A meses de nacer mis hijos yo sufriría su ausencia sin haber partido. Extendí por largo tiempo mi viaje por fuera del país, haciendo todo lo que podía desde la oficina o mi hogar. Las obligaciones labores llamaban y no tenía más excusas que dar. Era hora de viajar y contaba con dos días para compartir con ellos.
En adelante y por mucho tiempo tendrán a un padre intermitente. En el mejor de los escenarios, estaría cuatro meses por fuera, quizás más, muchos más. Mi ausencia los confundiría crearía apegos con Evy.
Yo no podía confiar en alguien que conozco poco.
La habitación de Evy esta justo al lado de los niños, junto a las escaleras. Debo pasar por ese sitio todos los días y el misterio que rodea a Evy me hace detener frente la puerta cerrada cada que lo hago.
Hoy no es la excepción. Ella en este instante lleva a los niños al jardín, con Julia siguiendo sus pasos. Julia duda de la historia que ha contado. En su tiempo también lo hice, dudar. La ausencia de errores en su relato me hizo calmar un poco. Y su excelente trabajo hablaba por ella, se esmera en el cuidado de los niños y estos se adaptaron a ella sin problemas.
Solo un vistazo Jason, no tocarás nada.
Entro a la habitación y miro a mi alrededor, parece el sitio de un militar. No hay nada fuera de lugar, las pantuflas debajo de la cabecera de la cama, pijama doblada en la piesera y en la mesa de noche varios libros.
No hay un adorno femenino, una libreta de apuntes, nada. Evy ni siquiera tiene móvil y hasta el momento nadie la ha llamado o pedido verla. Suelto el aire y tomo uno al azar, encontrando que es una enciclopedia para padres.
Ella debió comprarlos para su hijo.
De su embarazo solo se sabe que perdió el niño a horas de nacido, no hay datos del padre o algún familiar. A los Nielsen solo les dijo que no tenia a nadie en el mundo.
En cuanto a la enciclopedia una ojeada muestra sus avances en la lectura. Ha hecho anotaciones, pegó papeles de colores y dobló algunas hojas. Se preparó para la llegada de su bebé, ella debe estar sufriendo la perdida. Que no sea una mujer emocional que rara vez sonría y hable lo necesario, no significa que no le duela la perdida.
Cada uno pasa el duelo de la mejor manera.
La habitación de una persona suele decir mucho de ella. Lo que puedo decir en base a lo que estoy viendo sobre Evy Becker Koch, es que es ordenada en exceso. Padre militar o católico estricto, puede que lo dos. Todo parece estar en el lugar justo y alineado perfectamente.
¿Internado u orfanato? Las dos es posible.
Un baúl al lado del tocador llama mi atención y me hinco ante él al notar que no tiene candado. El ruido del móvil me hace cerrarlo y ver la pantalla.
—Gaspar —saludo al hombre del otro lado —¿Qué tal estas? —pregunto saliendo de la habitación.
—A punto de volverme loco, pero tú no tienes la culpa. —sonríe antes de seguir —el cheque sigue sin ser cobrado y el móvil apagado.
Suspiro deteniéndome en los primeros escalones y miro hacia el salón. Le pedí hacer ambas investigaciones, con la esperanza que el obtuviera mejores resultados. Gaspar era un ex compañero de servicio, se retiró por una lesión en la columna. Hace un par de años decidí contratarlo, era lo más cercano a mi mano derecha en la empresa.
El reemplazo del traidor de Epson.
—¿Estas allí? —pregunta ante el silencio impuesto por mí.
—Estoy pensando.
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INEFABLE
RomanceLibro IV Saga Frederick Jasón Frederick Jr. Solo quería cumplir la última voluntad de Susan, su mejor amiga. Tener un hijo y enseñarle que pudo contar con la mejor de las madres, pero que la ignorancia se lo impidió. Una vez lo logra, contrata los...