuál es tu más grande miedo?" le pregunte a mi madre, inclinándome. Estaba mirando su cara con gran concentración, disfrutando el show. Solo deseaba que fuera posible embotellar su reacción, así pudiera tenerla cada vez que quisiera.

La primera vez que le pregunte a mi madre esto, ella respondió vagamente, como si fuera un episodio intelectual.

Desde entonces, hemos estado entrenando. Probe y practicamos esto una y otra vez; ahora Mama era capaz de decir directamente sus miedos más viscerales.

Y mi madre es una mujer transparentes. Ella mostraba sus miedos en su cara.

"El Juguete," respondió ella pasando saliva. Sus ojos estaban abiertos, sus mejillas se habían palidecido, y la vena en su cuello me dijo que su pulso se había acelerado.

Miedo. No dicen que es el más grande afrodisiaco? Quizás después de las ostras.

"Por qué?" pregunte, sonriendo con anticipación.

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